Si te conectas a Internet por Wi-Fi, y ves que la red desaparece de vez en cuando, te vamos a explicar cuáles son los principales motivos. También, junto a cada posible causa, te vamos a dar algunas recomendaciones útiles para que puedas solucionar estos fallos. Puede ser bastante habitual que aparezcan errores y podría ser frustrante si ves que pierdes conexión o no puedes conectarte con normalidad.
El objetivo es que puedas tener una buena conexión inalámbrica en casa. Es importante lograr una buena velocidad, pero también tener estabilidad y que no se corten los vídeos, las videollamadas o que no tengas problemas al jugar online. A veces, solo con pequeños cambios puedes lograr una mejora importante.
Motivos por los que desaparece el Wi-Fi
Esto puede pasar independientemente de qué router tengas o desde qué dispositivo te conectes. Por ello, siempre debes asegurarte de que ubicas bien todos tus aparatos, los tienen bien configurados y no hay terceros elementos que puedan afectar de forma negativa.
Hay obstáculos
Lo primero que puede ocurrir, es que haya obstáculos. Esto puede hacer que la señal llegue muy débil, por lo que a veces podría hacer que la red inalámbrica desaparezca. Es algo habitual si estás muy lejos del punto de acceso, pero también cuando hay algo que pueda estar bloqueando esa señal.
Por ejemplo, podemos nombrar adornos metálicos, un gran muro o pared gruesa. Cosas así pueden hacer que la señal inalámbrica no vaya bien y, en ocasiones, desaparezca, lo cual va a provocar que no puedas conectarte. Para evitar este problema, lo que te recomendamos es que ubiques muy bien tu router. Asegúrate de que lo alejas de posibles obstáculos y que está en una zona central.
Interferencias con otros dispositivos
También hay que hacer mención a posibles interferencias que pueda haber con otros dispositivos. Esto, inevitablemente, va a hacer que la señal inalámbrica funcione peor. Puede pasar que, en ocasiones, enciendas algunos aparatos y, en ese momento, se generen interferencias y provoque que la red no aparezca.
Para evitar este tipo de problemas, una buena idea es utilizar la frecuencia de los 5 GHz. Es menos sensible a las interferencias, por lo que podrás reducir el riesgo de sufrir este inconveniente. Además, viene bien alejar los dispositivos que puedan ser problemáticos.
Canal saturado
Algo similar puede ocurrir si estás conectado a un canal saturado. Puede pasar que tus vecinos se conecten a cierta hora y eso provoque que la red esté saturada y tu Wi-Fi desaparezca, aunque sea momentáneamente. Cuantos más aparatos haya conectados al mismo tiempo, mayor probabilidad de problemas.
De cara a solucionar este problema, es buena idea que analices bien qué canal del Wi-Fi utilizas. Si te conectas a uno que esté menos saturado, todo funcionará mejor.
Hardware limitado
Por último, otro problema que no debes descartar es que tengas un hardware muy limitado. Puede ser por parte del router, pero principalmente del dispositivo que uses para conectarte, ya sea un ordenador, móvil, etc. Principalmente, si se trata de un equipo de baja calidad, es más frecuente este problema.
Lo que puedes hacer es utilizar repetidores Wi-Fi para potenciar la señal, pero también intentar mejorar, siempre que sea posible, el hardware de los dispositivos. Por ejemplo, podrías instalar un receptor Wi-Fi más potente en tu ordenador.
Por tanto, estas son algunas de las principales causas por las que el Wi-Fi podría desaparecer. Asegúrate de seguir los consejos que te hemos dado, para que puedas reducir el riesgo de problemas todo lo posible.