No hay dudas de que las redes inalámbricas están más presentes que nunca. Son muchos los dispositivos que tenemos a nuestra disposición que se pueden conectar por Wi-Fi. Esto hace que contar con una red potente, con buena cobertura y velocidad sea necesario. Sin embargo, en ocasiones pueden surgir problemas que provocan un mal funcionamiento o que incluso no podamos conectarnos. En este artículo vamos a hablar de uno que afecta a Windows 10. Vamos a explicar cómo solucionar fácilmente el problema de conectividad Wi-Fi.
Puede que te funcione Internet en todos los dispositivos de tu casa (la Smart TV, el teléfono móvil, la tablet, el Amazon Echo Show…) pero que el ordenador no se conecte correctamente a la red inalámbrica. Esto puede deberse simplemente a que hay un problema de conexión WiFi en Windows. Por ello, en este artículos vas a poder conocer cuáles son algunas de las causas y qué podemos hacer para solucionarlo.
Las redes Wi-Fi, cada vez más utilizadas
Es una realidad que hoy en día utilizamos mucho más las conexiones inalámbricas que hace solo unos años. Si echamos la vista atrás, antes lo normal era tener un ordenador conectado por cable al router. Pero eso poco a poco ha ido cambiando gracias especialmente al auge de los dispositivos móviles y también a las mejoras en las redes inalámbricas. Podemos lograr más velocidad, calidad y estabilidad de las conexiones, cosa que antes era más complicado. Ahora bien, en ocasiones pueden surgir problemas. Intentamos conectarnos al Wi-Fi en Windows y vemos que hay fallos. Detrás de estos errores puede haber muchas causas. Tal vez se trate de un fallo de software, alguna actualización problemática de los drivers o una mala configuración del propio sistema operativo. Sea cual sea el problema, es importante que encontremos solución. El objetivo no es otro que poder conectar nuestros equipos con garantías.
En los últimos años también ha habido un aumento considerable de dispositivos conectados a Internet. Todo lo que conocemos como el Internet de las Cosas o dispositivos IoT ha hecho que sea necesario contar con redes fiables, que ofrezcan una buena conexión y que la velocidad esté siempre presente. Por ello debemos evitar esos fallos que puedan afectar a nuestras redes inalámbricas en el día a día y que se traduzca en la imposibilidad de conectarnos adecuadamente.
En definitiva, podemos decir que las redes Wi-Fi son cada vez más utilizadas. Esto hace que debamos cuidar nuestras conexiones, protegerlas, evitar que surjan problemas que puedan comprometer la estabilidad y especialmente solucionar los posibles fallos que puedan surgir, como es el caso del error del Wi-Fi en Windows 10 provocado por una actualización, como hemos visto en este artículo.
Cómo solucionar el problema de conectividad Wi-Fi en Windows
Como siempre hemos recomendado, tener los sistemas actualizados y con los últimos parches es algo vital. De esta forma no solo incluimos las posibles mejoras de rendimiento que haya presentes, sino que también solucionaremos posibles problemas de seguridad.
En ocasiones puede haber vulnerabilidades que pueden ser aprovechadas por los piratas informáticos para llevar a cabo sus ataques. Sin embargo, hay que mencionar que en ocasiones las actualizaciones pueden provocar problemas. Esto suele estar presente en muchas ocasiones en las redes inalámbricas. Hemos visto fallos con el Bluetooth después de una actualización y también errores con el Wi-Fi. Puede ocurrir por incompatibilidad con el sistema operativo, por ejemplo.
En esta ocasión nos vamos a centrar en un problema que afecta a la conectividad Wi-Fi en Windows 10 después de la última actualización. Afectó a algunos usuarios y este problema resulta en la imposibilidad de conectarse a la red Wi-Fi. El problema es que, aunque Microsoft lo ha resuelto y ha lanzado un nuevo parche para corregirlo, no llega de forma automática a los usuarios. Esto quiere decir que vamos a tener que hacerlo de forma manual.
Hay que tener en cuenta que este parche únicamente tiene que instalarlo los usuarios que han tenido problemas de conectividad Wi-Fi después de la última actualización. Microsoft lanzó la actualización para las diferentes versiones del sistema operativo y cada una de ellas necesita un parche diferente.
