Es evidente que los usuarios adquieren muy malas prácticas mientras utilizan Internet. Se trata de algo que muchos ya conocen, pero que sin embargo no quieren poner solución. Por este motivo la mayoría de las ocasiones los usuarios ponen en peligro su seguridad, produciéndose el robo de datos o la instalación de malware en el equipo.
Aunque es verdad que cada usuario posee sus particularidades a la hora de hacer uso de esta herramienta de doble filo, existen una serie de aspectos, o mejor dicho, de malas costumbres que son comunes a una gran mayoría de usuarios y que nosotros queremos repasar.
Seguro que muchos ya estáis pensando que malas costumbres podéis tener a la hora de hacer uso de vuestro ordenador. Hay que mencionar que estas malas prácticas no solo pueden propiciar la llegada de malware a nuestro equipo, sino que esto puede provocar que este archivo malicioso haga llegar más malware y que además la privacidad de nuestros datos se vea seriamente afectada de forma negativa.
Una contraseña demasiado obvia y la misma en varios servicios
Una contraseña del tipo 12345, hola1234, yo12345 y similares pueden ser muy fáciles de recordar, sobre todo si la utilizas no solo en un servicio, sino en varios. De esta manera estás facilitando que los ciberdelincuentes puedan hacerse con el control de varios servicios con solo hackear la cuenta de uno de ellos. Por este motivo es preferible hacer uso de contraseñas muchos más complejas y utilizar una diferente en cada servicio.
Instalar programas sin prestar atención al instalador
Esto es algo muy frecuente y después hay muchos que se preguntan porque el navegador tiene tantas barras de herramientas o porque hay software de apuestas y de casinos en línea instalados en el ordenador. Los usuarios tenemos una mala costumbre de dar a todo a «Siguiente» o «Next» hasta que el programa acabe de instalar, pero por el medio nos hemos dejado información muy importante que nos habría evitado tener que sufrir este tipo de software adicional que se incluye.
Creerte todo lo que llega a tu correo electrónico, Facebook o Whatsapp
Cuando recibes un mensaje diciéndote que tu Whatsapp o Facebook caducará si no se hace una cosa determinada o si no se envía a determinadas personas (las clásicas cadenas) o por ejemplo cuando recibes un correo diciéndote que tu cuenta de una red social será cerrada y que se debe verificar la identidad del usuario habrá muchos los que sean que hagan caso a este tipo de contenidos. A fin de cuentas las cadenas no hacen ningún daño a nadie excepto que se pierde el tiempo en enviar a X personas el contenido. El problema llega cuando los usuarios reciben el otro tipo de advertencia y estos se disponen a proporcionar sus datos de acceso, pudiendo terminar en un robo de la cuenta.
Pensar que todo puede conseguirse de forma gratuita
Cuando se dispone de Internet se cree desde un primer momento que es el lugar donde todo se va a encontrar de forma gratuita. No se trata de una idea muy alejada, sobre todo si hablamos de contenido multimedia, pero hay que saber distinguir dónde se encuentra el límite, ya que superar este límite puede suponer que pongamos en peligro nuestro equipo.
Lo que queremos decir es que muchas veces descargar una aplicación gratuita al final acaba saliendo caro, sobre todo porque esta suele contener programas malware que pueden poner en peligro la integridad de la seguridad de nuestro equipo.
¿Qué práctica destacarías que no hemos mencionado?