La cuenta del banco se encuentra conectada a nuestro smartphone a través de su app, por lo que nos llegarán notificaciones push e incluso avisos para permitir ciertas transacciones de manera sencilla. Ser consciente de un problema, es el primer paso para remediarlo, y lo mismo sucede en el caso de tu banca online. Saber que la han atacado, es el primer paso para poner freno a los malos, e iniciar si es posible, la búsqueda de soluciones. En este artículo, aprenderás a descubrir si alguien ha intentado entrar o atacar tu cuenta bancaria online.
La frase de «hecha la Ley, hecha la trampa», no siempre es cierta, ya que, en ocasiones, los malos van unos pasos por delante de los buenos. En este sentido, las estafas online han ido en aumento en los últimos años, a medida que la tecnología se ha ido expandiendo y llegando a nuestras vidas, hasta tal punto punto de que, hoy muchos cuentan con su casa, su trabajo, su vida entera apoyada por lo digital y la nube. Por eso, saber si alguien ha atacado en un momento dado tu cuenta bancaria online, es un paso tan necesario como antes era llevar la cartilla al banco.
Señales de que alguien ha atacado tu cuenta bancaria online
Cada vez más gente gestiona sus finanzas de manera digital, pero con la comodidad del uso de la banca online también llegan nuevos riesgos. Estas son señales claras que te pueden alertar de un posible ataque y cómo actuar ágilmente, si ves algo sospechoso.
Movimientos no autorizados en tu cuenta
Una de las primeras señales de que algo no va bien es la aparición de transacciones que no has autorizado. Aunque el importe sea pequeño, cualquier movimiento inesperado debería levantar una bandera roja. Los cibercriminales suelen probar con pequeñas cantidades para comprobar si la cuenta está activa antes de hacer un robo mayor. Es vital que revises tus movimientos bancarios regularmente para detectar cualquier irregularidad cuanto antes.
Cambios en tus datos sin tu autorización
Si recibes una notificación de tu banco sobre un cambio en tus datos personales, como la dirección de correo electrónico o la contraseña, y tú no lo has solicitado, es una clara señal de que tu cuenta puede estar comprometida. En estos casos, lo más recomendable es contactar de inmediato con tu banco para aclarar la situación y bloquear posibles accesos no autorizados.
Llamadas sospechosas de supuestos empleados del banco
Los ciberdelincuentes también intentan engañarte con llamadas falsas. Si recibes una llamada en la que se identifican como tu banco, pero te piden información sensible o te hacen preguntas extrañas, no proporciones ningún dato. Lo mejor es colgar y llamar directamente a tu banco utilizando el número oficial que encuentras en su página web o en la aplicación móvil.
Recibes SMS o emails extraños
Si empiezas a recibir SMS o correos electrónicos de números o direcciones desconocidas, ¡ten mucho cuidado! Es probable que intenten estafarte con un ataque de phishing. Estos mensajes suelen incluir enlaces que te redirigen a páginas falsas que simulan ser las de tu banco para robar tus credenciales. Ante la duda, nunca hagas clic en esos enlaces y ponte en contacto con tu entidad bancaria.
Alertas por intentos de inicio de sesión
Muchos bancos y servicios de pago online te envían alertas cuando alguien intenta acceder a tu cuenta desde un dispositivo o ubicación diferente a los habituales. Si recibes este tipo de notificación y no eres tú quien está intentando acceder, es una señal clara de que debes cambiar tu contraseña de inmediato y reforzar la seguridad de tu cuenta.
La web de tu banco parece extraña o diferente
Si al intentar acceder a la página web de tu banco notas que algo no está bien, como un diseño diferente o errores en la dirección URL (por ejemplo, letras cambiadas o faltantes), podrías estar frente a un intento de phishing. Siempre asegúrate de que la dirección de la página empiece por «https» y que el candado de seguridad esté visible en la barra de direcciones de tu navegador.
La banca online es práctica y eficiente, pero también es un blanco fácil para los cibercriminales. Estar alerta y reconocer las señales de que tu cuenta ha sido atacada es esencial para evitar un fraude. Mantén un control constante sobre tus transacciones, desconfía de mensajes sospechosos y nunca compartas tu información personal sin verificar antes la identidad de quien te contacta. La seguridad de tu dinero está en tus manos.