- Parches según la versión
Lo primero que tenemos que hacer es entrar en la página del catálogo de actualizaciones de Microsoft. Allí tendremos que buscar según nuestra versión. Esta es la lista que debemos tener en cuenta:
- Windows 10, version 1909 (KB4554364)
- Windows 10, version 1903 (KB4554364)
- Windows 10, version 1809 (KB4554354)
- Windows 10, version 1803 (KB4554349)
- Windows 10, version 1709 (KB4554342)
Como vemos son parches diferentes según la versión de Windows 10 que tengamos instalada en nuestro equipo. Tendremos que conocer cuál es nuestra versión y posteriormente ver el código de actualización que se corresponde. Ese código de actualización lo tenemos que poner en el buscador que aparece en la web de Microsoft.
Esto quiere decir que si por ejemplo estamos utilizando la versión de Windows 10 1909, tendremos que instalar el parche KB4554364 que encontraremos en la web de Microsoft. Estas actualizaciones en realidad no son más que la solución al error que mencionamos. Fueron lanzadas el pasado 30 de marzo. Todos aquellos usuarios que hayan experimentado problemas a la hora de conectarse al Wi-Fi en Windows 10 en los últimos días y que hayan actualizado el sistema operativo a la última versión recientemente deberían probar esto que mencionamos. Es muy probable que esa actualización haya causado el error y que debamos agregar ese parche que se corresponde con cada versión para corregir el problema.
Hay que tener en cuenta que deberemos elegir cuál es el tipo de sistema operativo que tenemos. Es decir, como veremos nos mostrará la versión de 32 y de 64 bits, así como la versión de servidor. Tendremos que descargar la que se corresponda con nuestro sistema. Este fallo puede ocurrir en usuarios de la versión Home, Pro o Server.
Cuando se descargue el parche simplemente tendremos que ejecutarlo e instalarlo con normalidad. Posteriormente recomendamos reiniciar el ordenador y comprobar así si ese problema se ha resuelto y ya podemos conectarnos con normalidad a la red Wi-Fi.
En definitiva, si tenemos problemas con la conectividad Wi-Fi en Windows 10 y hemos actualizado recientemente el sistema operativo, puede que el fallo se resuelva simplemente instalando este parche.
Actualizaciones Windows
Es importante que actualicemos nuestro ordenador siempre que sea posible. Para actualizar Windows a la última versión tienes que ir a Inicio, entras en Configuración y allí vas a Windows Update. Allí verás las diferentes versiones nuevas que pueda haber sin instalar y comenzará el proceso de forma automática.
No obstante, muchas veces el propio sistema te notifica al intentar apagar o reiniciar el ordenador de que hay disponible una actualización. De esta manera ni siquiera tenemos que acceder a esta herramienta nativa del sistema operativo para que se descargue e instale la actualización pendiente.
En cualquier caso, lo que hay que tener claro es que solamente debemos tener paciencia hasta que se complete y así ya tendremos la versión más nueva. Debes asegurarte siempre de contar con todo lo más reciente y evitar así cualquier problema que pueda aparecer en un momento dado. Es algo que puedes revisar de forma periódica y te explicamos qué pasa si no lo haces pero también por qué deberías hacerlo.
¿Qué puede pasar si no actualizamos Windows?
Como hemos visto, mantener el sistema actualizado es algo muy importante. Si bien en algún momento se nos puede llegar a pasar alguna actualización, lo mejor es estar siempre al día en este sentido. Y es que los problemas con los que nos podemos encontrar pueden ser muy numerosos.
No seguir el ritmo a Microsoft con las actualizaciones, nos puede dejar expuestos a muchas vulnerabilidades y fallos de seguridad. Los cuales se descubren casi a diario en muchos sistemas, ya que hay gente que se dedica a ello. Por lo cual es algo serio. Y en este caso, afectará a todo lo que tenemos en el equipo. Desde las aplicaciones que tenemos instaladas, el contenido que guardamos y los datos personales que puede tener un ordenador hoy en día.
