Existen diferentes tipos de monitores que puedes comprar para tu ordenador. Los hay más modernos, más antiguos, más eficientes, con mayor gasto… Elegir bien cuál comprar, va a ser clave si lo que buscas es ahorrar en la factura de la luz. Puede haber diferencias notables, por lo que te recomendamos que dediques tiempo a analizar bien cuál comprar. Vamos a explicarte qué tipo de monitor es el que tiene un menor consumo actualmente.
Especialmente, si eres un usuario que está delante del ordenador muchas horas al día, ya sea por trabajo, estudio u ocio, podrías notar un ahorro energético si tienes uno más eficiente. Al igual que ocurre con cualquier electrodoméstico, vas a encontrar diferentes alternativas para lograr uno que gaste lo mínimo posible.
Monitores LED, los de menor consumo
Podemos decir que, en líneas generales, los monitores LED son los que tienen un menor consumo. Son más eficientes que otros tipos, como LCD, OLED y otros más antiguos. Esto lo consiguen, ya que utilizan diodos como emisores de luz y así iluminar la pantalla. Esto requiere menos electricidad que las demás opciones.
Si comparamos las pantallas de tipo LED con las LCD, que son las más habituales, podemos decir que las primeras tienen un consumo menor de entre un 20 y 30%, para un tipo de monitor similar. Lógicamente, cuando mayor sea la pantalla, más energía gastará. Por tanto, podría darse el caso de tener un monitor LED muy grande y que consuma más que una pantalla LCD mucho más pequeña.
No obstante, hay un factor muy importante y es la eficiencia energética de cada pantalla. Vas a encontrarte con una etiqueta con una letra. En función de si consume menos energía o más, va a ser diferente. Las opciones más eficientes, son las que vienen marcadas con etiqueta A. Le seguiría la B, C, etc. Si vas a comprar un monitor nuevo, revisa bien esto.
Otro aspecto que hace que consuma más, es si tiene resolución Full HD o 4K, cuanta más resolución tenga y más Hz, mayor consumo tendrá el monitor. Normalmente un monitor Full HD de 24 pulgadas suele tener un consumo de unos 60Wh, a lo largo de 8 horas de trabajo, tendremos un consumo aproximado de 0,5kWh. Realmente no es demasiado, sobre todo si lo comparamos con el PC, pero sí es algo a tener en cuenta a la hora de comprar un monitor nuevo. Los modelos nuevos disponen de una tecnología de bajo consumo mejorada, siempre hay que revisar bien la etiqueta de consumo de todos los dispositivos, para así hacernos una idea de cuánto consumen.
Utilízalo correctamente
Más allá de elegir un modelo de monitor que sea más eficiente, es importante que lo uses bien. En muchos casos, vas a encontrar diferentes modos. Por ejemplo, cuanto mayor sea el brillo, mayor será el consumo. Es lógico. Es similar a lo que ocurre con la pantalla de tu móvil, por ejemplo; bajas el brillo cuando te quedas sin batería. El modo de ahorro de energía, o modo Eco, es otra opción para que gaste menos. Reduce el consumo energético, aunque eso pueda suponer que se ve ligeramente peor. Según para qué lo utilices, puede ser interesante si lo que buscas es gastar menos en la factura de la luz cada mes. Ubicarlo correctamente, podría ayudar a no tener que ponerlo al máximo.
Otro factor a tener en cuenta, es configurar el apagado automático. Es básico indicar que, siempre que vayas a estar fuera del ordenador, apagues la pantalla para ahorrar. Pero claro, esto se te puede olvidar o puede que salgas apenas unos segundos, pero termines pasando mucho tiempo fuera. Configurar el apagado automático una vez pase un tiempo prudencial, es otra solución.
En definitiva, elegir bien qué monitor utilizar va a ser clave. Si buscas ahorrar al máximo, contar con un monitor LED es la solución. Eso sí, ten en cuenta factores que hemos mencionado, como el tamaño de la pantalla, la etiqueta de eficiencia energética o la configuración que puedas darle.