De cara a mejorar la conexión de Internet, algo bastante habitual es contar con un repetidor Wi-Fi. Sin embargo, hay que tener en cuenta que no siempre lo aprovechamos bien. Puede ocurrir si no lo tenemos bien ubicado, no está bien configurado o simplemente es un aparato que no es de calidad. En este artículo, vamos a explicarte qué debes tener en cuenta para saber si realmente lo estás aprovechando correctamente.
El objetivo también es detectar posibles problemas y realizar cambios para mejorar la conexión. Si utilizas un repetidor, lo normal es que busques una buena velocidad y estabilidad. Esto permitirá conectar aparatos muy variados a la red y reducir el riesgo de complicaciones en tu día a día.
Comprueba si el repetidor lo estás aprovechando
No aprovechar el repetidor, significa que estarías utilizando un aparato que no va a mejorar tu conexión. No vas a notar una mejora respecto a conectarte directamente al router. Puede que los problemas no se solucionen o que solo tengas una cierta mejora puntual, pero no como algo estable.
Mejora la velocidad
Lo primero que debes tener en cuenta, de cara a comprobar si estás aprovechando o no el repetidor, es ver si la velocidad ha mejorado. Tener una mala velocidad, es algo que va a afectar a la hora de reproducir contenido en Streaming, jugar por Internet o usar la nube. Es uno de los motivos por los que compramos aparatos de este tipo.
¿Qué puedes hacer? Pues algo tan sencillo como realizar un test de velocidad y ver cuánto te llega. Lo interesante es compararlo con la velocidad al conectarte directamente al router. Si ves que mejora, significa que estás aprovechando realmente el repetidor Wi-Fi. Cuidado porque los problemas de velocidad pueden aparecer por múltiples motivos.
Tienes mayor estabilidad
Otra prueba que puedes tener en cuenta, es observar la estabilidad. Si la conexión tiene cortes, si ves que no puedes reproducir contenido de forma estable, por ejemplo, utilizar un repetidor puede ser la solución. Sin embargo, no siempre lo usamos correctamente y, por tanto, no siempre lo aprovechamos.
¿Notas que la estabilidad aumenta cuando usas un repetidor? En ese caso, podemos decir que sirve de algo, es un buen aparato y lo estás aprovechando correctamente. Si sigues con problemas de estabilidad y cortes, entonces tendrías que buscar el motivo.
Lo has ubicado en el lugar óptimo
Sin duda, un factor muy importante para aprovechar bien el repetidor inalámbrico, es ubicarlo correctamente. Es necesario que lo pongas en una zona donde puedas conectar tus aparatos y eso no suponga tener poca velocidad o ver una pérdida de calidad. Es algo que debes planificar para no tener problemas.
Por ejemplo, evita poner el repetidor demasiado lejos del router. Esto va a ser fundamental para que reciba la señal y pueda repartirla a otros dispositivos. Además, no conviene que tengas objetos que puedan bloquear la señal, como pueden ser materiales metálicos.
No hay interferencias
¿Te conectas a Internet y no sufres interferencias? Es otro indicador que va a mostrarte si estás o no aprovechando bien tu repetidor Wi-Fi. Ten en cuenta que hay múltiples motivos por los que aparece este problema, como es tener aparatos que utilizan la frecuencia de los 2,4 GHz.
La idea es que no haya nada cerca del repetidor que pueda generar interferencias. De lo contrario, estarías desaprovechando tu aparato. Intenta alejar auriculares Bluetooth, altavoces, electrodomésticos como un microondas, etc.
En definitiva, estas son algunas claves que debes tener en cuenta para ver si estás aprovechando al máximo o no tu repetidor Wi-Fi. Es importante usarlo correctamente y no tener ningún problema que afecte a tu rendimiento.