Lo mismo ocurre cuando sale un nuevo Sistema Operativo. Microsoft acostumbra a dejar una actualización gratuita durante un periodo de tiempo bastante largo. De esta forma es más sencillo que los usuarios actualicen sus equipos, sobre todo por no tener que realizar un desembolso económico por un nuevo sistema. Si nos quedamos con el viejo, podremos estar tranquilos durante algunos años más. Las compañías no acostumbran a cerrar el soporte a sistemas antiguos al momento de lanzar un producto nuevo.
Esto es porque la base de usuarios sigue siendo muy grande como para dejarla desprotegida. Puede que incluso en algunas ocasiones, lo mejor sea esperar a actualizar. Es común que los nuevos sistemas lanzados al mercado, tengan algunos errores. Sobre todo, relacionados con el rendimiento o con cómo utilizan los recursos. De esta forma, podremos esperar a que saquen una versión más estable del nuevo sistema.
Pero una vez acaba el soporte oficial, estaremos en peligro. Y esto es porque ya no se gastan recursos en actualizar un sistema operativo antiguo. Si hay alguna excepción, sobre todo cuando el problema detectado es demasiado grande. En este caso sí se puede lanzar una actualización de urgencia.
Ya no solo hay que tener en cuenta que no se disfrutan de los últimos parches de seguridad que lanza Microsoft para su sistema operativo, sino que las distintas actualizaciones de los controladores para tu equipo no te llegan. Este es uno de los culpables más comunes por los que te puede fallar la conexión WiFi en tu equipo con Windows. Por esto mismo es importante realizar un buen mantenimiento del dispositivo, como es el caso de actualizar.
En definitiva, actualizar Windows, al igual que cualquier programa o sistema operativo, es algo fundamental. Es algo que debemos tener en cuenta en todo momento. Además debemos descargar siempre esas actualizaciones desde fuentes oficiales, para evitar problemas que puedan poner en riesgo tanto el buen funcionamiento del sistema como la propia seguridad. Si te encuentras con problemas con el Wi-Fi después de actualizar Windows, puedes llevar a cabo los consejos que hemos explicado.
Por qué mantener Windows actualizado
Hemos visto que a veces pueden surgir problemas al actualizar Windows o una vez hemos actualizado el sistema operativo y esto ha generado fallos en el software o algún componente del equipo. Sin embargo hay que tener en cuenta la importancia siempre de mantener los dispositivos correctamente actualizados. Esto nos ayudará a evitar problemas que puedan afectar a nuestro día a día.
Mejorar el rendimiento
Por un lado podemos decir que actualizar Windows es muy importante para mejorar el rendimiento. Es una realidad que con cada nueva actualización incluyen algunas mejoras para lograr que funcione más rápido, más estable y tener también ciertas características añadidas que pueden venir muy bien. Cada nueva actualización va a incorporar también mejoras de rendimiento. Por ejemplo, poder tener una mayor velocidad a la hora de llevar a cabo alguna tarea a nivel de sistema, gestionar archivos más rápidamente o mejorar incluso la cobertura, en el caso de actualizaciones relacionadas con las redes Wi-Fi.
Esto es algo que también vas a tener que aplicar en cualquier otro componente del sistema, como pueden ser las tarjetas de red Ethernet o Wi-Fi. Esto te permitirá lograr una mejora considerable en la estabilidad y no tener posibles problemas que puedan afectar al rendimiento de tu conexión. Por ejemplo, podrías tener problemas para descargar archivos o reproducir vídeos en Streaming en buena calidad si tienes los controladores obsoletos.
Arreglar problemas de software
Otro de los diferentes puntos por los que resulta clave mantener actualizado el sistema operativo se encuentra en que se pueden corregir errores de software que se repiten una y otra vez en esa versión de Windows que tienes instalada en el ordenador. Por más que Microsoft intente pulir al máximo, se pueden dar bugs que no se solucionen hasta que se actualice el sistema operativo.
Por lo tanto, es sin duda otro de los puntos más importantes por los cuales es vital ir actualizando Windows. De lo contrario, por más que intentes solucionarlo por tu cuenta, muchas veces no hay una opción que sirva para acabar con el error en cuestión hasta que no se actualiza el software de Microsoft.
