¿Te vas a conectar con escritorio remoto a tu PC? Con estos consejos no te hackearán
Lo admito, trabajar desde casa me encanta. Me siento todo un afortunado por no tener que meterme cada mañana en el coche para entrar en atascos, llegar a un puesto de trabajo, comer fuera de casa… Pero currar en mi cueva, tiene una serie de inconvenientes desde el punto de vista de la seguridad informática de la empresa. Hay que llevar cuidado para no poner en riesgo la información de quien te paga el sueldo, y por eso debes conocer estas prácticas para mejorar la seguridad del escritorio remoto.
Trabajar de forma remota se ha convertido en algo común, y con ello, el uso del escritorio remoto también ha aumentado. Sin embargo, esta herramienta que facilita el acceso a nuestro equipo desde cualquier lugar también trae consigo riesgos importantes si no se utiliza de forma segura. Hoy te voy a contar las mejores prácticas para proteger tus conexiones de escritorio remoto y evitar que alguien no deseado acceda a tu información.
¿Qué es el escritorio remoto y por qué es importante protegerlo?
El escritorio remoto permite conectarte a tu ordenador desde otro dispositivo, ya sea para trabajar, solucionar problemas o gestionar tareas. Es como tener acceso a tu oficina desde cualquier lugar con Internet. Pero, al igual que las puertas de tu casa, esta herramienta necesita estar bien protegida para evitar que intrusos aprovechen posibles vulnerabilidades.
El problema es que el escritorio remoto puede convertirse en un blanco fácil para los atacantes si no se configura y utiliza correctamente. Por ejemplo, un hacker podría interceptar tu conexión o adivinar tu contraseña para acceder a tus archivos. Por eso, es fundamental seguir ciertas prácticas de seguridad.
Consejos clave para proteger tus conexiones remotas
El uso de escritorio remoto puede ser muy conveniente, pero también implica ciertos riesgos si no se toman medidas preventivas. A continuación, te comparto las principales prácticas que debes seguir para mantener tus conexiones remotas seguras:
- Usa contraseñas fuertes y únicas: Tu contraseña es la primera línea de defensa. Asegúrate de crear una contraseña que sea difícil de adivinar, con al menos 12 caracteres que combinen letras mayúsculas y minúsculas, números y símbolos. Evita usar información personal como tu nombre o fechas importantes. Si te resulta complicado recordar tantas contraseñas, un gestor de contraseñas puede ser de gran ayuda.
- Activa la autenticación multifactor (MFA): Con la MFA, no basta con ingresar tu contraseña para acceder. También necesitas un segundo método de verificación, como un código que recibes en tu teléfono. Esto hace que sea mucho más difícil para los atacantes entrar en tu sistema, incluso si logran conseguir tu contraseña. Dependiendo del software que utilices para acceder por escritorio remoto, es posible que esta característica no la tengamos disponible. En caso de que sí la tengamos disponible, nuestra recomendación es que la actives siempre, para añadir una capa de seguridad realmente importante
Además de que la autenticación sea robusta, también es muy importante tomar las siguientes precauciones:
- Mantén tu software actualizado: Las actualizaciones no solo traen mejoras, sino también parches de seguridad que corrigen fallos que los atacantes podrían explotar. Configura las actualizaciones automáticas en tu sistema operativo y en las aplicaciones que utilices para escritorio remoto. Esto es esencial para esta protegidos, continuamente se descubren fallos en el funcionamiento, pero también fallos de seguridad que podrían permitir a un atacante acceder a nuestro escritorio sin la autenticación requerida, por lo que es crítico que lo actualices.
- Limita los usuarios con acceso: Solo las personas que realmente necesiten usar el escritorio remoto deberían tener acceso. Aplica el principio de mínimo privilegio: otorga los permisos estrictamente necesarios para que cada usuario haga su trabajo.
- Configura tiempos de desconexión automática: Si te olvidas de cerrar una sesión remota, dejas la puerta abierta para que cualquiera entre. Los tiempos de desconexión automática cierran la sesión después de un periodo de inactividad, reduciendo este riesgo.
- Supervisa las conexiones y audita el acceso: Es importante saber quién accede a tu escritorio remoto y cuándo lo hace. Configura registros de actividad para detectar intentos sospechosos y revisa periódicamente estos registros para prevenir problemas.
En el caso de que te vayas a conectar desde algún lugar público, como un hotel, restaurante, aeropuerto o cualquier otro sitio con conexiones Wi-Fi no confiables, entonces os recomendamos lo siguiente:
- Usa una red privada virtual (VPN): Una VPN cifra tu conexión y oculta tu dirección IP, lo que dificulta que alguien pueda interceptar tus datos. Siempre que te conectes de forma remota, hazlo a través de una VPN confiable. Esto añade una capa de cifrado a todas tus conexiones, es recomendable que te conectes al servidor VPN que esté en tu hogar, para que así todo quede como si realmente estuvieras allí. Si no tienes un servidor VPN en casa, entonces puedes usar servicios de VPN comerciales.
¿Por qué estas prácticas son esenciales?
El cibercrimen está en constante evolución, y los atacantes buscan aprovechar cualquier descuido. Una mala configuración de escritorio remoto puede ser la puerta de entrada para malware, ransomware o el robo de información confidencial. Además, seguir estas recomendaciones no solo protege tus datos, sino que también mejora el rendimiento y la estabilidad de tus sistemas. Dedicar tiempo a implementar estas medidas te ahorrará problemas mayores en el futuro.
Cuidar la seguridad del escritorio remoto es más sencillo de lo que parece, pero requiere compromiso. Con estas prácticas, no solo estarás protegiendo tus dispositivos, sino también tu tranquilidad.
