Qué es la LAN y la WLAN en un router inalámbrico

¿Quieres saber cuáles son sus características principales y cómo saber cuáles son los puertos LAN de nuestro router? Además de conocer cada una de sus características, otra de las claves para entender exactamente qué es, están las ventajas y desventajas. De esta manera, se puede conocer más a fondo que diferencias hay entre LAN y WLAN. Por lo tanto, aquí puedes encontrar toda la información que necesites acerca de los puertos LAN que tiene tu dispositivo router de casa.

Puertos LAN: principales características

Normalmente los routers domésticos incorporan uno o varios puertos LAN, estos puertos LAN son los que pertenecen a la red de área local. Si utilizas IPv4 estarás dentro de una subred de clase C con máscara 255.255.255.0, siendo las subredes más comunes las 192.168.0.0/24, 192.168.1.0/24 o 192.168.2.0/24 aunque depende de los fabricantes pueden ser otras.

A nivel de configuración, todos los equipos de la LAN, salen a Internet con la misma IPv4 pública gracias a la tecnología NAT, por tanto, tendrán la misma IP pública para salir a Internet. Gracias al NAT, podremos conectar múltiples equipos vía cable o WiFi y navegar por Internet de manera simultánea, sin necesidad de esperar hasta que se libere algún equipo para nosotros transferir datos.

Si tu operador hace uso del protocolo IPv6, es posible que también utilices un rango IPv4 privado, ya que es posible que utilice mecanismos de convivencia con el protocolo IPv6. Aunque si usan IPv6 de manera nativa, usarás una IPv6 GUA (Global Unicast Address), y esta IPv6 de ámbito público también la obtendrá cada uno de los dispositivos de la red local. Si tienes una red de área local a nivel empresarial, es posible que la organización haya decidido utilizar la ULA (Unique Local Address), además de hacer uso de la Link-Local que es como mínimo la IPv6 que debe tener cada tarjeta de red.

Ya, por lo general no se utiliza el protocolo IPv6, sin embargo, es muy importante que tu router sí sea compatible con este protocolo para estar preparado para el futuro más cercano, donde todas las redes deberían funcionar a través del protocolo IPv6, de lo contrario, tendríamos que comprar en un futuro otro nuevo router que sí soporte este estándar que se va a imponer próximamente. Aunque actualmente en España está muy poco desplegado, en muchos otros países este protocolo se usa más que IPv4.

Estos puertos LAN son donde debes conectar tus PC, impresoras, servidores NAS y cualquier otro dispositivo cableado. La velocidad del puerto se rige bajo los estándares BASE-T, por tanto, tendremos velocidades de 10/100/1000Mbps comúnmente, aunque podríamos tener velocidades superiores como 2,5G, 5G e incluso 10Gbps si nuestro router lo permite. En algunas ocasiones, fabricantes como NETGEAR en sus routers tope de gama, incorporan también un puerto SFP+ a 10Gbps para dotar a la red de área local de la posibilidad de conectar un equipo con fibra óptica directamente, en lugar de utilizar el típico cable de red de par trenzado.

Los puertos LAN vienen perfectamente diferenciados del puerto WAN de nuestro router, normalmente vienen de otro color diferente, aunque esto depende del propio fabricante, ya que también puede indicarse directamente con una pequeña leyenda justo debajo de los puertos. En los últimos meses, fabricantes como ASUS, NETGEAR o TP-Link, están lanzando al mercado routers con un puerto Multigigabit, ya sea 2.5G, 5G e incluso puertos 10G, a nivel de firmware, estos puertos ultrarrápidos los podremos configurar como WAN de Internet o como LAN, lo más recomendable hoy en día es configurarlos como LAN (vienen preconfigurados de esta forma), porque en la LAN podremos conectar servidores NAS con puertos Multigigabit y exprimir al máximo esta velocidad adicional que podremos conseguir vía cable.

