Bitcoin es la criptomoneda por excelencia. De ella se ha hablado en multitud de ocasiones y de las más diversas facetas. Hoy nos toca escribir sobre una nueva investigación que ha sido publicada en referencia a esta moneda digital. Han revelado que las cookies y otros datos recolectados por rastreadores de anuncios en sitios de comercio electrónico pueden utilizarse para hacer transacciones de Bitcoin y perder el anonimato.
Pagar con Bitcoin
La idea es que, a pesar de los cuidados que pueda tener el usuario para ocultar su identidad detrás de una dirección de Bitcoin aleatoria al comprar un producto, no se puede esperar lo mismo de la plataforma donde se realiza la transacción en cuestión de privacidad y anonimato.
Por lo general, estos sitios almacenan cookies en cada usuario o bien comparten datos de sus compradores con empresas de publicidad. Esto se hace por razones financieras, ya que permite a los anunciantes publicar anuncios orientados, aumentando la posibilidad de que los usuarios hagan clic en ellos y aumenten los ingresos publicitarios de la tienda.
Estos datos que recogen los sitios de comercio electrónico pueden variar desde simples cookies que detallan el sistema del usuario hasta información sobre productos comprados, precios, correo electrónico o direcciones de envío.
Incluso si un sitio o un rastreador de anuncios no almacena esa información, un atacante determinado o una agencia podría agregar datos de varias de publicidad. Los crawler o rastreadores pueden ayudar a los navegadores.
Agregación de datos
La agregación de datos ayuda a los investigadores a crear perfiles más precisos de los usuarios deseados o enlazar direcciones sospechosas de Bitcoin con identidades del mundo real, nombres de usuario en línea, direcciones de correo electrónico y otros datos que podrían haber sido recopilados por los sitios de comercio electrónico y transmitidos a los anunciantes.
Además, en el caso de que los rastreadores de anuncios no obtenga muchos datos sobre el cliente que pagó un producto a través de Bitcoin, este usuario podría volver posteriormente y pagar con tarjeta de crédito u otro método.
Esta investigación ha sido realizada por un equipo de la Universidad de Princeton y analizó un total de 130 sitios de comercio electrónico en 21 países y que permitían a los usuarios pagar con Bitcoin. Los investigadores analizaron cómo estos sitios manejan las transacciones de Bitcoin y qué información se filtra durante el proceso de pago.
Datos del estudio
Si desglosamos parte del estudio, aparece por ejemplo que 53 de los 130 sitios filtraron información de pago a terceros, 32 del total filtraron la dirección de correo electrónico, 27 de ellos filtraron el nombre y 25 los apellidos, 15 de los 130 no mantuvieron de forma anónima el nombre de usuario o 10 del total filtraron el número de teléfono.
Todos estos datos pueden ser cruciales para perder el anonimato en Internet de un usuario a la hora de comprar con Bitcoin en comercios electrónicos. Más aún si estos datos se van acumulando a lo largo de los meses o años.
Esto, por otra parte, es perjudicial para un delincuente que haya podido obtener sus fondos de manera ilícita y que ahora pueda quedar reflejada su identidad.