Corregir problemas de seguridad
Pero además de esto también hay que hablar de la seguridad. Es un factor muy importante y que debemos cuidar a todos los niveles. Son muchos los ataques que hay en la red y los piratas informáticos utilizan técnicas muy variadas. A veces se basan en vulnerabilidades que encuentran sin parchear en los equipos. Gracias a las actualizaciones podemos incluir cambios y parches que solucionan esos problemas.
En muchos casos los sistemas pueden verse afectados por ciertas vulnerabilidades que afectan a la seguridad. Por ejemplo, vulnerabilidades que puedan ser explotadas para la entrada indeseada de intrusos, fallos de seguridad que hagan que el antivirus no funcione correctamente o que una red inalámbrica llegue a estar desprotegida y cualquiera pueda acceder y comprometer la información personal. Son problemas o agujeros de seguridad que se detectan por parte de los desarrolladores y se solucionan de forma rápida en siguientes versiones. Pero si estas versiones no las instalas en tu ordenador no podrás estar protegido.
Evitar problemas de compatibilidad
Con el paso del tiempo surgen nuevas versiones de los programas que usamos en nuestro día a día. Aparecen actualizaciones para programas como el navegador, aplicaciones para analizar redes, etc. Esto puede dar lugar a problemas de compatibilidad si estamos utilizando un sistema operativo obsoleto.
Por tanto, actualizar Windows con las últimas versiones disponibles también es muy importante para mantener la compatibilidad en todo momento. Nunca debemos dejar el sistema obsoleto y que eso provoque fallos al utilizar cualquier programa que tengamos instalado en el equipo. Especialmente cuando se trata de aplicaciones conectadas a Internet podemos tener errores en el funcionamiento.
Incluso puedes llegar a tener problemas de compatibilidad con aplicaciones propias del sistema. Hay programas de Microsoft que con el paso del tiempo dejan de estar disponibles o dejan de funcionar de la misma manera que lo hacían antes y resulta imprescindible actualizar el equipo para poder seguir utilizándolo correctamente.
Acceder a funciones nuevas
Otro motivo más para actualizar Windows es poder acceder a funciones nuevas que vayan surgiendo. Por ejemplo aplicaciones que solo estén disponibles para las últimas versiones del sistema o incluso características que vayan apareciendo y que puedan ser muy útil para nuestro día a día a la hora de trabajar o usar cualquier servicio.
Pero no solo es importante para poder usar nuevas funciones y características, sino también para poder solucionar dudas o problemas que surjan. Es decir, si por ejemplo quieres encontrar un manual en Internet para poder realizar algo en concreto, es más fácil que encuentres información sobre cosas más actuales que versiones más obsoletas. Por tanto, es otro motivo más por el cual deberías mantener siempre tu sistema actualizado correctamente.
Problemas de hardware y software
En este caso, estamos ante el caso más extremo de todos. Puede que nada tenga que ver con la actualización ni con Windows en sí sino con un problema en tu ordenador o en algún componente que no está funcionando correctamente y está impidiendo que te conectes a Internet. El momento donde podemos ver que el problema no se soluciona, y debemos empezar a valorar que se pueda tratar de algún fallo a nivel de hardware. Sin embargo, dejando de lado la actualización del sistema, también hay que hablar de posibles fallos de software, además del hardware.
En general, hay varios fallos físicos, los cuales pueden ocasionar este tipo de problemas. Y en la mayoría de las ocasiones, esto es algo que pasa por comprar un nuevo componente directamente. En el caso de un ordenador de sobremesa se podrá cambiar sin dificultad pero la cosa se complicará un poco más si se trata de un portátil y no tienes conocimientos para abrirlo o hacerlo. O quizá porque ni siquiera te compensa hacerlo. ¿Qué puede estar fallando y qué hardware puede ser el causante de que no tengas Internet? ¿Dónde está el error en el software?
- Adaptador de red
En el caso de que el adaptador de red se encuentre dañado y no funcione, no podremos establecer la conexión con la red. Por lo general se pueden cambiar de una forma sencilla si el equipo lo permite. Pero si estos se encuentran soldados a la placa base, podemos encontrarnos con más problemas en este sentido.