Por ejemplo, el router ASUS RT-AX89X cuenta con un puerto 10GBASE-T Multigigabit, y otro puerto SFP+ a 10Gbps para conectar un cable DAC o directamente fibra óptica. Gracias a estos puertos ultrarrápidos, podremos conectar un servidor NAS con puertos 10GBASE-T o SFP+ a la red LAN, y posteriormente acceder a este servidor NAS a través del resto de puertos Gigabit Ethernet que tenemos disponibles, e incluso a través de la red WiFi, sin que la red cableada suponga un cuello de botella. Si este mismo NAS lo conectamos a un puerto Gigabit Ethernet, entonces sí tendríamos un cuello de botella muy importante, porque como máximo podremos transferir datos a 1Gbps, independientemente desde cuantos equipos estemos transfiriendo la información.

Ventajas de LAN

Una de las grandes ventajas que se encuentran a la hora de utilizar esta conexión es que proporciona a los equipos una mayor velocidad de transferencia de datos, es decir, una mayor velocidad de conexión a los usuarios que usan este tipo de red. Aunque es cierto que las WLAN han mejorado, todavía no alcanzan las velocidades que dan los puertos LAN. A esto hay que sumarle que también cuentan con una mayor estabilidad en la conexión. Y no es el único punto que juega a favor de las redes de área local.

Otro elemento importante es la seguridad, ya que, por lo general, son mucho más seguras que las WLAN, puesto que están conectadas de manera física y es menos probable que puedan llegar a colarse intrusos. Y aquí también entra en juego las interferencias que pueden sufrir las WLAN. Por otro lado, el coste de las LAN es menor que mantener las WLAN. Y todo por porque tecnología inalámbrica suele tener un precio más elevado.

Además de cada una de las anteriores ventajas que de la conexión LAN, también hay que destacar la facilidad de uso. Este tipo de red no tiene ningún tipo de complicación para que los usuarios puedan usar la conexión a Internet de una forma sencilla.

Desventajas de LAN

Uno de los primeros puntos en contra de esta opción es que la limitación que tiene por el hecho de que se utilicen cables, es decir, la movilidad es inferior, ya que se necesita cuadrarlo todo para conectar los equipos que se necesiten o tirar más cable. Otro de los factores que entran en su contra, si se necesita una mayor distancia, habrá que tirar más cable Ethernet para llegar hasta el dispositivo.

Y aunque el proceso de instalación no es tan caro como se piensa, sí que es un proceso más completo que usar las redes inalámbricas. Por lo que no todo el mundo tiene los conocimientos necesarios para llegar a completar la instalación de LAN sin cometer errores, al igual que requiere el enrutamiento de cables y la instalación de conmutadores.

WLAN: principales características

La única diferencia entre WLAN y LAN, es el medio de transmisión. Mientras que en la LAN hacemos uso de cables de par trenzado, o cables de fibra óptica, en la WLAN utilizamos el aire como medio de transmisión, es decir, hacemos uso de la tecnología Wi-Fi normalmente. En cuanto a los diferentes estándares que podremos utilizar en nuestros routers, actualmente hacemos uso de los estándares Wi-Fi 4, Wi-Fi 5, y si tu router es de última generación, es posible que utilice el nuevo estándar Wi-Fi 6.

Dependiendo del equipo que tengamos, este podrá tener WLAN en una sola banda de frecuencias (normalmente 2.4GHz), podremos tener doble banda simultánea (2.4GHz y 5Ghz) e incluso podremos tener equipos con triple banda simultánea (2.4GHz, 5GHz con canales «bajos» y 5GHz con canales «altos»).

Ya es muy habitual hacer uso del estándar Wi-Fi 6, el cual incorpora muchas mejoras respecto a los anteriores para obtener la mejor experiencia de usuario posible, con Wi-FI 6 tendremos la tecnología OFDMA para subidividir el canal en canales más pequeños y poder exprimir al máximo el ancho de banda disponible, esto es ideal para puntos de acceso WiFi profesionales donde haya decenas de clientes conectados.

