¿Necesitas una VPN para tus dispositivos de domótica? Sí, y estos son mis motivos

En un mundo cada vez más conectado, los dispositivos de IoT (Internet de las Cosas) se han convertido en herramientas esenciales para muchas empresas y hogares. Desde cámaras de seguridad hasta sensores repartidos por toda nuestra casa, estos dispositivos nos facilitan la vida y mejoran la productividad. Sin embargo, también presentan un reto: la seguridad de los datos que intercambian. Ahí es donde entra en juego el uso de un servicio VPN.
Una VPN (Red Privada Virtual) no solo es útil para proteger tus dispositivos personales, sino que en el contexto de IoT, se vuelve prácticamente indispensable. Con una VPN, puedes garantizar que todas las comunicaciones entre tus dispositivos estén cifradas, protegiendo la información que circula por la red de miradas no deseadas y accesos no autorizados. Ahora vamos a ver por qué deberías considerar seriamente su implementación en tus proyectos de IoT.
Para tener mucho más protegidos tus datos
La principal razón para utilizar una VPN en tus proyectos de IoT es la seguridad. A medida que más dispositivos se conectan a Internet, el riesgo de sufrir un ataque también aumenta. Los dispositivos IoT, en su mayoría, no están diseñados pensando en una seguridad total, lo que los convierte en objetivos fáciles para ciberdelincuentes. Con una VPN, encriptas las conexiones entre tus dispositivos y la red, lo que dificulta el acceso no autorizado a la información.
Además, al utilizar una VPN, las direcciones IP públicas de tus dispositivos quedan ocultas. Esto significa que los atacantes no podrán rastrear fácilmente la ubicación de tus dispositivos o infiltrarse en tu red local. Así, proteges tanto los datos que se transmiten como los propios dispositivos conectados.
Para ahorrar en costes
Una ventaja menos conocida del uso de VPN en proyectos de IoT es el ahorro en costes. Al implementar una VPN, puedes evitar el pago de una dirección IP fija para cada uno de tus dispositivos. Esto es especialmente útil cuando tienes un gran número de dispositivos conectados, ya que los proveedores de servicios de Internet suelen cobrar tarifas adicionales por las IPs fijas.
Por otro lado, una VPN también puede reducir el consumo de datos. Al comprimir el tráfico que pasa por la red, especialmente en conexiones móviles, te ahorra ancho de banda y, en consecuencia, te ayuda a disminuir la factura de tu proveedor de Internet.
Porque es más flexible y fácil de integrar
Con una VPN, la gestión de dispositivos IoT también se vuelve más sencilla y flexible. Puedes conectar múltiples dispositivos de manera remota a través de la misma red privada, sin preocuparte por abrir puertos o configurar direcciones IP públicas en cada uno de ellos. Esto facilita la integración de nuevos dispositivos, ya que todos se conectan de manera segura y eficiente a través del mismo túnel VPN.
Además, este tipo de conexiones no se limitan a una red fija, sino que puedes implementarlas en diferentes ubicaciones, permitiendo una mayor flexibilidad. Por ejemplo, si gestionas sensores o cámaras en distintas ciudades, todos pueden estar conectados de forma segura a la misma red VPN sin importar la distancia.
Porque mejora tu privacidad
Otro de los beneficios de las VPNs es la privacidad que proporcionan a tus dispositivos IoT. Al enmascarar la IP de los dispositivos, no solo aumentas la seguridad, sino que también proteges la identidad de los usuarios o la ubicación de los dispositivos, lo cual es crucial para empresas que manejan datos sensibles. Esto es particularmente importante cuando trabajas con redes públicas o en lugares donde la ciberseguridad es más débil. Además, el tráfico de tus dispositivos no puede ser fácilmente monitoreado por proveedores de servicios o posibles atacantes. Es un paso adicional que puede marcar la diferencia entre una red vulnerable y una segura.
El uso de una VPN en proyectos de IoT no es solo recomendable, es una necesidad en muchos casos. Aporta una capa extra de seguridad, ayuda a reducir costes y facilita la integración de múltiples dispositivos a la red. En un mundo donde la conectividad es esencial y las amenazas están a la orden del día, contar con una VPN garantiza que tu red y tus dispositivos estén protegidos en todo momento. Así que, si aún no has considerado su implementación, es hora de que lo hagas.
Hay que diferenciar bien entre los servicios de VPN como NordVPN, Surfshark o PureVPN entre otros, que nos permitirán salir a Internet ocultando nuestra dirección IP pública, de un servidor VPN configurado en nuestro router o NAS para acceder de forma remota a la red local doméstica de forma segura. Además, se podrían combinar ambos tipos de VPN sin ningún problema, siempre y cuando tu router soporte este funcionalidad tan interesante. Los routers ASUS, AVM y cualquier router con soporte para servidores y clientes VPN tendrán esta posibilidad.