El asistente de voz de Amazon, Alexa, integra con frecuencia nuevas funciones adicionales muy interesantes para el día a día. Una de ellas, es la detección de ruidos en casa, de modo que puede detectar pitidos y grifos abiertos para que te sea todavía más útil. Aquí te contamos cómo puedes configurar esta función que, sin duda, te ayudará a estar más tranquilo tanto dentro como fuera de casa.
el asistente de voz de Amazon, Alexa, detecta seis tipos de ruidos diferentes. Aunque con el paso del tiempo las opciones irán aumentando, con las que tienes disponibles en este momento, te sobra para detectar pitidos y grifos abiertos. Si quieres saber cómo se configura esta función, aquí te cuento cómo aprovechar al máximo tu dispositivo y evitar despistes que podrían salirte caros.
Configura Alexa detectar pitidos y grifos abiertos
Aunque muchos utilizan Alexa principalmente para poner música, temporizadores o preguntar por el tiempo, sus capacidades van mucho más allá. Desde hace un par de años, Amazon le ha dado a Alexa la capacidad de escuchar a su entorno y reaccionar ante ciertos sonidos que pueden ayudarte en el día a día de casa, en imprevistos habituales.
Una de las funcionalidades más útiles es la detección de agua corriente en un grifo abierto. Imagina que sales de casa y, sin darte cuenta, te dejas un grifo abierto, o que, el gato mientras pasea, lo abre sin querer.
Pues Alexa puede escuchar el sonido del agua y avisarte al móvil, evitando así un posible desastre. Además, también puede detectar pitidos de electrodomésticos, como cuando la lavadora o el microondas han terminado su ciclo. Esta función es especialmente útil para esos aparatos que no son inteligentes y que, de otro modo, podrían pasar desapercibidos.
Paso a paso para configurar la rutina de detección
Para aprovechar estas funciones, tienes que crear rutinas en la app de Alexa. No te preocupes, es un proceso sencillo que no te llevará más de unos minutos. Aquí te explico cómo hacerlo:
- Accede a la app de Alexa: Abre la aplicación en tu móvil y, en la esquina inferior derecha, selecciona «Más».
- Crea una nueva rutina: Dentro de «Rutinas», pulsa el símbolo «+» en la esquina superior derecha para iniciar la creación de una nueva rutina.
- Configura el sonido que deseas detectar: Ponle un nombre a la rutina y en el apartado «Cuando», selecciona «Detección de sonido». Aquí podrás elegir entre varias opciones, como el sonido de agua corriente o el pitido de un electrodoméstico. También hay otras opciones interesantes, como la detección de ronquidos, llanto de un bebé, ladridos de perro, etc.
- Selecciona el dispositivo y el rango de tiempo: Elige el dispositivo Alexa que estará encargado de la detección y define el rango de tiempo en el que la rutina estará activa.
- Define la acción a realizar: Decide qué acción quieres que Alexa realice al detectar el sonido. Puede enviarte una notificación al móvil o hacer que el altavoz emita un aviso sonoro. Para esto, asegúrate de que las notificaciones de la app estén activadas. También puedes personalizar la respuesta de Alexa eligiendo la opción «Alexa dice» y escribiendo lo que quieras que te diga.
Saca el máximo partido a tu Alexa
Las posibilidades que te ofrece Alexa son realmente amplias. Además de detectar sonidos específicos como los que hemos mencionado, puedes utilizar esta función para situaciones como cuando tu bebé llora por la noche o incluso cuando tu perro empieza a ladrar sin motivo aparente. Estos son pequeños detalles que pueden marcar una gran diferencia en tu día a día.
Por otro lado, es importante que revises las rutinas que has creado para asegurarte de que funcionan correctamente. Si alguna ya no te es útil o necesitas hacer ajustes, siempre puedes volver a la app de Alexa, entrar en «Mis rutinas» y modificar o eliminar las que quieras.
En definitiva, Alexa no es solo un gadget más para tu casa; es una herramienta que, bien configurada, puede ayudarte a evitar imprevistos y hacerte la vida más fácil. Así que, si aún no lo has hecho, te animo a que explores estas opciones y veas cómo Alexa puede convertirse en un verdadero asistente en tu hogar.