Añade y elimina fácilmente una unidad de red en Windows

Qué es una unidad de red

Cuando hablamos de una unidad de red nos referimos a la conexión con recursos compartidos en una red local o en la nube que se asigna a una letra de unidad específica en Windows. Estos recursos pueden incluir carpetas, archivos o impresoras alojadas en otros dispositivos dentro de la misma red o en servidores remotos. La asignación de una letra de unidad da un acceso rápido y sencillo a estos recursos, tratándolos como si fueran unidades de almacenamiento locales.

Para crear una unidad de red en Windows 10, es necesario tener acceso a los recursos compartidos, que pueden estar en servidores, otros equipos en la red o servicios en la nube que ofrecen almacenamiento compartido. Utilizando la función «Mapear unidad de red» en el Explorador de Archivos, se puede asignar un recurso compartido a una letra de unidad seleccionada durante el proceso de mapeo. Debes tener en cuenta que, en caso de que el recurso compartido esté protegido por contraseña, se requerirá la autenticación antes de establecer la conexión.

Las unidades de red ofrecen diversas ventajas en Windows 10, entre otras, su capacidad para proporcionar un acceso rápido a recursos compartidos sin necesidad de recordar rutas de acceso largas. También se integran de manera fluida en el Explorador de Archivos, simplificando la gestión y navegación. Además, posibilitan el acceso a recursos remotos, ya sea en la misma red local o en entornos de almacenamiento en la nube. Esto resulta algo a tener en cuenta en entornos empresariales donde la colaboración y el intercambio de archivos son fundamentales para el desarrollo de las actividades.

Gestionar unidades de red en Windows 10

Como decimos, es posible conectar unidades de red al sistema operativo de Windows. Ya sabemos que es el más utilizado entre los usuarios de equipos de escritorios hoy en día. Por ello, esto puede venir bien a muchos que deseen utilizar este tipo de dispositivos. Podemos conectar equipos adicionales y tenerlos conectados a la red para poder acceder desde otros sistemas en nuestro hogar o lugar de trabajo. Contar con un disco duro externo es algo que se ha convertido en casi esencial para muchos usuarios. Un lugar donde poder crear copias de seguridad, almacenar archivos y documentos sin tener que usar la memoria del ordenador. Además, también podemos liberar espacio. Ahora bien, la posibilidad de tenerlo disponible en la red hace que los NAS hayan aumentado considerablemente su presencia.

La cuestión es que en ocasiones los usuarios no saben bien cómo agregar esas unidades. Es importante que estén bien configuradas y que podamos acceder a la información desde cualquier lugar y dispositivo. En muchas ocasiones tendremos que crear una clave de acceso, así como un usuario. Esto permitirá autenticarnos y poder acceder con normalidad. Vamos a tener básicamente dos opciones para conectar unidades de red en Windows. Una de ellas es a través del explorador de archivos, la más visual y sencilla, y otra es mediante el Símbolo del sistema. Mostraremos los pasos necesarios en ambos casos. De esta forma conoceremos el procedimiento.

Antes de intentar conectar a una unidad de red, es completamente necesario que tengamos un servidor NAS configurado correctamente para acceder a sus recursos a través de la red local. Este tipo de conexiones a unidades de red deben hacerse a través de la red local, nunca a través de Internet. Para configurar adecuadamente un servidor NAS y poder acceder desde la red local, es necesario realizar los siguientes pasos:

1. Conectar el NAS e instalar los discos duros, inicializar el servidor y empezar con la configuración más avanzada.
2. Crear los conjuntos de almacenamiento o RAID con los diferentes discos duros que hayamos introducido en el NAS
3. Una vez que los hayamos creado, debemos crear los volúmenes de datos donde se almacenará toda la información.
4. Crear las carpetas compartidas con los permisos de usuarios y grupos correctos
5. Revisar que solamente los usuarios que nosotros queramos pueden acceder a los recursos compartidos.

Una vez que lo hayamos hecho todo, si en nuestro NAS o servidor doméstico hemos creado un nombre de usuario y contraseña que coincide con el de nuestro sistema operativo Windows, entonces el acceso es directo y no tendremos que introducir ninguna contraseña adicional, el acceso es directo y transparente de cara al usuario. Por lo tanto, nuestra recomendación es que crees un usuario en el NAS que coincida con el nombre de usuario y también la contraseña de acceso al servidor doméstico.

