Se trata de un problema que va a dar mucho de que hablar y que a corto plazo es probable que cause muchos problemas de seguridad y la aparición de duras críticas, como por ejemplo lo que ayer comentábamos de Oracle y sus 35 productos afectados. Mac OS X y Linux tendrían que ser dos de los productos susceptibles a sufrir problemas de seguridad pero Apple ya se ha dado prisa en confirmar que sus sistema operativo de escritorio no sufrirá dicho problema.
Desde la compañía de Cupertino afirman que las características avanzadas de la Bash de UNIX están por defecto desactivadas, quedando anulada cualquier posibilidad de explotar este fallo de seguridad de forma remota. Sin embargo, desde Apple no se han olvidado de aquellos usuarios que sí que las tienen activadas y que son sensibles a sufrir este ataque. La compañía ha confirmado que se encuentra trabajando en una actualización para evitar que estos usuarios sean víctimas de un ataque que haga uso de esta vulnerabilidad.
A pesar que desde la compañía creen que la mayoría de los usuarios tienen a día de hoy las espaldas cubiertas contra este fallo (muy poco han activado las funciones avanzadas) desde Cupertino son conscientes que deben sacar un parche de seguridad lo más pronto posible.
De momento los cibercriminales se han fijado en los servidores
Según han informado varias fuentes, los cibercriminales han centrado sus esfuerzos contra los servidores para conseguir hacerse con el control de estos y acceder a todos los datos que se encuentran en estos. Por el momento los dispositivos domésticos han quedado en un segundo plano para estos, algo que puede cambiar de un momento a otro.
Aunque no hayas activado estas funcionalidades avanzadas y el sistema no sea compatibles, desde la propia Apple recomiendan a los usuarioa actualizar de igual forma para solucionar el problema de seguridad y evitar así problemas derivados de esta vulnerabilidad.
Fuente | The Hacker News