Los radiadores pueden llegar a suponer una parte muy importante de la factura cada mes. Por ello, cometer errores puede hacer que paguemos bastante más. En este artículo vamos a hablar de un error que muchos cometemos. Vamos a explicarte por qué deberías evitarlo y de qué manera afecta al consumo mes a mes. Verás que algunos pequeños cambios que realices en tu día a día al utilizar radiadores pueden ayudarte a ahorrar.
Nunca tapes los radiadores
Puede que en tu vivienda tengas calefacción y radiadores en varios puntos de la casa. Eso significa que, salvo que tengas alguno apagado, cuando la enciendas todos ellos van a calentar. Eso puede parecer útil para secar ropa, por ejemplo. Es algo tentador y que mucha gente hace. Lavamos la ropa, no queremos usar secadora o ponerla fuera porque está lloviendo y lo que hacemos es acercarla a un radiador o incluso ponerla encima.
Pero eso es un error. Con eso lo que estamos haciendo es que ese radiador tenga que consumir muchos más recursos para mantener la temperatura. Por un lado, estamos poniendo algo mojado justo al lado. Pero además, va a estar obstruyendo el paso del aire caliente y no va a funcionar como debería.
Por tanto, nunca hagas esto con tus radiadores. Aunque pueda parecer una buena opción para secar ropa más rápido, lo cierto es que vas a estar gastando más electricidad o gas. No es buena idea si quieres ahorrar al máximo en la calefacción este invierno y aprovechar mejor los recursos disponibles sin malgastarlos.
Pero además, el hecho de tapar los radiadores también puede ser muy negativo a nivel de funcionamiento. Puedes tener problemas en un futuro. Por ello, nunca debes colocar nada encima de los radiadores, ya sea ropa mojada o cualquier otra cosa que pueda impedir que el aire circule con normalidad.
Esto último lo podemos aplicar, por ejemplo, a la hora de poner un sofá justo delante del radiador. Aunque no esté obstruyendo directamente la salida del aire, sí que va a restar temperatura. El calor básicamente lo que hace es chocar contra ese sofá, el cual va a absorber la temperatura y estaremos malgastando energía.
Consejos básicos para ahorrar con los radiadores
Entonces, ¿qué podemos hacer para ahorrar con los radiadores más allá de no poner ropa mojada o taparlos? Vamos a dar algunos consejos esenciales que puedes poner en práctica este invierno y así intentar abaratar la factura lo máximo posible. El objetivo es mantener una buena temperatura, pero gastar lo mínimo.
Pon en práctica estos consejos siempre que puedas y lo notarás en la factura cada mes:
- Mejora el aislamiento de la vivienda, como por ejemplo las ventanas
- Utiliza un termostato inteligente para poder gestionar mejor la temperatura
- Programa el encendido y apagado
- Apaga los radiadores que no necesites
- Mantén una temperatura que no supere los 21 grados
En definitiva, como ves tapar los radiadores y poner ropa mojada para que se seque delante es una mala idea. No lo hagas, ya que puedes gastar más en la factura cada mes pero además podrías poner en riesgo el buen funcionamiento.