En el caso de que quieras acceder a ellas a través de Internet o de cualquier lugar, lo que debes hacer es conectarte a un servidor VPN que esté en la misma red que el NAS o servidor doméstico, de esta forma, todo el tráfico irá perfectamente cifrado y autenticado desde el origen hasta el destino, y no tendremos ningún tipo de problema de seguridad. El protocolo de VPN que os recomendamos usar es WireGuard, ya que es el más rápido de todos y el que nos proporcionará la menor latencia de la conexión posible, en caso de no estar disponible, usar OpenVPN es muy buena opción, así como usar IPsec para proteger nuestras conexiones.

Conectar y desconectar unidades de red desde el explorador

La primera opción que tenemos es la de conectar una unidad de red en Windows a través del explorador de archivos. El proceso es muy sencillo. Los pasos son los siguientes:

• Abrimos el explorador de archivos en el ordenador
• Vamos a la opción «Este equipo» en el menú lateral, a la izquierda
• Una vez aquí, debes elegir la opción «Red»
• Aparecerán una serie de opciones disponibles
• Ve a donde indica «Conectar unidad de red»

Ahora, sigue los pasos. Solo tendremos que seleccionar la que nos interesa y posteriormente nos aparecerá una nueva ventana para asignar una letra a la unidad (lo normal que venga la Z predeterminada). Podemos poner la ruta de forma manual, en caso de que sepamos cuál es, o darle a examinar para seleccionarla.

También veremos que de forma predeterminada viene marcada la opción de que se conecte siempre que iniciemos Windows. Esto es interesante si vamos a conectar un disco duro que vayamos a utilizar normalmente. Incluso podemos darle una contraseña. Esta última opción es muy aconsejable, ya que así mantendremos nuestros datos correctamente protegidos y evitaremos que posibles intrusos lleguen a acceder al disco duro o al dispositivo que estemos conectando. Siempre debemos cifrar las memorias que agreguemos y que puedan estar conectadas a la red.

Un disco duro conectado a la red va a ayudarnos a crear copias de seguridad, por ejemplo. A fin de cuentas es un disco más que vamos a tener en nuestro equipo. Podemos usarlo también para aumentar la capacidad disponible y poder guardar contenido sin problemas de que se agote la memoria que tenemos en nuestro ordenador. También para poder intercambiar archivos entre diferentes dispositivos de una forma sencilla.

Para desconectar una unidad los pasos también son muy sencillos y pueden variar dependiendo de la versión de Windows que tengas pero siempre serán parecidos. En este caso lo que debemos hacer es:

• Abrimos el explorador de archivos
• Entramos en el apartado «Este equipo» en el menú lateral
• Elegimos la opción «Ubicaciones de red»
• Vemos todas las opciones y funciones disponibles
• Buscamos la unidad que queremos quitar como, por ejemplo, un disco duro
• Elegimos esa unidad y tocamos para eliminarla siguiendo

Tenemos que hacer clic con el segundo botón del ratón encima de la unidad y darle a Desconectar, como aparece en la imagen de abajo. Como vemos, es un proceso muy rápido y sencillo. Automáticamente ya se desconectará y dejará de estar disponible.

¿Qué es mapear unidades de red?

Esto se refiere a la configuración de una carpeta en un PC de forma remota, para que se puedan compartir archivos u otras carpetas a través de una red LAN o local. Al realizar el mapeado en Windows, permitiremos que a una misma unidad puedan acceder otros usuarios de forma sencilla. Al disponer de esta unidad, podemos almacenar información como archivos y carpetas de forma rápida mientras lo compartimos con otros usuarios.

Tener unidades compartidas, no solo se reduce a un sistema operativo, si no que podemos crear carpetas compartidas entre diferentes sistemas operativos como puede ser entre Windows y MAC. Incluso en grandes organizaciones, todo esto se puede gestionar desde Windows Server, donde podremos crear directivas de acceso a las unidades, generar accesos personalizados mediante grupos de directorio activo, de forma que se mapean de forma automática.

Windows también nos da muchas opciones para gestionar los permisos de cada unidad, incluso de forma compleja, con usuarios con diferentes permisos sobre una unidad, dependiendo del grupo de directorio activo. A mayores nos permite gestionar el espacio asignado a las carpetas y el tamaño de los archivos que podemos dejar en ellas estableciendo unos máximos.