También tenemos MU-MIMO, para enviar y recibir datos simultáneamente desde varios clientes WiFi a la vez, sin que tengamos que esperar un cierto tiempo o hasta que acaben los que ya están emitiendo. Tampoco debemos olvidar el BSS Coloring para reducir interferencias, el Beamforming para focalizar la señal WiFI en los clientes, e incluso el Target Wake Time que nos permitirá ahorrar energía en los clientes WiFi, ideal para los dispositivos IoT.

Tal y como habéis visto, actualmente en los routers tenemos tres interfaces bien diferenciadas, la interfaz de la WAN (Internet), la interfaz de la LAN y WLAN que pertenecen a la red de área local doméstica.

¿Todos los routers tienen parte de WLAN o WiFi? No, la mayoría de routers domésticos o los orientados a pequeñas oficinas sí incorporan conectividad WLAN, sin embargo, los routers profesionales de gama media y alta no disponen de conectividad WiFi, porque esta misma tarea la pueden hacer los puntos de acceso WiFi alimentamos por PoE.

En entornos empresariales lo más normal es que los routers no dispongan de conectividad WLAN, sin embargo, sí tendrán LAN con posibilidad de crear y configurar VLANs para segmentar el tráfico de red correctamente y proporcionar un aislamiento para las diferentes subredes que podremos configurar. Los routers profesionales suelen incorporar dos o tres puertos WAN de Internet para balanceo de carga, y otros dos o tres puertos para la LAN. Aunque pueda parecer que tener pocos puertos sea un error, lo cierto es que en entornos empresariales siempre vamos a utilizar switches para repartir la conectividad a todos los sitios, por tanto, no importa que tenga pocos puertos porque casi seguro que usaremos un switch gestionable.

Si tenemos un router de ámbito profesional como el NETGEAR BR500 o el ASUS BRT-AC828, tenemos la posibilidad de crear LANs virtuales, es decir, VLANs, para crear varias subredes locales y segmentar el tráfico. En el caso de tener una red doméstica o profesional más avanzada, es completamente necesario segmentar la red por VLANs, que básicamente son LAN virtuales, en las que se etiquetan las tramas para separar dichas subredes, y que necesitemos de un router para poder intercomunicarlas.

Las VLANs nos permiten aislamiento, un mejor control de todo lo que está ocurriendo en la red local, y también nos permiten tener un mayor rendimiento y evitar problemas de seguridad. Es decir, para redes grandes donde tengamos una gran cantidad de equipos, siempre es necesario segmentar en VLANs para dotar a la red de una mejor seguridad y rendimiento. Además, también tendremos la posibilidad de proporcionar a APs profesionales diferentes VLANs, y de esta forma, tener un SSID por cada VLAN creada.

Además, hay que tener en cuenta que existen diferentes tipos que se pueden utilizar en distintos equipos, como en los switches y puntos de acceso de redes inalámbricas. Y, por si no lo sabías, las que existes son las que están basadas en el estándar 802.1Q VLAN Tagging, que a su vez está basado en etiquetas. También están la que se basan en puertos, MAC y en aplicaciones. Aunque esta última alternativa no es la que se suele usar normalmente.

Principales ventajas de WLAN

Muchas podrían ser las ventajas que podríamos atribuir a este tipo de conexión, pero en líneas generales los que más podríamos destacar es el hecho de que es muy confiable, además de eso nos reduce drásticamente la utilización de cables de red permitiéndonos así más versatilidad a la hora de implementarla en espacios donde no tenemos mucho lugar para realizar un cableado estructurado.

Por otro lado, nos abastece de velocidades bastante decentes gracias a que su cobertura está implementada por lo general en áreas reducidas y esto también nos garantiza que la conectividad de los dispositivos a la red sea prácticamente en cualquier dirección, ya que al no depender de cables únicamente dependerá de la distancia a la que nos encontremos para que sea completamente eficiente.

