Las cámaras de seguridad tienen una clara misión: vigilar una vivienda o lugar donde las ubiques. Sin embargo, también pueden tener otros usos interesantes. En este artículo vamos a hablar de algo menos conocido, pero que no deja de ser una posibilidad que ofrecen estos dispositivos. Vamos a explicarte cómo puedes usar cámaras de vigilancia para ahorrar energía en casa y poder pagar menos en la factura de la luz.
Hay situaciones en las que tener información puede hacer que gastes menos luz. Es decir, saber qué temperatura hace, si está lloviendo o si has dejado una ventana abierta, puede influir a la hora de poner el aire acondicionado o la calefacción. Pero claro, no siempre estás en casa y, por tanto, no tienes ojos para ver todo. Además, hay otros usos que vas a poder darle.
Cámaras para ahorrar luz
Te vamos a mostrar algunos ejemplos sencillos en los que podrías usar tus cámaras de seguridad para ahorrar energía y tener un mayor control sobre el consumo. Hay algunos aspectos básicos que podrías tener en cuenta y que podrían formar parte de tu día a día, con el objetivo de disminuir la factura eléctrica.
Detectar movimiento
Un ejemplo básico es poder detectar movimientos. Esto puede ocurrir al entrar en una habitación, salir a un patio, acceder a un garaje, etc. Al detectar esa presencia, podrían encenderse o apagarse luces de forma automática, así como cualquier otro aparato que tengas vinculado. Esto ayudará a ahorrar energía.
En vez de encender y apagar aparatos de forma manual, algo que puede provocar que estén más tiempo del necesario conectados, este proceso será automático. Aunque esto mismo lo puedes lograr con sensores de movimiento, muchas cámaras los traen incorporados y puedes usarlos de esta forma, además de vigilar.
Revisión remota
Por supuesto, vas a poder tener una visión remota y poder verificar si te has dejado algo encendido. Podríamos mencionar las luces, como algo más habitual, pero también cualquier otro electrodoméstico o aparato, como podría ser la televisión. Si tienes dudas sobre si te has dejado algo encendido, echar un vistazo a la cámara puede ayudarte a ahorrar.
Lógicamente, estas cámaras de vigilancia tendrán que estar situadas en lugares estratégicos, donde podrías dejarte algo encendido. Un ejemplo es la cocina, donde puede haber muchos electrodomésticos que usas en tu día a día y podrías dejarte algo olvidado.
Integrarlas con sistemas de eficiencia energética
Existen sistemas de eficiencia energética que tienen como misión gastar solo lo necesario. Si vinculas las cámaras de seguridad compatibles con estos sistemas, podrás tener una mayor automatización para que se conecten o desconecten aparatos en función de las necesidades. Esto permitirá ahorrar energía.
Aunque no es algo que vas a poder hacer con todas las cámaras, ni para controlar todos los aparatos, siempre que sea posible es una opción a tener en cuenta. Te ayudará a gestionar mejor el consumo de energía en tu vivienda.
Ver posibles problemas
Otro motivo por el cual una cámara de seguridad puede ayudar a ahorrar energía, es detectar posibles fallos. Por ejemplo, una avería en la caldera, en un sistema de refrigeración, que salte algún piloto advirtiendo de que hay algún error, etc. Todo esto puede provocar que haya un mayor consumo de energía, además de deteriorarse antes los aparatos.
Al poder usar cámaras, vas a enterarte lo antes posible de esos errores que pudiera haber. Podrás tomar medidas cuanto antes y evitar que el consumo de electricidad se dispare y tengas que pagar más.
En definitiva, hay situaciones en las que utilizar una cámara de vigilancia puede ayudarte también a ahorrar energía. Estos son algunos de los principales ejemplos, pero realmente puedes darle muchos usos en tu día a día. Usar cámaras IP con almacenamiento en la nube, es un plus.