Si estas no se mapean de forma automática, incluso estableciéndose desde el servidor, una solución puede ser actualizar las directivas y reiniciar los equipos. Y como última instancia, acudir a Directorio Activo, y asignando la unidad en el propio usuario, sin aceptar los avisos que este nos muestra.

Estas pueden dar muchos más problemas, pues recientemente se reportaron problemas en cuanto a los accesos a archivos, donde estos se quedan con los iconos en gris y estos no son accesibles, o bloqueos que se producen si los usuarios apagan el equipo con algún archivo abierto sin cerrar previamente. Entre otros menos conocidos.

Mapear con un archivo .bat

Cuando tratamos con grandes cantidades de usuarios, podemos establecer el mapeado de las unidades de red mediante un archivo .bat, el cual se puede generar de forma automática desde el primer momento que se genera un nuevo usuario.

Lo primero que tendremos que hacer es la creación del nuevo usuario, ya sea directamente en Directorio Activo, o mediante algún programa de terceros el cual esté directamente conectado con DA. Una vez creado el usuario, procedemos a crear su unidad de red, la cual tendrá unos valores por defecto, por los cual tendremos que configurar los permisos para el mismo usuario y si es necesario para los grupos que correspondan.

Esto se puede configurar para que se cree un archivo .bat, el cual es un ejecutable que hace que la unidad de red sea mapeada en el usuario cada vez que esté inicia sesión en el ordenador. Esto lo podemos ver en la pestaña de «Perfil» dentro de Directorio Activo. Esta misma pestaña, nos puede ayudar a solucionar algunos problemas, concretamente con el apartado donde se establece la letra en la que se montará la unidad. Este archivo se puede generar también de forma manual y asignar a los usuarios, pero en este caso puede resultar complicado, sobre todo al tener una gran base de usuarios, por lo cual esto facilita mucho la administración.

Existe un fallo el cual hace que el usuario no tenga su unidad de red mapeada. Esto se puede solucionar asignando la letra en la pestaña que indicamos de Directorio Activo, pero sin aceptar los posibles mensajes que este nos muestra. Otra opción es realizar una actualización de directivas como gpupdate, incluso con un /force. Esto hace que todo se tenga que recargar en el equipo, incluido el .bat del que hablamos. Otra opción, es reiniciar el ordenador.

Desconectar una unidad desde el Símbolo del sistema

Adicionalmente, más allá de esta opción que hemos mencionado también podemos desconectar una unidad desde el Símbolo del sistema. Es muy fácil y únicamente tendremos que conocer la letra de la unidad y ejecutar el comando que vamos a mostrar. Como mencionábamos anteriormente, es posible que llegado el momento ya no nos interese tener una unidad en concreto conectada a la red. Solo tenemos que darle desconectarla por este método.

Para ello tenemos que ejecutar el siguiente comando:

Por ejemplo, sería Net Use Z: /Delete. Automáticamente, como en el caso anterior, esa unidad de red quedaría desconectada del sistema. Si la unidad de red que queremos desmontar tiene otra letra asignada, únicamente tendríamos que cambiar dicha letra en el comando y listo. Es sencillo y rápido, sin necesidad de instalar nada y únicamente utilizando el Símbolo del sistema en Windows 10.

Establecer unidades por directiva de grupo

Si contamos con sistemas que tienen una gran cantidad de usuarios, es probable que sea necesario configurar diferentes accesos. Sobre todo, cuando tenemos gran cantidad de carpetas de red para compartir. No todos los usuarios tienen por qué tener acceso a estas unidades, por lo cual se deben establecer algunas directivas que nos ayuden en el proceso de mapeado. Todo esto se hace buscando siempre la máxima seguridad, y que la información se quede más contenida donde sea necesario poder verla o manipularla.

En este caso podemos utilizar diferentes formas, pero la más recomendable es por Directorio Activo. Si bien al crear usuarios podemos asignar carpetas de red personales, mediante los grupos podemos asignarles nuevas carpetas a los usuarios. Esto a nivel organizativo es muy práctico, ya que tenemos dos formas de administrar todo esto. La primera es buscando al usuario en cuestión, y ver que grupos tiene asignados, y como consecuencia la carpeta a la que se refiere dicho grupo. Y, por otro lado, podemos buscar el grupo como tal, y ver los miembros que tiene acceso a la unidad.