Otro punto a favor de la WLAN es que, al no ser necesaria gran cantidad de cable, su instalación es bastante rápida y sencilla y esto permite una versatilidad increíble, lo que la hace muy útil, por ejemplo, en situaciones de desastres naturales como podría ser un terremoto ya que además es extremadamente fácil agregar o quitar equipos o estaciones de trabajo de esta red. Y esto mismo también hace posible que se puedan reducir costes al no tener que realizar una gran instalación de cables.

Además de los puntos anteriores, hay que mencionar la escalabilidad de este tipo de redes. Y todo gracias a que se pueden seguir añadiendo más dispositivos con el objetivo de ampliar la cobertura de la red de una forma realmente sencilla. De esta manera se consigue llevar la conexión a otros rincones en los que la señal es pobre o ni siquiera llegaba.

Principales desventajas de WLAN

No todo pueden ser buenas noticias, y a pesar de que la WLAN no presenta una cantidad bastante amplia de bondades, también tiene inconvenientes que deben ser tomados en cuenta como el hecho de que en la mayoría de los casos se requiere una licencia para ser implementada correctamente.

También podemos destacar como un punto negativo, el hecho de que al aumentar la cantidad de dispositivos conectados a la WLAN la velocidad de transferencia de datos se ve afectada y disminuida y además también debemos destacar que su uso pierde bastante validez si no es implementado en áreas reducidas.

Por último, pero no menos importante, debemos destacar que uno de sus puntos más débiles es la seguridad, por lo que a menudo suelen ser objeto de ataques, sobre todo a los datos que se transmiten por dicha red permitiendo también que usuarios que no fueron previamente autorizados puedan acceder a ella.

Usos más comunes de WLAN

Las WLAN tienen una amplia gama de usos, tanto para el uso doméstico como para entornos profesionales dentro de empresas. Algunos de los usos más comunes para las WLAN son:

• Acceso a Internet: Las WLAN son comúnmente utilizadas para proporcionar acceso a Internet sin necesidad de cables. Esto permite a los usuarios conectarse a Internet desde cualquier lugar dentro del alcance de la red.
• Compartir archivos: Las WLAN también pueden ser utilizadas para compartir archivos entre dispositivos dentro de la red. Esto puede ser especialmente útil para empresas que necesitan compartir archivos y documentos entre diferentes departamentos. O incluso para lugares donde el lugar de trabajo no se reduce a un solo puesto fijo.
• Impresión inalámbrica: Las WLAN pueden ser utilizadas para compartir impresoras entre varios dispositivos. Esto permite a los usuarios imprimir documentos desde cualquier lugar dentro del alcance de la red. Siendo especialmente útil para lugares donde instalar cableado, es más complicado.
• Videojuegos online: Las WLAN también pueden ser utilizadas para juegos en línea. Los jugadores pueden conectarse a Internet a través de la red inalámbrica y jugar en línea con otros jugadores de todo el mundo.
• Sistemas de seguridad: Las WLAN pueden ser utilizadas para sistemas de seguridad, como cámaras de vigilancia. Los datos de video pueden ser transmitidos a través de la red inalámbrica a un servidor de grabación o a un dispositivo de visualización.
• Control de dispositivos domésticos inteligentes: Las WLAN también pueden ser utilizadas para controlar dispositivos domésticos inteligentes, como termostatos y sistemas de iluminación. Los dispositivos se pueden conectar a la red inalámbrica y controlar desde cualquier lugar dentro del alcance de la red.

Como puedes ver, las aplicaciones son muy variadas dentro del mundo de las redes. Esto se debe a que se trata de un sistema muy versátil, que es donde gana mucha ventaja a una red LAN cableada convencional. Pese a que cuenta con sus desventajas en cuanto a rendimiento.

¿Es mejor usar LAN o WLAN?

Después de explicar qué significa LAN y WLAN, puede que tengas dudas sobre cuál de las dos opciones conviene más utilizar. Lo cierto es que ambas opciones tienen sus ventajas y desventajas, como has podido ver anteriormente. Por tanto, decidir utilizar una u otra alternativa va a depender principalmente de la situación, de dónde vayas a conectarte o incluso desde qué dispositivo.

