Guía básica de seguridad si vas a usar un ordenador público para no correr riesgos innecesarios
Utilizar un ordenador público puede ser necesario en muchas situaciones. Por ejemplo si vamos a imprimir documentos a una copistería, si estamos esperando a coger un vuelo y en ese aeropuerto hay equipos públicos para usar, en una biblioteca para guardar archivos, universidad… Sin embargo esto hace que hay que tener en cuenta ciertas recomendaciones de seguridad. En este artículo vamos a hacer una guía básica de todo lo que hay que tener en cuenta si vamos a usar un ordenador público y no queremos comprometer nuestros datos y dispositivos.
Consejos básicos al utilizar un ordenador público
Conectar dispositivos con seguridad
Algo muy común es ir con un pendrive a una copistería e imprimir archivos. Por aquí pueden pasar muchos usuarios cada día, cientos a la semana. Seguro que alguno de esos usuarios tiene algún tipo de malware en el dispositivo. Es posible que incluso el ordenador no sea capaz de detectarlo y esto podría hacer que otros dispositivos se infecten.
Si no nos queda más remedio que conectar un pendrive en un equipo público, hay que tener en cuenta los riesgos. Especialmente no queremos que esa memoria USB posteriormente infecte nuestro ordenador u otros dispositivos. Por ello es necesario realizar un análisis de ese pendrive y ver si existen problemas. En un artículo anterior explicamos cómo analizar un pendrive con seguridad. Podéis visitar nuestro tutorial sobre cómo ver redes disponibles en sistemas Windows.
También es aconsejable utilizar una memoria USB secundaria para estos casos. No es bueno utilizar un pendrive para todo y que el mismo que ponemos en un equipo público posteriormente conectemos a la televisión o cualquier otro dispositivo.
No obstante, nuestro consejo es utilizar métodos alternativos a tener que poner el pendrive. Normalmente este tipo de equipos van a tener conexión a Internet. Siempre podemos enviarnos esos archivos por correo y abrirlo allí, en vez de utilizar un pendrive. Pero ojo, ¿qué tal si tenemos una cuenta específica para usar en ordenadores ajenos? Quizás sea una buena idea. Podemos enviarnos esos archivos desde la cuenta principal a la secundaria, que solo abriremos en estos casos. Incluso crear correos temporales solo para eso.
Navegar o iniciar sesión con seguridad
También puede ocurrir que utilicemos un ordenador público para consultar nuestras cuentas, redes sociales, correo electrónico… Con esto hay que tener mucho cuidado ya que podríamos comprometer nuestros datos y que nos roben información.
Algo muy importante y básico es no dejar esa información en el equipo. Nos referimos por ejemplo a que el navegador no almacene el nombre de usuario de correo electrónico o redes sociales, mucho menos que dejemos guardadas las claves o iniciada la sesión. Para ello una buena idea es entrar siempre en el navegador en modo incógnito. Así evitaremos que almacene esa información.
Si vamos a introducir contraseñas, una buena idea también es utilizar un teclado virtual. Windows, por ejemplo, ofrece esta posibilidad. Con esto logramos no tener que introducir las teclas en el teclado y que un posible keylogger las registre.
En cualquier caso nuestro consejo es evitar acceder a cuentas sensibles. Por ejemplo no entrar en la cuenta bancaria o hacer transacciones económicas. Si por alguna razón no nos queda más remedio, lo aconsejable es cambiar las contraseñas tan pronto como podamos acceder a un equipo seguro.
También es importante tener activada la autenticación en dos pasos siempre que sea posible. Cada vez son más los servicios que nos ofrecen esta posibilidad. En caso de que alguien pudiera robarnos la contraseña necesitaría un segundo paso para acceder a la cuenta.
Siempre que naveguemos por páginas hay que asegurarse de que están cifradas y nunca introducir datos personales si no lo están.
Consejos si realizamos descargas o editamos archivos
Puede ocurrir que necesitemos realizar descargas o editar archivos que previamente hayamos guardado en la memoria USB. Es posible que sea necesario utilizar otras aplicaciones para gestionarlo y, por tanto, esos archivos tengan que ser almacenados en una carpeta del equipo.
Nuestro consejo en estos casos es eliminar todo el contenido que descarguemos o generemos. Es importante no dejar allí los archivos que vamos a imprimir o posibles datos que hayamos descargado. Hay que asegurarse de que en la carpeta de descargas donde lo almacene el navegador no queda nada.
En definitiva, estos son algunos consejos esenciales cuando vayamos a utilizar un ordenador público. Lo principal es preservar nuestra seguridad y privacidad.