Hoy en día es muy importante contar con una buena señal de red inalámbrica. La mayoría de los dispositivos modernos son compatibles con el Wi-Fi y no necesitamos usar el cable para navegar por Internet o utilizar cualquier servicio online. Con el paso del tiempo la tecnología ha mejorado notablemente. Tenemos equipos más potentes, más preparados para ofrecer resultados positivos. Sin embargo en muchas ocasiones la cobertura no es la mejor y no logramos tener una buena velocidad si navegamos sin cables. En este artículo vamos a hablar de la posibilidad de cambiar la antena del router para mejorar el Wi-Fi.
Vamos a dar algunos consejos esenciales para lograr una mejor cobertura Wi-Fi. Una serie de puntos interesantes que podemos aplicar para tener mejor conectividad y evitar problemas con zonas muertas y la temida pérdida de velocidad.
Ubicar correctamente el router
Un primer punto a tener muy en cuenta es la ubicación que vamos a darle al router. De nada sirve cambiar la antena y tener una potente, si luego vamos a colocarlo en un lugar erróneo y no vamos a aprovechar realmente los recursos que tenemos.
Lo ideal es que el router esté en un lugar céntrico de la vivienda. Debemos tenerlo alejado de otros dispositivos que puedan interferir y de muros u obstáculos. Si lo vemos necesario lo colocaremos en la zona donde realmente vamos a utilizar la señal.
Tener el aparato actualizado
Por supuesto también debemos tener el dispositivo correctamente actualizado. En muchas ocasiones pueden aparecer fallos que impidan navegar con normalidad por la red. Incluso podría haber vulnerabilidades que puedan ser explotadas por terceros.
Por tanto, siempre debemos actualizar el firmware del router. Es esencial para no tener complicaciones al navegar, reducir el riesgo y, por supuesto, conseguir que la cobertura Wi-Fi sea lo mejor posible.
Evitar problemas de seguridad
Otra cuestión a tener en cuenta es la seguridad. Nunca debemos tener el router desprotegido, sin un buen cifrado y clave. Esto podría abrir la puerta a posibles intrusos, por lo que siempre hay que utilizar contraseñas que sean seguras y así reducir el riesgo.
Pero no solo basta con la contraseña que pongamos al Wi-Fi, sino también el tipo de cifrado. Hay que evitar aquellos obsoletos como WEP. Debemos utilizar únicamente los que están actualizados y son fiables hoy en día.
En definitiva, estas son algunas cuestiones que podemos tener en cuenta para lograr mejorar la velocidad del Wi-Fi al navegar por Internet. Es importante que nuestro router ofrezca un rendimiento óptimo y siempre nos conectemos correctamente.