Cuando creamos grupos en directorio activo, se pueden establecer scripts que apuntan a una unidad de red. Estos hacen que la unidad se mapee al usuario al cual se le ha asignado de forma automática. Si bien no es un sistema infalible, es muy útil debido a la baja tasa de fallos que tiene. De todas formas, es muchas ocasiones los problemas que puede causar, se solucionan con actualizaciones de directivas o con simples reinicios de los equipos. Por lo cual esta es una opción que, a nivel organizativo y administrativo, nos da muchas ventajas y nos permite ahorrar mucho tiempo. Lo más recomendable, es guardar copias de seguridad de los scripts, para que, en caso de necesitar borrar un grupo, se pueda reasignar rápidamente.

Mantenimiento de las unidades

Una vez las unidades de red se encuentran creadas, es esencial que estas se mantengan en buen estado. Realizar mantenimiento de las unidades de red en Windows es importante para asegurar el correcto funcionamiento de la red y garantizar la disponibilidad de los recursos compartidos. Algunas recomendaciones para realizar el mantenimiento de las unidades de red en Windows son:

• Verificar el estado de las unidades de red: Se debe verificar el estado de las unidades de red de forma regular para asegurarse de que funcionen correctamente. Esto se puede hacer mediante el uso del Panel de Control y la sección de Administrador de dispositivos. Aunque es algo que se suele olvidar, es recomendable que lo hagas periódicamente.
• Limpiar los archivos temporales: Es recomendable limpiar los archivos temporales de la unidad de red para liberar espacio en disco y mejorar el rendimiento de la unidad. Esto se puede hacer utilizando la herramienta de limpieza de disco en Windows. Si no quieres usar la herramienta por defecto puedes usar programas especializados capaces de programar una limpieza cada semana o cada varios días y así podrás olvidarte de que los archivos temporales estén suponiendo un problema para tu ordenador.
• Actualizar los controladores: Los controladores son esenciales para el correcto funcionamiento de las unidades de red. Se recomienda mantener los controladores actualizados regularmente para evitar problemas de compatibilidad y mejorar el rendimiento.
• Verificar la configuración de seguridad: La configuración de seguridad en las unidades de red es crucial para garantizar la privacidad y protección de los datos. Se debe verificar que se hayan establecido las medidas de seguridad adecuadas, como el uso de contraseñas seguras y el cifrado de los datos.
• Realizar copias de seguridad: Es importante realizar copias de seguridad de los datos almacenados en las unidades de red regularmente para evitar la pérdida de información en caso de fallos en la unidad o ataques de malware. Esto se puede hacer mediante el uso de software de copia de seguridad o servicios en la nube. Esto se puede complementar con borrados de esas copias de seguridad, para que estas desaparezcan pasados unos días. De forma que el espacio que necesitamos para ello, no sea demasiado.

En definitiva, siguiendo estos pasos que hemos mencionado podremos agregar o quitar una unidad de red a nuestro Windows. Como hemos visto es un proceso sencillo y rápido, accesible a cualquier usuario. Ya podremos tener nuestra unidad de red completamente operativa para usar en el sistema operativo de Microsoft. Además, en caso de que en un momento dado queramos quitarla solo tenemos que seguir los pasos que también hemos mencionado. Podemos hacer esto con cualquier unidad que queramos agregar en Windows.

Hay que tener en cuenta que cada vez tenemos más dispositivos conectados a la red. Tenemos más equipos que se conectan al router o a cualquier ordenador que tengamos en nuestra vivienda. En ocasiones es necesario configurarlo correctamente y evitar así problemas que pueda afectarnos. No obstante, algo esencial es que el sistema operativo reconozca esa nueva unidad y la conectemos correctamente. De lo contrario no podríamos acceder al contenido ni utilizarlo adecuadamente.

