Estamos acostumbrados a encontrarnos con variedades de malware y amenazas muy diversas al navegar por la red. Los piratas informáticos utilizan técnicas complejas que apuntan contra todo tipo de dispositivos y sistemas. Es cierto que podemos contar con herramientas y métodos para protegernos, pero también los ciberdelincuentes perfeccionan sus ataques. En este artículo vamos a hablar de qué son los rootkits y qué podemos hacer para evitar ser víctimas de este tipo de amenazas.
Qué son los rootkits
Podemos decir que el rootkit es una variedad más de malware de las muchas que nos podemos encontrar y que pueden poner en riesgo nuestros sistemas y dispositivos. Tiene sus peculiaridades que le diferencian de otras variedades más tradicionales que podemos encontrar. Los rootkits son tipos de malware que están específicamente diseñados para ocultarse en nuestro sistema. Esto hace que sean difíciles de detectar y lógicamente puede causar problemas importantes a los usuarios que sufren este tipo de inconveniente en sus dispositivos.
Un pirata informático puede utilizar este tipo de malware denominado rootkit para controlar de forma remota un sistema. Puede robar contraseñas, credenciales, información de las víctimas como su tarjeta de crédito o datos bancarios. Incluso podrían utilizarlos para deshabilitar posibles herramientas de seguridad que bloqueen el acceso a ciertos programas o contenido para poder actuar libremente. Los piratas informáticos pueden utilizar diferentes métodos para colar rootkits. Pueden aprovecharse de vulnerabilidades existentes en un equipo, por ejemplo. También atacar a los usuarios que están conectados a una red Wi-Fi insegura o incluso mediante dispositivos IoT. Estos últimos aparatos pueden tener fallos que permiten la entrada de intrusos sin que la víctima tenga conocimiento de ello…
En ocasiones, precisamente por lo que mencionamos que puede bloquear los antivirus, resulta complicado de detectar. Pueden estar en nuestros sistemas sin que los usuarios lleguen a tener conocimiento de ello. El problema principal es que en muchos casos, en la mayoría de hecho, la única manera de eliminar lo que se conoce como rootkit es borrar el sistema operativo y reinstalarlo de cero. Estamos hablando de un tipo de malware que se oculta dentro del sistema.
Qué tipos hay
Como suele ocurrir en muchas variedades de malware, en el caso de los rootkits también podemos encontrarnos con diferentes tipos. Vamos a ver cuáles son los principales. No todos funcionan igual, además. Según el tipo, pueden aprovecharse de diferentes secciones de un dispositivo y de esta forma poder actuar.
- Rootkit de kernel: son los que actúan a nivel de kernel. Puede obtener todos los privilegios otorgados al sistema operativo.
- Rootkit de aplicación: en este caso se trata de un tipo que funciona a nivel de aplicación. Pueden reemplazar o modificar módulos, archivos o código de aplicaciones. Puede pasar por software legítimo.
- De memoria: también está la opción de rootkits de memoria. Funcionan en la RAM y de esta forma evitan dejar huella digital o firma de archivos en el disco duro.
- Bootkit: actúa sobre el cargador de arranque. Se inician antes de que lo haga el sistema operativo, justo después de encender el ordenador. Son muy difíciles de eliminar.
- Rootkits de biblioteca: actúan como un parche del kernel. Pueden bloquear o modificar las solicitudes en el sistema. Podría también reemplazar bibliotecas del sistema.
- De firmware: un tipo más son los rootkits de firmware de los dispositivos de red. Permite otorgar el control total por parte de los piratas informáticos.
Qué puede hacer este malware
Hemos visto qué es un rootkit, qué tipos hay y ahora veremos qué es realmente lo que puede hacer. Vamos a mostrar cómo puede afectar a un usuario. Los piratas informáticos pueden tener como objetivo tanto a empresas como a cualquier usuario doméstico, ya que se aprovechan de los errores que detectan en los equipos.
- Instalar una puerta trasera: una de las funciones principales de un rootkit es crear una puerta trasera en un sistema. Esto permitiría posteriormente que un atacante pueda acceder al equipo y tomar el control total.
- Agregar otras variedades de malware: siguiendo el hilo anterior, también podría instalar otras variedades de malware en ese equipo infectado. Por ejemplo podría colar un keylogger para robar contraseñas.
- Leer, copiar o modificar archivos: con el total control de un equipo, un atacante podría leer archivos, copiarlos o incluso modificarlos. Esto podría comprometer la privacidad de los usuarios, ya que todo quedaría expuesto en Internet.
- Cambiar configuraciones del sistema: además, podría cambiar cualquier parámetro de la configuración del sistema. A fin de cuentas es como si estuviera delante de la pantalla, al tener un control total sobre ese equipo.
- Registrar credenciales y claves: esto es algo muy valorado en la red por parte de los atacantes. Gracias a colar rootkits en un sistema también podrían registrar los nombres de usuario y las contraseñas para entras en las cuentas.
Precauciones con los rootkits
Si por un casual están considerando el uso de un rootkit, sea con el propósito que sea, es fundamental tener en cuenta una serie de precauciones. Por otro lado, si sospechamos que un sistema ha sido sometido a uno de estos, estas recomendaciones también son muy útiles.
- Legalidad: Lo primero de todo es que debemos saber que instalar estos paquetes en sistemas que no nos pertenecen es ilegal. Vamos a necesitar siempre un permiso explícito para poder hacerlo. Siempre debemos asegurarnos de que tenemos ese consentimiento, y a pesar de eso que no tenga fines maliciosos. Por lo cual se puede considerar en tareas de investigación desarrollo o a nivel educativo.
