¿Realmente puede afectar tener un espejo cerca de tu router o mejora el Wi-Fi? Esto debes saber

Para lograr una buena conexión Wi-Fi en casa, entran en juego diferentes factores. Es importante siempre ubicar bien el router, algo clave para repartir la señal por todo el hogar. También puede ser necesario hacer uso de repetidores, además de tener todo bien configurado. Sin embargo, hay elementos que pueden hacer que la señal vaya peor. Uno de ellos son los espejos. Pero, ¿siempre es así?
Tener un espejo cerca del router, puede afectar a la red inalámbrica. Puede generar ciertos problemas, como vamos a explicarte. No es lo único que puede perjudicar al Wi-Fi, ya que hay otras cosas, como paredes gruesas o interferencias, que también podrían limitar la señal y hacer que sea más complicado lograr buenos resultados.
Los espejos afectan al Wi-Fi
Podemos decir que tener un espejo cerca de dispositivos con Wi-Fi, es mala idea. Esto es así, ya que se trata de un objeto que refleja las ondas inalámbricas. Tiene una parte metálica también, lo cual impide que esas ondas pasen con normalidad y va a provocar que tengan un menor alcance.
Básicamente, la señal va a rebotar y no va a viajar de forma directa a los dispositivos que vayas a conectar. Esto genera interferencias, zonas muertas o lugares en los que resulta difícil conectarte a la red. Puedes notar que la velocidad disminuye, que los dispositivos se apagan continuamente, etc.
Lógicamente, cuanto más grande sea el espejo, más problemas puede haber. También va a influir la cercanía con el router y los aparatos que vayas a conectar. Si es un espejo pequeño, y esté lejos, seguramente no influya o influya muy poco. En cambio, si es un espejo de gran tamaño, y está junto al router, el problema puede ser bastante visible.
¿Puede llegar a ser útil?
Ahora bien, ¿podría llegar a ser útil el uso de espejos para mejorar el Wi-Fi? En general, no. Siempre vas a tener más problemas que beneficios. No obstante, habrá circunstancias en las que sí que pueda ayudar. Por ejemplo, poner un espejo detrás del router y que refleje la señal hacia una dirección, justo donde tengas un ordenador.
Pero claro, esto va a afectar a otros aparatos que estén situados en otro lugar. Pero sí, podemos decir que, en situaciones muy concretas, un espejo podría llegar a ayudar a tener una cierta mejora en la conectividad inalámbrica, pero debes hacerlo con cuidado y ser consciente de que puede afectar a otros aparatos.
Nuestra recomendación es que no pongas espejos en lugares cercanos al router. Tampoco junto a un ordenador y otros aparatos que vayas a conectar a la red. Esto puede ser un problema importante y vas a tener limitaciones que afecten a la señal inalámbrica, así como a la estabilidad de la red. Todo lo que puedas alejar los espejos, bienvenido.
Lo mismo deberías hacer con cualquier aparato que pueda generar interferencias. Hablamos de dispositivos que usen la frecuencia de los 2,4 GHz, como son los aparatos con Bluetooth. Es clave siempre lograr una conexión estable, sin esas molestas interferencias.