Cuál tiene más velocidad y estabilidad

Podemos decir que usar la conexión LAN, el cable, va a permitir una mayor estabilidad. A fin de cuentas, vamos a conectarnos a través de un medio estable, menos sensible a la distancia y posibles obstáculos. Simplemente tendremos que conectar un cable de red que vaya del router al ordenador, televisión, videoconsola…

Por tanto, para lograr la máxima velocidad y estabilidad, sobre el papel lo ideal sería usar LAN. Ahora bien, no siempre va a ser posible y no siempre va a ser la mejor opción. Lo primero porque no siempre vamos a poder tener una instalación que permita llevar cables de red por toda la vivienda y conectar dispositivos. Lo segundo, poder lograr la máxima velocidad solo será posible si el cable de red es el adecuado, por lo que ahí podría generarse un cuello de botella en caso de usar un cable Fast Ethernet, que estaría limitado a 100 Mbps.

Cuando es mejor utilizarlas

Por otra parte, tenemos la opción de usar WLAN o Wi-Fi. ¿Cuándo es mejor usar esta alternativa? Un ejemplo claro es cuando vayas a conectarte desde otra habitación distinta a donde está el router y no tienes una instalación por cable. Simplemente vas a usar la red inalámbrica para poder establecer conexión y no vas a necesitar ningún tipo de cable.

Pero claro, esto tiene sus limitaciones. Lo cierto es que las redes inalámbricas no van a funcionar bien mientras más nos alejemos del router. Además, va a depender mucho de la tarjeta de red que usemos, de la banda a la que nos conectemos, de posibles interferencias que pueda haber en esa red Wi-Fi… Por ello es importante siempre analizar estos puntos para ver si realmente conviene o no usar WLAN.

Hay que tener en cuenta que no solamente hay una opción correcta, es decir, no te puedes quedar únicamente con una de estas dos alternativas. La elección en sí que tomes dependerá de diferentes factores como hemos visto. Por ejemplo, de la velocidad que se necesite tener, del tamaño geográfico o de la movilidad de los dispositivos en la red. En función de todos estos aspectos, entonces hay que elegir entre WLAN o LAN. Así que la mejor alternativa depende de cada uno de los requisitos individuales que se quieran cumplir.

Aplicaciones de las redes

Los usos que se les pueden dar a estas redes, son muy diversos y como tal pueden llegar a ser muy complejos. Podemos tomar un ejemplo muy básico, donde se realiza la interconexión de dos equipos con sus respectivas tarjetas de red, que son capaces de establecer conexión. Esto puede establecer una red independiente que se encuentra dentro de un área que la cubre. Cada uno de los clientes, tendría acceso a los recursos del otro, pero en este caso, no al servidor que actúa como núcleo. Lo mejor de estas redes, es que no requieren administración o preconfiguraciones.

Instalando puntos de acceso, se puede llegar a multiplicar la distancia de conexión. Ya que estarían actuando como repetidores. Esto hace que cualquiera de los clientes que se conecta a la red, tenga acceso a los recursos proporcionados por el servidor. Los puntos de acceso, pueden estar operativos para diferentes máquinas, dependiendo del tipo y del número de transmisiones que están ocurriendo. Por otro lado, si es necesario resolver algún problema, estas redes son muy accesibles a la hora de resolver problemas.

Luego tenemos la asignación de canales, concretamente los estándares 802.11a y 802.11g, que utilizan las bandas 2,4-2,5 Ghz. Para estas se definen 11 canales que son utilizables por los equipos Wi-Fi, y se pueden establecer configuraciones muy adaptadas a las necesidades que pueda tener cada equipo particular. En cambio, estos canales no son completamente independientes. En el último momento, solo se utilizarán 3 canales de forma simultánea. Concretamente los canales 1, 6 y 11. En Europa, la ETSI ha definido 13 canales, y en España se pueden utilizar 4 canales. Estos son el 1, 5, 9 y 13. Esto es algo que hace el punto de acceso de forma automático, salvo que se le aplique alguna configuración manual para que actúen de diferente forma.