- Entornos aislados: Si vamos a experimentar con rootkits para el propósito que sea, lo mejor es hacerlo en entornos que se encuentren aislados. Puede ser una máquina virtual sin acceso a Internet, o una red especialmente preparada para este tipo de pruebas.
- Crear copias de seguridad: Antes de hacer nada, sea para la instalación o detección, debemos asegurarnos de que tenemos una copia de seguridad actualizada de todos los datos importantes. Estos rootkits pueden causar inestabilidad en el sistema. o incluso llegar a dañar el sistema operativo y los datos que este contiene.
- Herramientas de detección: Hoy en día hay herramientas especialmente diseñadas para poder detectar y eliminar rootkits. Como son TDSSkiller o RootkitRevealer. Estas deben estar totalmente actualizadas, y se deben utilizar de forma regular si sospechamos que hay un rootkit en el sistema.
- Estar informado: Estos rootkits evolucionan muy rápido para tratar de evadir la detección. Por lo cual es de vital importancia estar informado de las últimas técnicas y amenazas. De este modo podremos tratar de estar un paso por delante.
- Actualizaciones: Se debe mantener el sistema operativo totalmente actualizado. Gran cantidad de rootkits aprovechan vulnerabilidades conocidas en los softwares, por lo cual tener todas las actualizaciones minimiza mucho el riesgo de que pueda ser problemático.
- Educación: Educarnos a nosotros mismos y a nuestros equipos o familia, es de vital importancia para mantener un poco más la seguridad. El buen uso de los equipos y sistemas, es la primera barrera de seguridad que tenemos siempre. Por lo cual nos ayudará a prevenir muchos problemas, y a saber reaccionar ante lo que nos podamos encontrar.
Cómo evitar los rootkits
Ahora bien, es importante saber que podemos tener en cuenta ciertos consejos y medidas para evitar ser víctimas de los rootkits. El objetivo es que nuestro equipo nunca llegue a ser infectado por este problema que pueda comprometer nuestra seguridad y privacidad.
Descargar de fuentes oficiales
Algo básico no solo para evitar los rootkits, sino cualquier otro tipo de amenaza es descargar únicamente desde fuentes oficiales. Es esencial que cuando bajemos software o cualquier archivo de la red lo hagamos desde sitios legítimos y fiables.
Si descargamos desde fuentes de terceros podemos estar agregando software que ha sido modificado de forma maliciosa para comprometer nuestro sistema. Esto puede ser un problema que hay que evitar a toda costa.
Mantener los equipos actualizados
También es vital tener los equipos actualizados y con los últimos parches instalados. Es esencial esto, ya que en muchas ocasiones surgen vulnerabilidades que pueden ser explotadas por los piratas informáticos para llevar a cabo sus ataques. Son los propios fabricantes quienes lanzan parches y actualizaciones de seguridad con el fin de resolver esos problemas.
Por ejemplo, algo habitual es que surjan problemas en el sistema operativo por tener una versión obsoleta, aunque también puede afectar a cualquier aplicación que tenemos instalada e incluso a controladores. Por tanto, nuestro consejo es siempre contar con todos los parches y las últimas versiones que haya disponibles. Esto nos permitirá corregir las vulnerabilidades, pero también lograr un mejor rendimiento al aprovechar todas las novedades disponibles.
Cuidado con el correo electrónico
Sin duda a través del correo electrónico llegan muchos tipos de ataques. Hablamos por ejemplo del Phishing, que busca robar contraseñas y credenciales de los usuarios a través de cebos que envían.
Es vital el sentido común en este sentido y nunca cometer errores. Siempre que vayamos a iniciar sesión o descargar contenido hay que hacerlo directamente desde fuentes fiables y nunca acceder desde links que recibamos por correo electrónico.
Usar herramientas de seguridad
Por último algo que no pueden faltar son las herramientas de seguridad. Un buen antivirus puede evitar la entrada de malware en nuestro sistema. Puede ayudarnos a proteger los equipos y eliminar posibles amenazas.
Eso sí, hay que tener en cuenta que es necesario contar con herramientas que sean buenas, que ayuden realmente. Tenemos un gran abanico de posibilidades en este sentido y están disponibles para todo tipo de dispositivos y sistemas.
En definitiva, estos son algunos consejos para evitar los rootkits que pueden afectar a nuestros equipos.
Revisar vulnerabilidades en la red
¿Tienes alguna posible vulnerabilidad en la red? Por ejemplo, es importante revisar que no haya ningún dispositivo IoT que tenga algún fallo. Esto podría ser que estuviera desactualizado, que no tuviera ninguna contraseña o que la configuración no fuera la adecuada y permitiera que un intruso entrara en la red.
Es esencial revisar que cualquier aparato que tengamos conectado a la red esté protegido correctamente. Esto nos ayudará a evitar ataques con rootkit y cualquier otra amenaza que busque robar datos personales o infectar el sistema para provocar un mal funcionamiento.
Sentido común
Pero si hay algo importante es el sentido común. Es fundamental evitar cometer errores que puedan afectar al funcionamiento de los sistemas y que dejen abiertas ciertas vulnerabilidades que utilice un atacante. Por ejemplo, hay que tener cuidado a la hora de instalar aplicaciones o descargar archivos de Internet.
Un error común es descargar archivos adjuntos que nos llegan por e-mail sin revisar si realmente se trata de una fuente fiable o no. Es uno de los métodos más utilizados para colar malware y comprometer la seguridad de los sistemas.