Sin embargo, es posible que no sea cosa del hardware en sí. Si hay cualquier tipo de incompatibilidad o se deja de funcionar la conexión WiFi de pronto, una de las mejores soluciones es desinstalar el controlador y reinstalarlo desde cero.
O, por otra parte, siempre se puede llegar a intentar actualizar el controlador de red desde el Administrador de dispositivos. Sin embargo, si no aparece una versión más reciente del firmware, puedes buscar el modelo y entrar en el navegador web para ir directamente a la web del fabricante y buscar una actuazalición.
- Malware
En este caso no se trata de un problema de hardware, si tu equipo está infectado, el malware que tiene es el culpable por el que no puedes disfrutar de la red WiFi de casa. Por lo que no queda otra que analizar el PC con una herramienta de seguridad para salir de dudas.
Sin embargo, al estar infectado no siempre afectará a que no puedas conectarte, pero sí es cierto que notarás como el rendimiento del ordenador es peor o la conexión a Internet, en general, es más pobre que antes. Por esto mismo hay que usar herramientas de seguridad de protección en tiempo real y también softwares que permitan detectar y eliminar rápidamente el posible malware que ha infectado a tu equipo.
- Problemas del router
Las antenas del router se pueden dañar por diferentes motivos. También se puede dar el caso de que esté mal conectada, por lo cual el problema tendría fácil solución. De lo contrario, tendremos que reemplazarla. Cosa que en la mayoría de routers, se puede hacer de forma muy sencilla. Ya no solo las exteriores, también las interiores. Por ejemplo, los routers de los operadores no cuentan con exteriores. Por lo que si no te llega la conexión WiFi quiere decir que es posible que las antenas internes se hayan dañado.
Además, hay que tener en cuenta que el router es un dispositivo que se encuentra encendido siempre, por lo cual está expuesto a muchos fallos que se pueden causar por esto mismo. A pesar de que es algo muy poco probable. En estos casos, lo más normal es tener que cambiar de router, pero puede que algunos sean fácilmente reparables. Si se trata de un router de un operador, en ese caso, tendrás que ponerte en contacto para que te lo sustituyan.
- Interferencias en la conexión
Si bien no es un fallo de hardware como tal, si viene causado por otro tipo de hardware que emite estas ondas que dañan a la red Wi-Fi. Por lo cual es importante mantener el router alejado de este tipo de dispositivos, como teléfonos u otros electrodomésticos. Más que nada, porque las interferencias pueden provocar que no puedas disfrutar del WiFi como se debería desde un primer momento.
En general, solucionar problemas de hardware puede ser sencillo y generalmente son errores mínimos que. Pero siempre habrá algunos casos donde sea directamente imposible, sobre todo hoy en día. Ya que muchos equipos vienen con los componentes compactados en la placa base, lo cual puede hacer que sea necesario cambiar el dispositivo entero. O bien enviarlo al servicio técnico oficial, para que sea reparado de la mejor forma posible.
Otros problemas generales y alternativas
Puede que nada de lo anterior esté fallando en tu ordenador y simplemente el error esté en la cobertura que tienes para conectarte a la red inalámbrica desde el lugar en el que estás. Lo primero que debemos hacer si no creemos que se trate de una actualización de Windows como causante del error es comprobar si el resto de aparatos que utilizamos para conectarnos a Internet funciona correctamente.
Si es así, podemos pasar a comprobar la cobertura que tenemos en la habitación o lugar donde está el ordenador y hacer un test de velocidad. Quizá no te funciona el WiFi en Windows porque la cobertura es mala y la señal apenas llega… Podemos buscar alternativas como, por ejemplo, conectarnos por cable. O encontrar la forma de extender la red inalámbrica para que haya una buena señal en el lugar desde el que pretendes conectarte.
Puede, como decimos, que el error no esté en tu ordenador. En ese caso es recomendable que utilices, por ejemplo, un PLC que te permitirá conectarte correctamente y es un sistema prácticamente sin esfuerzo a la hora de instalarlo y sin complicaciones que utilizará la red eléctrica para que accedas a Internet.