Hoy en día es frecuente para agilizar los trámites con los bancos que estos sean realizados por los propios clientes a través del área de clientes que cada banco posee en su página web, o bien a través de aplicaciones que se encuentran disponibles para los terminales móviles de última generación.
Sin embargo, y aunque todo esto nos resulte muy cómodo, ha provocado que el número de delitos informáticos relacionados con los bancos siga aumentando a una velocidad preocupante.
Este dato ha sido extraído de un estudio llevado a cabo entre diferentes directivos de entidades de varias sucursales bancarias.
¿Eres de los que realizas operaciones desde casa o desde tu teléfono móvil?
En el estudio participaron 878 directivos de distintas sucursales de 56 entidades financieras distintas. Dicho estudio ha revelado que el 46% del total de los directivos ha reconocido haber tenido que tramitar algún tipo de delito económico en los últimos 12 meses. Del 46% de delitos tramitados, cerca del 50% era correspondiente a delitos informáticos.
El phishing informático a la cabeza
Se trata del rey y forma que los ciberdelincuentes escogen para engañar a los usuarios y conseguir substraer el dinero. Esta práctica ha ido en aumento sobre todo en lo referido a los correos electrónicos solicitando contraseñas o nombres de usuarios.
En estos casos siempre se aconsejable desconfiar de este tipo de mensajes, y en caso de duda ponerse en contacto con el servicio de atención al cliente de la entidad bancaria para verificar la veracidad de dicho mensaje.
También es aconsejable asegurarse de que la dirección de la página del navegador corresponde con el de la entidad bancaria y que no aparezca una dirección únicamente formada por números, que suele ser lo habitual cuando se está produciendo phishing, aunque el resto de la página siga siendo igual a la original.
Las aplicaciones para terminales móviles, un nuevo problema
Se trata de otra de las alternativas que comienzan a utilizar con mas frecuencia los ciberdelincuentes. Muchos son los usuarios que confían en la facilidad y movilidad que sus teléfonos inteligentes les proporcionan, olvidándose que pueden ser igual o más vulnerables que en un ordenador.
Ha aumentado el número de aplicaciones bancarias falsas que se encuentran disponibles en tiendas de aplicaciones no oficiales que simulan ser una aplicación oficial de alguna entidad bancaria y sin embargo, se tratan de programas destinados a capturar las contraseñas y los nombres de usuario, e incluso a enviar mensajes premium a un número para que el autor de la aplicación consiga un doble botín.
Detenerse, observar, confirmar
Se trata de tres acciones básicas pero que muy pocos usuarios hacen. Siempre es necesario comprobar que el sitio en el que nos encontramos y en el cual vamos a ingresar nuestros datos de acceso es el correcto. La dirección URL es una de las características más significativas.
Una entidad bancaria nunca te va a pedir confirmar una contraseña o un nombre de usuario utilizando un correo electrónico. Si se quieren cambiar estos datos, desde la página de la propia entidad se puede realizar.
Las aplicaciones de los bancos es muy difícil que se encuentren en tiendas de aplicaciones no oficiales antes que en una tienda oficial. Las aplicaciones de las tiendas oficiales son verificadas antes de estar disponibles para su descarga, por lo que es mejor buscarla en las tiendas oficiales y en el caso de no encontrarla, puede ser que esa entidad aún no haya decidido desarrollarla.