Una alternativa: la nube

Si no quieres añadir unidades de red o te parece algo demasiado complejo e innecesario, una alternativa interesante que puedes tener en cuenta es la de usar servicios de almacenamiento en la nube que nos permitirán tener a mano cualquier documento o archivo que quieras. No solo podrás acceder desde tu ordenador sino que también podremos acceder desde otros dispositivos como puede ser la tablet, el teléfono móvil o un ordenador que hayas cogido prestado y no uses habitualmente (en la oficina, en casa de tus padres…)

Hay muchos servicios de almacenamiento en la nube con los que no tendrás que hacer este proceso y algunos de los más populares son Google Drive, Dropbox o MEGA y todos ellos nos permiten guardar todo tipo de archivos o comprar más espacio para tener suficiente para cualquier circunstancia así que dependerá de ti que escojas una opción u otra.

En cualquier caso y aunque la nube te parezca más cómodo, saber cómo se añade o se quita una unidad de red es un proceso que conviene que conozcas y que no es complejo.

Cómo eliminar las opciones de asignar o desconectar unidad de red

Windows 10 es a día de hoy el sistema operativo más utilizado en equipos de escritorio. Por ello cuando tratamos cualquier tema relacionado con redes y vinculado a ese sistema puede beneficiar a muchos usuarios. En este caso vamos a tratar de explicar cómo evitar que otros puedan mapear la red, para asignar un nuevo dispositivo. También evitar que puedan desconectar una unidad de red.

Cuando asignamos una unidad de red, podemos acceder a archivos y carpetas como un servidor FTP en Windows 10. Es relativamente sencillo asignar una unidad de red mediante el Explorador de archivos de Windows y el Editor de políticas de grupo. Ahora bien, esto también está disponible para que otros usuarios mapeen una unidad o desconecten una que está conectada. Por ello en ocasiones es mejor cambiar la configuración.

Editor de directivas de grupo

Para ello, el primer paso es entrar en el Editor de directivas de grupo. Tenemos que pulsar la combinación de teclas Windows+R y ejecutamos gpedit.msc. Una vez aquí tenemos que pinchar en Configuración de usuario, vamos a Plantillas administrativas, Componentes de Windows y Explorador de archivos.

Aquí tenemos que buscar la opción Quitar “Conectar a unidad de red” y “Desconectar de unidad de red”. Tenemos que hacer doble click y posteriormente marcamos la opción Habilitar. Le damos a Aplicar y aceptamos los cambios.

Como vemos es un proceso muy sencillo y rápido para los usuarios de Windows 10.

Editor de registro

Otra opción que tenemos es la de utilizar el Editor de registro. Nuevamente pulsamos la combinación de teclas Windows+R y esta vez ejecutamos Regedit. Una vez dentro tenemos que ir a HKEY_CURRENT_USER, SOFTWARE, Microsoft, Windows, Current Version, Policies y Explorer.

Aquí tenemos que crear un nuevo valor de DWORD (32-bit) con el nombre NoNetConnectDisconnect. De forma predeterminada el valor será 0, pero tenemos que ponerlo en 1.

Simplemente eso. A partir de este momento ya evitaremos que otros puedan mapear una unidad de red o desconectarla en caso de que esté conectada. Una manera de evitar problemas si compartimos el equipo con otros usuarios.

Aumento de dispositivos conectados a la red

Es una realidad que cada vez tenemos más equipos conectados a la red y que forman parte de nuestro día a día. Hablamos de servidores NAS, impresoras y otros muchos dispositivos que podemos gestionar desde nuestro sistema. Asignar unidades de red es algo que está muy presente. Podemos fácilmente configurarlo y poder controlar su uso.

Son diferentes los sistemas operativos que podemos utilizar para ello. Ahora bien, Windows sigue siendo el más usado en equipos de escritorio. Mapear unidades de red es muy sencillo desde el sistema de Microsoft. Podemos asignar una unidad o desconectar algún dispositivo que por algún motivo no nos interesa o no queremos que esté conectado.

Eso sí, en todas las situaciones debemos mantener la seguridad. No podemos cometer errores que puedan comprometer nuestros equipos, que puedan, en definitiva, dañar nuestra privacidad. Por ello recomendamos contar con herramientas de seguridad, tener los sistemas actualizados correctamente y siempre mantener el sentido común. Especialmente cuando hablamos de dispositivos conectados a la red hay que tomarse muy en serio todo lo relacionado con la seguridad.

A la hora de tener más dispositivos conectados a la red hace que también debamos de extremar las precauciones de seguridad. El objetivo, como siempre, es evitar problemas que afecten al buen funcionamiento.