Vaya, ya no es tu madre o tu pareja quien te está diciendo que apagues de vez en cuando el móvil. Habrá que empezar a hacerles caso cuando también es la NSA la que te recomienda que apagues el teléfono al menos una vez a la semana. En este artículo te cuento toda la justificación, y ya tú decides si sigues como siempre o si haces como yo, que voy a intentar seguir los consejos de quienes más saben de esto, y lo apagaré al menos una vez cada siete días a partir de ahora.
Y es que, tú, yo… todos vivimos pegados al teléfono móvil, utilizándolo para trabajar, socializar, entretenernos y hasta realizar pagos. Pero ahora nada más y nada menos que la NSA está diciendo que, apagar tu smartphone puede marcar la diferencia en tu seguridad. La Agencia de Seguridad Nacional de Estados Unidos tiene algo que decir al respecto, y aquí te voy a contar por qué deberías empezar a hacerlo, cómo puede protegerte y qué otros consejos pueden mantener tus datos a salvo.
Qué sabe la NSA sobre tu seguridad
Apagar el móvil una vez a la semana no es solo una medida de mantenimiento, sino una estrategia de ciberseguridad respaldada por la NSA. Esta práctica busca dificultar las actividades de los atacantes que intentan colarse en nuestros dispositivos.
Los sistemas operativos modernos, como Android e iOS, cuentan con barreras que impiden modificar el sistema base. Sin embargo, no pueden evitar que el malware o códigos maliciosos se ejecuten temporalmente. Reiniciar el dispositivo elimina estos procesos y borra archivos temporales que pueden contener amenazas. Es como darle un respiro a tu móvil y asegurarte de que arranque limpio.
Más allá de esta recomendación, la NSA también subraya la importancia de mantener actualizados tanto el sistema operativo como las aplicaciones. Las actualizaciones no solo incluyen mejoras, sino también parches de seguridad que corrigen vulnerabilidades.
Hay que tener en cuenta que, en otra ocasión, ya recomendó reiniciar el router de vez en cuando. Los motivos eran los mismos: mejorar la seguridad. Esto podría ayudar a expulsar intrusos de la red y prevenir ciertos ataques de fuerza bruta que ayuden a los cibercriminales a ganar acceso. No significa que solo debas tener en cuenta esta medida, ni mucho menos, pero sí que puede ser una más.
Otros consejos clave para proteger tu dispositivo
Reiniciar el teléfono es un buen punto de partida, pero no es suficiente. Estas prácticas complementarias también pueden ayudarte a mantener tu privacidad y seguridad:
- Desactiva el Bluetooth y el Wi-Fi cuando no los uses: aunque parezca inofensivo, tener estas funciones activas de forma constante puede abrir puertas a conexiones no autorizadas.
- Evita las redes WiFi públicas: siempre que sea posible, utiliza datos móviles o una red confiable. Si necesitas conectarte, emplea una VPN para encriptar tu conexión.
- Bloquea tu dispositivo: usa contraseñas seguras o datos biométricos como huellas dactilares o reconocimiento facial. Esto previene el acceso no autorizado si pierdes tu teléfono.
- Descarga solo aplicaciones de tiendas oficiales: evita las apps de origen desconocido que pueden contener malware disfrazado.
- Ten cuidado con los enlaces y archivos adjuntos: un clic descuidado en un correo electrónico o mensaje sospechoso puede comprometer tu dispositivo.
- Configura el borrado remoto: asegúrate de que, en caso de pérdida o robo, puedas eliminar toda la información del dispositivo de forma remota.
¿Por qué deberías tomar en serio estos consejos?
En un mundo donde el cibercrimen es cada vez más sofisticado, la seguridad empieza con pequeños hábitos. Según la NSA, el simple hecho de reiniciar tu móvil puede interrumpir cadenas de ataque que requieren varias vulnerabilidades seguidas para tener éxito. Al apagar y encender el dispositivo, obligas a los atacantes a empezar de cero.
Por otro lado, la acumulación de archivos temporales no solo pone en riesgo tu privacidad, sino que también afecta al rendimiento de tu dispositivo. Reiniciar regularmente permite que las aplicaciones liberen memoria y que tu teléfono funcione más rápido.
Esto es algo que deberías aplicar a cualquier otro dispositivo que uses en tu día a día. No solo hay que hablar del móvil, aunque sí sea el dispositivo más común, sino también un ordenador, el router que hemos mencionado, dispositivos de domótica, etc. Todo lo que puedas tener protegido al máximo, será interesante para evitar problemas.
Haz de la seguridad un hábito
Incorporar estas prácticas en tu rutina semanal no te llevará mucho tiempo, pero puede marcar una gran diferencia. Piensa en ello como un mantenimiento preventivo: igual que haces revisiones a tu coche, también deberías cuidar tus dispositivos digitales.
Apagar tu teléfono una vez a la semana, mantenerlo actualizado y seguir las recomendaciones de seguridad no te convertirá en invulnerable, pero sí reducirá significativamente los riesgos. Así que, la próxima vez que pienses en la seguridad de tu teléfono, recuerda que un simple gesto puede proteger tu información personal y profesional.