La forma más cómoda de conectarnos a una red sin tener que configurar nada es hacerlo mediante DHCP, el protocolo de configuración dinámica de host, quien se encargará de dar una configuración IP automáticamente a los ordenadores cuando se conecten a la red. En caso de no tener un servidor DHCP, o querer aplicar una configuración específica a los ordenadores, entonces tendremos que configurar la IP y los DNS manualmente de la forma que nos resulte más práctica en nuestros sistemas operativos.
La forma estándar para cambiar la IP y los DNS en Windows es directamente desde las propiedades del protocolo TCP/IPv4 de la tarjeta de red, a través de esta ventana que seguramente nos resulte muy familiar.
Aunque es la forma típica, y la más sencilla, si solemos cambiar a menudo de DNS, o queremos configurar más de los dos DNS que nos permite Windows, en vez de tener que hacerlo desde la ventana de propiedades del protocolo IPv4 podemos hacerlo mucho más rápido ejecutando un simple comando, incluso crear un script que, al ejecutarlo con doble clic, se encargue de esta tarea.
A continuación, os explicamos cómo hacer esto.
¿Qué te parece este truco para cambiar los DNS de tu ordenador?