Otros tipos de redes

LAN y WAN solo solo dos de los varios tipos de redes que nos podemos encontrar. Cada una de ellas, cumple una función específica, pero en algunas ocasiones puede resultar un poco confuso ver cuáles son las diferencias entre todas ellas.

Como hemos podido ver en las anteriores líneas, hay que tener en cuenta que hay diferencias entre usar LAN y WLAN. Cada una tiene sus ventajas y desventajas, por lo que tendrás que decidir en cada momento cuál te conviene más. En ocasiones solo podrás usar una de las dos, pero a veces podrás optar por cualquier y es ahí cuando tendrás que decidir. No obstante, una vez ya conocemos que son las LAN y las WLAN, vamos a ver todas las demás. Por tanto, estas son las otras redes que deberías conocer:

• MAN

Se trata de una red de área metropolitana, lo cual se refiere a redes de tamaño medio, que conectan a los usuarios de todos los dispositivos de una comunidad o una ciudad. Estas se componen de interconexiones de redes LAN. En este caso, estamos ante redes que tienen tasas de transferencias bastante altos. Por otro lado, son administraos por grupos de usuarios comunes, como puede ser un proveedor de red regional.

Hay que tener en cuenta que este tipo de conexión se pueden dar de manera inalámbrica y alámbrica, es decir, por cable. Por lo que si se usa sin cables, se conoce como WMAN. Un punto que hay que tener en cuenta. En cualquier caso, se suele utilizar para esos casos que ya hemos mencionado.

• WAN

Las redes de área amplia, son las más grandes de todas, ya que interconectan las LAN, MAN y otros tipos de redes. Su labor es interconectar regiones o países a través de satélites o líneas telefónicas. Estas son las más lentas de todas en cuanto a velocidad. Y el objetivo de este tipo de redes es conseguir tener redes privadas, por lo que se suelen utilizar por compañías y organizaciones que quieren tener una red privada por sí mismas.  En este caso, la distancia que puede alcanzar este tipo de conexiones puede superar los miles de kilómetros.

• CAN

Son redes que cumplen una función de conectividad en lugares de tamaño medio. Como puede ser un campus universitario, o espacios corporativos de gran tamaño. Aquí también podríamos llamarla «Red de área corporativa». Por lo tanto, área que abarca este tipo de conexiones es bastante limitada, ya que se centra en dar conexión a una universidad por ejemplo. Por otro lado, las CAN tienen varias conexiones LAN dentro de un área, además de que se conectan en la mayoría de ocasiones a la Internet pública.

• SAN

Están dedicadas a enlazar unidades de almacenamiento de información y datos, y se hace a través de redes de alta velocidad. Estas se instalan en paralelo a redes locales, para que el tráfico de datos no frene al de la red local. En estos casos estamos ante un tipo de red que se suele montar por cable, y cuenta con adaptadores y conmutadores que van conectados a matrices de almacenamiento, además de servidores. Para que te hagas una idea más clara, por ejemplo, cada ordenador conectado a este tipo de red puede tener la posibilidad de acceder al almacenamiento de la SAN como si se tratase de un disco local que está conectado directamente al equipo.

• VLAN

Con redes de área local virtuales. Las cuales se tratan de diferentes segmentos dentro de una red local. El objetivo de uso de este tipo de redes lo cierto es que se puede dar tanto de manera doméstica como a nivel empresarial. Y la idea es segmentar de forma adecuada la red y usar cada subred de manera distinta.

• PAN

Las redes de área personal conectan y permiten las transferencias entre dispositivos de un mismo usuario. Como puede ser un PC, móvil, tableta, entre otros. Aquí se pueden englobar las redes Wi-Fi y Bluetooth. En el caso de usar este tipo de red sin cables, se denominaría como WPAN. Aunque el alcance de estas no supera los diez metros, ya que su conexión no es buena al superar esas distancias, incluso entre cinco y diez ya no es tan eficaz.