El correo electrónico es una opción muy utilizada para estar en contacto tanto a nivel personal, como también laboral. Existen muchas plataformas de e-mail, como son Gmail y Outlook. Sin embargo, también son un medio muy utilizado por los piratas informáticos para atacar. En este artículo, nos vamos a centrar en algunos errores que podrías estar cometiendo y que comprometerían tu trabajo. Vamos a darte algunas claves para no tener problemas.
Aunque puedes cometer errores que afecten también a tu e-mail personal, en tu día a día, nos vamos a centrar en el ámbito profesional. Puede que tengas una empresa propia o bien que trabajes por cuenta ajena. Sea cual sea tu caso, es muy probable que uses una dirección de correo electrónico para tu trabajo.
Errores al usar el e-mail en el trabajo
No solo podría comprometerte a ti, sino también a otros trabajadores, en caso de que cometas ciertos errores. Por ello, viene bien revisar en todo momento que estás usando el correo electrónico correctamente y así reducir riesgos que podrían afectar a tu empresa. El objetivo debe ser preservar los datos.
Mezclar el personal y laboral
El primer error, algo bastante habitual, es mezclar el correo personal con el laboral. Esto puede ser un problema importante, ya que comprometerías tu información personal, pero también la de la empresa. Incluso puedes llegar a confundirte a la hora de responder un e-mail, enviar algún archivo adjunto, etc.
Lo mejor es que diferencies claramente lo laboral de lo personal. Crea una cuenta propia para cada caso. Incluso podrías tener varias, en función de qué necesites. Ayudará también a reducir riesgos.
Utilizarlo en equipos desprotegidos
También deberías evitar usar el e-mail del trabajo en equipos desprotegidos. Hablamos de dispositivos que forman o no parte de la empresa, ya que podría ser un ordenador personal, un equipo totalmente ajeno a ti o de la propia empresa. Esto puede suponer un riesgo importante, ya que podrías comprometer la contraseña, principalmente.
¿Qué pasa al usar un equipo desprotegido? Por ejemplo, podría contener un keylogger. Con esto, podrían registrar todo lo que escribes, y esto incluye también la clave de acceso. Podría tener troyanos, colarte algún ransomware, etc.
No usar una contraseña fuerte
Por supuesto, otro error importante es no utilizar una contraseña que sea fuerte y compleja. Ocurre mucho que, por comodidad, ponemos una clave que sea fácil de recordar. Sin embargo, esto es un error de cara a proteger realmente la cuenta y evitar que haya intrusos que puedan averiguarla con facilidad.
La clave debe de ser totalmente única y aleatoria. Asegúrate de usar letras (tanto mayúsculas, como minúsculas), números y otros símbolos especiales. Evita usar palabras fáciles de memorizar o dígitos que puedan relacionarte.
Confundir BCC y CC
Este fallo sí está más orientado al ámbito profesional, ya que es común enviar un correo a múltiples direcciones. ¿Qué significa esto? Por ejemplo, enviar un e-mail a un departamento en concreto, pero que también lo reciban miembros de otra parte de la empresa, determinados trabajadores, etc.
Al añadir las direcciones con BCC, significa que van a quedar ocultas. En cambio, CC sí que muestra todas las direcciones de e-mail, por lo que cualquiera puede ver todas. De cara a preservar la privacidad, y evitar que las direcciones de todos puedan quedar expuestas, lo ideal sería usar BCC. Al menos, en muchos casos.
Abrir cualquier e-mail
Sin duda, es otro error bastante presente. Consiste en abrir cualquier e-mail, sin verificar realmente si se trata de una amenaza o no. Podría contener malware, por ejemplo. También ser un ataque Phishing, con algún enlace que te lleve a una web modificada de forma maliciosa para robar tu contraseña.
Antes de abrir cualquier e-mail, es importante que analices la procedencia. No obstante, por abrirlo no va a ocurrir nada, siempre y cuando no pulses en posibles enlaces falsos o descargues algún archivo adjunto.
En definitiva, estas son algunas cuestiones importantes que debes tener en cuenta para no comprometer el e-mail del trabajo. Es esencial protegerlo, al igual que el tuyo personal. Asegúrate siempre de usar una buena contraseña y no cometer errores en tu día a día. Evitar el correo basura, también es importante.