¿Has mirado alguna vez cuántos aparatos tienes conectados a tu Internet doméstico? Más allá de móviles y ordenadores, son muchas las alternativas que puedes tener. Por ejemplo, televisiones, libros electrónicos, dispositivos de domótica… En este artículo, vamos a hablarte de por qué no es buena idea tener aparatos que no necesitas, conectados a tu red doméstica siempre.
Tal vez haya dispositivos que solo utilizas muy de vez en cuando o que incluso los usas diariamente, pero no necesitas que estén conectados al Wi-Fi. Por ejemplo, un libro electrónico puede estar conectado al Wi-Fi, pero simplemente vas a usar la conexión para pasar algún libro, lo cual podría ocurrir una vez cada varias semanas.
Por qué desconectar de Internet dispositivos en desuso
Algunos motivos van a estar relacionados con el rendimiento de la conexión, pero también va a entrar en juego la seguridad. Desconectar aparatos que no necesites, puede ayudarte en muchos casos cotidianos.
Evitar saturación
El primer motivo es para evitar una mayor saturación de red. Aunque los routers están capacitados para conectar muchos dispositivos, no significa que esa cifra sea ilimitada o que no haya ciertos problemas conforme vas conectando más y más aparatos a la red Wi-Fi. Cuantos más haya, más saturación.
Al desconectar lo que no necesites, de alguna manera estás liberando tu router o, más concretamente, la saturación del Wi-Fi. No significa que esos aparatos estén utilizando un gran ancho de banda, sino simplemente el hecho de estar conectados.
Reducir las interferencias
También debes tener en cuenta las interferencias. Un aparato conectado al Wi-Fi, puede generar interferencias y afectar a otros dispositivos, también aquellos que utilicen el Bluetooth. Por tanto, si no necesitas realmente tener algún aparato conectado en tu día a día, puedes apagarlo y reducir problemas.
Si tienes muchas cosas conectadas en un mismo lugar, como podría ser una habitación, el riesgo de que haya interferencias va a aumentar.
Protegerlos de ataques
Otro motivo es evitar o reducir el riesgo de ataques informáticos. Si tienes un aparato conectado siempre a Internet, eso significa que va a estar expuesto. Puede tener alguna vulnerabilidad y que un atacante la llegue a explotar para robar datos, acceder de forma remota o lanzar cualquier ataque.
Al desconectar un dispositivo de Internet, automáticamente deja de estar expuesto. Es algo que debes aplicar, especialmente, a los equipos más antiguos y que podrían tener más fallos sin corregir.
Reducir el consumo
Por otra parte, hay que hacer mención al ahorro energético. Cualquier aparato conectado a la electricidad, va a consumir energía. Si, además, está conectado a Internet, el consumo va a aumentar, aunque sea ligeramente. A fin de cuentas, estaría utilizando el Wi-Fi y, por tanto, consumiendo más recursos.
Lo que puedes hacer es desconectar los dispositivos que no necesites que estén siempre conectados a la red y, de esta forma, evitar así un consumo excesivo.
En definitiva, estas son algunas razones por las que conviene apagar los dispositivos que no necesites tener conectados siempre a Internet. Te ayudará a aumentar el rendimiento de la red, así como mejorar la seguridad o reducir el consumo de energía.