He encendido un disco duro con copias de seguridad de hace 20 años y esto he aprendido
Siempre hablamos de la importancia de crear copias de seguridad, pero hacerlo correctamente. En este artículo te voy a contar una anécdota personal, con un disco duro muy antiguo donde almacenaba copias de seguridad de la época. Te voy a hablar de qué ha pasado una vez encendido ese disco tras casi 20 años y, también, qué he aprendido de esta experiencia y que quiero compartir con otros.
Concretamente, se trata de un disco duro de apenas 40 GB, que funcionaba también como MP3. Un ladrillo, pero que en la época era algo bastante curioso y útil. Claro, con el paso del tiempo tener un disco así no servía para nada. Pasó al olvido en un cajón, hasta que ahora, muchos años después, he decidido encenderlo.
Disco duro con dos décadas
Este disco duro era un poco peculiar, ya que es de tipo HDD de 2,5 pulgadas, que estaba dentro de una carcasa, con diferentes botones para usarlo como MP3. La cuestión es que, al conectarlo al PC con el cable que venía de fábrica, ya no funcionaba. Aunque recibía corriente, por algún motivo se quedaba pillado y el ordenador no lo detectaba y, por tanto, no podía acceder a los archivos.
Lo que hice fue comprar una carcasa para discos duros de este tamaño y ver si así funcionaba. Efectivamente, al conectarlo de esta forma (simplemente a través de un cable USB conectado a la carcasa) ya aparecía en el ordenador como una unidad más. Básicamente, como si conectara cualquier pendrive o unidad de almacenamiento más moderna.
Pero no funcionaba al 100%. Aunque podía ver todas las carpetas que contenía, muchos archivos estaban corruptos. Por ejemplo, hay fotos y vídeos hechos con móviles de hace dos décadas. Algunos vídeos y algunas fotos sí que se abren con normalidad, pero otros se quedan pillados y no se puede abrir, ni copiar, ni hacer nada.
Por tanto, parcialmente sí que he podido acceder a una copia de seguridad de hace casi 20 años, pero no por completo. Muchos archivos se han perdido, han quedado totalmente inaccesibles. Es cierto que existen métodos para analizar discos duros y llegar incluso a recuperar archivos, pero es una tarea en muchos casos complicada y no siempre es posible.
Qué he aprendido
Entonces, ¿qué he aprendido de todo esto? Lo primero es que no puedes fiarte solo de un disco donde hagas las copias de seguridad. Podría dejar de funcionar, podría tener problemas y perder el contenido o, al menos, parte del mismo. Por tanto, te recomiendo que tengas varias copias de seguridad, en diferentes unidades. También he aprendido que, con el paso del tiempo, la tecnología cambia y van llegando nuevos modelos que pueden parecer más interesantes. Esto puede hacer que, algo que usas en tu día a día, pase a un segundo plano y te olvides de ese aparato. Eso puede dar lugar a que, una vez necesitas usarlo, ya no funcione como recordabas.
En definitiva, un disco duro bien cuidado podría durar muchos años a pleno funcionamiento. Aun así, siempre está el riesgo de que deje de funcionar, ya sea por completo o parcialmente, y pierdas el contenido. Te recomiendo siempre crear varias copias de seguridad y no correr riesgos con tus archivos.
Servidor NAS
Otra alternativa muy interesante, es tener un servidor NAS en local para guardar todos tus archivos y mantenerlos a buen recaudo, dependiendo de la capacidad que necesites, tendrás que comprar unos discos duros de mayor o menor capacidad. A la hora de configurar un servidor NAS, lo mejor que puedes hacer para garantizar la integridad de todos tus datos es:
- Escoge un NAS o sistema operativo para NAS que soporte el sistema de archivos ZFS, para tener la mejor integridad de datos posible.
- Configura un RAID 5 o equivalente en ZFS (RAIDZ-1), para que, si un disco duro se rompe, pueda seguir funcionando el sistema sin ningún problema. En estos casos, es necesario sustituir el disco duro lo antes posible.
- Configura instantáneas o snapshots en el sistema operativo, para que diariamente se ejecute esta acción, por si nos entra un ransomware o cualquier otro malware que afecte a nuestros archivos. Mientras que el usuario administrador del NAS no se vea comprometido, por un fallo de seguridad o cualquier otro problema, y no pueda eliminar las instantáneas, estaremos protegidos.
- Habilita la función WORM (Write Once, Read Many), esta característica permite escribir solamente una vez, y leer muchas. Esto es perfecto si no pensamos en borrar absolutamente nada de lo que guardemos.
Como podéis ver, un servidor NAS nos proporcionará una capa de seguridad en nuestros archivos realmente interesante.
Disco duro en la nube (con un único pago)
Hay servicios de almacenamiento en la nube como pCloud, que nos permitirá comprar un espacio de almacenamiento desde los 500GB hasta los 10TB en total. Este popular servicio nos permite comprar este almacenamiento con un solo pago, mientras que otros servicios en la nube como Google Drive o Dropbox entre otros muchos, requieren una suscripción mensual o anual, así que el desembolso de dinero es bastante importante. pCloud dispone de aplicaciones para dispositivos móviles y programas para sistemas operativos de escritorio, así que podemos usar de forma intensiva el servicio desde cualquier dispositivo.
Otro aspecto muy destacable de esta solución en la nube, es que podemos compartir cualquier archivo o carpeta con otras personas, simplemente debemos pinchar en el botón de «Compartir» y, automáticamente, compartiremos un enlace personalizado para que puedan acceder al contenido e incluso para descargarlo. Esta opción de compartir también nos permite añadir una contraseña, un banner de nuestra empresa, y muchas otras opciones avanzadas. Por supuesto, también existe la típica papelera de reciclaje por si quieres recuperar algún archivo, y también podemos acceder al almacenamiento vía WebDAV por si quieres hacerlo con un NAS.