Los cibercriminales nunca dejaran de sorprendernos con las invenciones que piensan para llevar a cabo sus engaños. En esta ocasión ha sido el Gobierno de Navarra el que se ha encargado de encender la luz de alarma después de haber comprobado que con fecha reciente, se han estado mandando correos electrónicos a los usuarios haciéndose pasar por la entidad bancaria BBVA.
En el mensaje recibido se indica a los usuarios que por un error en los datos se está produciendo una gran cantidad de errores a la hora de realizar el pago de recibos, y que es necesario volver a verificar todos los datos.
Por supuesto, al usuario se le verifican todo tipo de datos y contraseñas, pero todo esto es mentira y se trata de una estafa.
Después de que el Gobierno se haya puesto en contacto con la entidad bancaria han confirmado que se trata de una estafa y que dicha entidad no está enviando ese tipo de mensajes a los usuarios. Por lo tanto, se trata de otro intento más para obtener los datos personales de los usuarios y de utilizarlos de forma fraudulenta.
Más entidades afectadas
Parece ser que no ha sido la única entidad bancaria que es utilizada para tratar de engañar a los usuarios haciéndoles pensar que sus recibos son devueltos por una disposición incorrecta de los datos.
Desde el Gobierno de Navarra han hecho un llamamiento a los usuarios para que estos se conciencien de que es necesario no hacer caso de todos aquellos correos o llamadas que soliciten datos personales o contraseñas de acceso. Recomiendan que antes de eso, es mejor ponerse en contacto con la entidad bancaria para comprobar la veracidad del mensaje o la llamada.
¿Qué se debe hacer si se han facilitado datos personales?
Se debe acudir a la oficina más cercana de la entidad financiera para ponerlo en conocimiento de los responsables y así estar al corriente de posibles cargos que no son correctos, y que son únicamente consecuencia de un uso fraudulento.
También indican que es recomendable comprobar diariamente las cuentas para comprobar la ausencia de movimientos sospechosos y así poder atajar el problema lo más pronto posible.
Fuente | El Economista
