Cazador cazado. La utilización de productos de la empresa de seguridad rusa en sedes y centros pertenecientes al Gobierno de Estados Unidos quedó prohibida tras descubrir que el software se había utilizado para recopilar información. Pero la empresa rusa tampoco ha demostrado ser fuerte a la hora de proteger su información. Todo parece indicar que un grupo de hackers pertenecientes a Israel habrían conseguido acceder a la información de la compañía y la robada a Estado Unidos.
Lo que podemos considerar como guerra cibernética se vuelve aún mucho más hostil. Después del episodio vivido con Estado Unidos, Rusia y la empresa desarrolladora de productos de seguridad Kaspersky como principales protagonistas, ahora se ha sumado otra variable más a esta complicada ecuación.
Expertos en seguridad han tenido constancia de que hace dos años, hackers vinculados con el Gobierno de Israel tuvieron acceso a la información de los hackers afiliados a Kaspersky y que trabajaron para conseguir acceso a la información privada de las autoridades estadounidenses a través de los productos de seguridad de la compañía. Además de disponer de acceso a esta información, los hackers israelíes también han contado con acceso a la información sustraída a Estado Unidos.
En esta complicada cadena, el resumen parece bastante claro. Rusia ha hackeado a Estados Unidos. Israel ha hackeado a Rusia y ha tenido acceso a su información y la de Estados Unidos. Y después está la potencia americana que podría decirse que ha tenido acceso a la información de casi todos los países del mundo.
Obviamente, se ha tenido constancia de estas acciones, pero seguramente existan otras muchas de las que aún no se tiene constancia.
Israel, un invitado más a esta ecuación
Rusia no contaba con la participación de Israel en sus planes. Obviamente, ninguna de las partes ha confirmado cuál ha sido el alcance real. Todo parece indicar que los hackers israelíes habrían tenido acceso a la hoja de ruta de la empresa de seguridad en lo que se refiere a productos software y a conversaciones con las autoridades rusas. O lo que es lo mismo, tendrían acceso a cómo se cocinó el robo de información clasificada a la NSA. Pero Israel también habría contado con el acceso no autorizado a la información clasificada robada a las autoridades estadounidenses. Es decir, les han realizado el trabajo sucio sin quererlo.
Aprovecha los recursos de tus rivales
Parece que es la filosofía a aplicar. En esta ocasión, desde Israel han conseguido matar dos pájaros de un tiro. Han sido capaces de acceder a la información perteneciente a la compañía y Rusia, y además conseguir sin invertir tiempo adicional información relacionada con Estados Unidos.
El ciberespionaje es un tema complicado de tratar, que tiene en jaque tanto a autoridades como empresas importantes.
No será el último capítulo que vivamos, ya que existen muchos más casos que aún no han salido a la luz y que a lo largo de este año se publicarán.
¿Qué nivel alcanzará el ciberespionaje entre gobiernos de diferentes países?