Contar con una VPN es algo bastante habitual, pero debes saber que no todas son iguales. No cuentan con las mismas características, algunas son gratuitas y otras de pago, pueden proteger mejor o peor la privacidad, etc. En este artículo, vamos a hablar de las diferencias entre VPN personales y las que se consideran profesionales o empresariales. Según sea el caso de para qué las vas a utilizar, puedes encontrarte con diferencias.
El objetivo es que, en caso de que vayas a instalar una VPN, sepas cuál te conviene más. De esta forma, podrás proteger tus conexiones y lograr una navegación óptima, sin cortes ni problemas velocidad. No es igual usarla para uso personal, cuando te conectes a una red pública, por ejemplo, que en una empresa. Además, también hay que tener en cuenta las VPN comerciales, para proteger nuestra identidad en Internet, algunas de las más populares son:
Diferencias entre VPN personal y profesional
Hay muchos tipos de programas en los que hay diferencias entre la versión personal y profesional. La primera suele ser más básica, con más limitaciones, pensada para un público que no tiene grandes exigencias. En cambio, las versiones profesionales sí son más completas y pueden servir para organizaciones.
Cantidad de usuarios que se conectan
La primera diferencia es en la cantidad de usuarios que admite. Si hablamos de una VPN doméstica, a nivel personal, lo normal es que solo acepte una conexión. Básicamente, vas a instalar ese programa en tu dispositivo y tendrás acceso a un servidor o servidores, para cifrar la conexión y ocultar tu IP privada.
En cambio, una VPN orientada más al ámbito profesional, puede ser más completa en este sentido. Va a permitir más conexiones al mismo tiempo, por lo que podrán conectarse múltiples usuarios. En una empresa, podrían acceder muchos trabajadores a esa red.
Tipo o cantidad de servidores
También hay que hacer mención a los servidores. Aunque una VPN personal puede tener muchos servidores, son las empresariales las que suelen tener más opciones y, además, de mayor calidad. Esto es lo que va a permitir a los usuarios conectarse y tener una buena velocidad, sin cortes o problemas.
No obstante, en todos los casos siempre tendrás que elegir muy bien a qué servidor conectarte, con el objetivo de lograr una conexión adecuada. Asegúrate de revisar bien la velocidad, así como posibles cortes.
Seguridad y privacidad
Aunque en ambos casos puedes mejorar la seguridad y la privacidad, las VPN profesionales tienen características más avanzadas. Piensa que están diseñadas para proteger a una empresa, a toda una organización. Por tanto, va a tener seguridad avanzada, con medidas de autenticación más fuertes, túneles de cifrado de mayor seguridad y mayor protección.
Para un usuario doméstico, básico, realmente no necesita tantas medidas adicionales. En cambio, cuando hablamos de proteger la conexión de una gran organización, entonces sí viene bien contar con estos añadidos.
Mayor integración
Una VPN personal, a nivel doméstico, realmente no requiere de una gran integración. Simplemente la instalas en tu dispositivo, como puede ser un ordenador o móvil, y listo. Es más simple y cumple con su función. En cambio, una VPN profesional sí que puede necesitar de mayor integración.
Piensa en una empresa, donde puede haber sistemas muy variados, con muchos equipos conectados. Además, puede haber servicios o aplicaciones específicos de esa organización. Es posible que los empleados necesiten integrar esa VPN a la infraestructura empresarial, por lo que es diferente a una versión para usuarios particulares.
En definitiva, estas son las principales diferencias entre una VPN personal y otra empresarial. Aunque el funcionamiento sea similar, puedes encontrarte con algunos factores determinantes para elegir cuál te interesa más.