Si quieres incorporar domótica en tu hogar, debes pensar muy bien qué tipo de tecnología utilizar para conectar los diferentes dispositivos a la red local. Hay fabricantes que lo apuestan todo por la conectividad Wi-Fi en 2.4GHz que todos conocemos, sin embargo, hay otros fabricantes que apuestas por tecnologías de comunicación inalámbricas que están orientadas a la domótica, como ZigBee. ¿Cuál debería elegir para que los dispositivos se comuniquen de manera inalámbrica? Hoy en RedesZone os vamos a explicar los puntos fuertes y débiles de cada solución.
Conexión por WiFi
Todos utilizamos la conectividad WiFi en nuestro hogar para conectar los diferentes dispositivos como smartphones, tablets, ordenadores portátiles y también los dispositivos que forman parte de la domótica y la videovigilancia en nuestro hogar. Algunos dispositivos que solemos conectar por WiFi y que forman parte de la domótica son los enchufes inteligentes, los cuales nos permiten encender y apagar diferentes eletrodomésticos de forma local y remota, también tenemos las cámaras IP que todas ellas se conectan por WiFi o cable, para poder ver en tiempo real todo lo que está ocurriendo en casa.
Otros dispositivos que también podemos conectar por WiFi son los detectores de movimiento, detector de apertura de ventanas y puertas, sensores de inundación por si tenemos fugas de agua, sensores de fugas de gas, relés WiFi para controlar circuitos eléctricos fácilmente, y muchos más dispositivos, como los que se usan para controlar el aire acondicionado o la calefacción en nuestro hogar.
Utilizar la conexión por WiFi para los diferentes dispositivos domóticos tiene sus puntos fuertes:
- Todos se conectan directamente al router, al punto de acceso WiFi o al sistema WiFi Mesh, ya sea en la banda de 2.4GHz o 5GHz. No vamos a necesitar ningún tipo de «hub» para conectarlos a la red local.
- Si tenemos una buena red inalámbrica WiFi, todos estos dispositivos tendrán una muy buena señal inalámbrica en todos ellos, haciendo que la latencia sea muy baja y que las acciones se realicen muy rápido.
Sin embargo, utilizar el WiFi para conectar decenas de dispositivos de domótica también tiene sus puntos débiles, a continuación, os explicamos los más destacables:
- El WiFi está compartido con otros clientes inalámbricos que se conecten a la red en 2.4GHz o 5GHz, por lo que es posible que tengamos alta latencia en algunos momentos debido a que está en uso.
- Existen interferencias WiFi con nuestros vecinos, sobre todo si utilizamos los 2.4GHz para conectar los diferentes dispositivos.
- Cuantos más dispositivos hay conectados, más lentitud tendremos en la red.
- Alto consumo de energía, lo que podría provocar que la autonomía de dispositivos alimentados por baterías sea bajo.
Ahora que ya sabéis los puntos fuertes y débiles, vamos a ver qué características tenemos en ZigBee.
ZigBee: ¿es lo mejor para la domótica?
ZigBee es un protocolo de comunicación inalámbrica que está diseñado específicamente para proporcionar el mejor rendimiento y la menor latencia en los dispositivos domóticos. Además, un detalle muy importante es que está diseñado para comunicaciones que necesitan ser seguras, tienen una baja tasa de envío de datos, y son de bajo consumo. Por lo tanto, sobre el papel, ZigBee es perfecto para la domótica en el hogar.
Los puntos fuertes de usar ZigBee para la domótica en casa, son los siguientes:
- Protocolo diseñado para la domótica y muy optimizado.
- Bajo consumo de energía, ideal para dispositivos con baterías.
- Topología en malla de toda la red, por lo que todos los dispositivos están conectados entre ellos. También se puede usar topología en estrella o árbol.
Sin embargo, en ZigBee no todo es perfecto, y es que debemos tener en cuenta ciertas cosas negativas, como los diferentes tipos de dispositivos ZigBee que existen:
- Necesitamos un «coordinador» que es el tipo de dispositivo más completo, y debe haber uno por red. Se encarga de controlar la red y los caminos que deben seguir los dispositivos para conectarse entre ellos. También necesitamos un «router ZigBee» que se encarga de interconectar dispositivos separados en la topología de red.
- Si el dispositivo coordinador y router deja de estar disponible por algún motivo, toda la red ZigBee se cae y se queda sin comunicación.
Como podéis ver, en ZigBee dependemos de una especie de «hub» para interconectar los diferentes dispositivos entre sí y con la red local, si este dispositivo no está disponible, ningún dispositivo de la red lo estará.
Los puntos fuertes del ZigBee superan a los negativos. Si vas a montar domótica en casa, deberías valorar la posibilidad de instalar ZigBee en lugar de WiFi, no obstante, si tienes una red WiFi bien dimensionada, también te funcionará muy bien.