Tener una conexión Wi-Fi lenta no es algo extraño. De hecho, son muchas las personas que tienen problemas para lograr una buena velocidad cuando conectan un ordenador o móvil a Internet. Lo que solemos hacer para intentar solucionarlo es comprar algún dispositivo, como puede ser un repetidor Wi-Fi, sistema Mesh o PLC. Pero, ¿realmente es necesario? A veces sí, pero en otras muchas ocasiones puedes solucionarlo sin pagar nada. De esto último vamos a hablar en este artículo.
Cuando tenemos problemas con la red inalámbrica WiFi, solemos recurrir a comprar algún dispositivo nuevo, ya sea un nuevo router WiFi, un repetidor para intentar mejorar la señal, o directamente queremos quitar toda la red actual y proceder a la compra de un sistema WiFi Mesh de alto rendimiento para no tener ningún tipo de problema. En muchos casos, deberías probar diferentes cosas antes de gastarte el dinero en comprar algo que, posiblemente, no vayas a necesitar.
Qué probar para mejorar el Wi-Fi antes de comprar algo
Cuando veas que tu Wi-Fi no va bien, es importante que realices algunas pruebas para intentar descartar problemas y solucionar el error. En ocasiones verás que simplemente con realizar algunos ajustes logras que la cobertura llegue mejor y además tener más velocidad cuando te conectes con el móvil, PC o cualquier aparato.
Comprueba si es culpa del dispositivo que utilizas
Lo primero que debes hacer antes de comprar algo para mejorar el Wi-Fi es ver si el problema es del dispositivo que estás usando. Por ejemplo, si intentas conectarte desde el ordenador o desde el móvil y ves que la velocidad no es buena, prueba primero a ver si se trata de algún fallo con ese equipo en concreto. Puedes usar otro dispositivo desde la misma ubicación y ver si el problema sigue o no. Por ejemplo, si notas que al intentar conectarte con el ordenador no va bien, prueba también desde el móvil y así comparas la velocidad y calidad.
Es muy importante descartar que el problema lo tengamos en un dispositivo en cuestión. Por ejemplo, si siempre tenemos problemas con la red WiFi usando nuestro ordenador portátil, pero en el móvil funciona perfectamente, seguramente sea por dicho ordenador portátil. En este último caso, deberías revisar la versión del sistema operativo y si existen actualizaciones, también deberías revisar si hay alguna actualización de drivers WiFi para tu tarjeta. Es muy importante tener siempre actualizado tanto el sistema operativo como los drivers de nuestras tarjetas WiFi.
Generalmente el sistema operativo Windows, actualiza automáticamente los drivers de los diferentes componentes, no obstante, esta actualización no la realiza con las últimas versiones que podemos encontrar en las diferentes webs oficiales, sino que lo hace con versiones anteriores que pueden llevar meses. Nuestra recomendación, es que instaléis este tipo de actualizaciones por vosotros mismos de manera manual, entrando en la web oficial de la marca o fabricante, buscando el modelo exacto y posteriormente descargar desde la web oficial los drivers. Una vez hecho esto, tendremos que ejecutar un archivo .exe, o bien realizar una actualización de drivers algo más «manual», pero siempre con un asistente de actualización que es realmente muy sencillo de utilizar.
Mejora la ubicación del router
Otro paso importante que debes dar es intentar mejorar la ubicación del router. Esto es clave para lograr una buena conexión y no siempre lo colocamos bien. Por ejemplo, es común que lo tengamos en una zona de la vivienda muy alejada de donde realmente vamos a conectarnos. Intenta ponerlo en un lugar más céntrico. También deberías apartarlo de otros dispositivos que puedan crear interferencias o quitar obstáculos que puedan bloquear la señal. Por ejemplo, no pongas láminas metálicas cerca o no lo pongas junto a un gran muro o mueble. Mientras más espacio tenga, mejor.
Lo que más afecta a la señal WiFi son los cristales y también los espejos, por lo que deberías alejar el router lo máximo posible de este tipo de materiales. De lo contrario, tendrás graves deficiencias en la red inalámbrica WiFi. Algo que afecta muchísimo al router, es la altura, no deberías colocar el router en el suelo, lo normal es ubicarlo en una zona elevada un metro del suelo o más, de esta forma, tendremos la mejor recepción de señal posible.
En definitiva, lo que debes alejar de tu router WiFi para que funcione correctamente, es lo siguiente:
- Aléjalo de equipos que generen interferencias, obstáculos y también materiales como el metal, cristales, espejos así como de paredes gruesas.
- Nunca lo pongas en el suelo, colócalo a una altura entre 1m y 1,2m aproximadamente. Hay equipos que están diseñados para estar en el techo, ponlo ahí si es un dispositivo de estos.
- Hay equipos que están diseñados para colgarlos en la pared, hazlo así si es uno de estos equipos.
Otro aspecto muy importante, es que si tu router se coloca de manera horizontal, nunca debes poner nada encima del router. Hay muchas personas que ponen macetas, marcos de fotos, e incluso libros, impidiendo o dificultando enormemente la ventilación del equipo, por lo que podría calentarse y funcionar bastante mal, porque podremos tener microcortes, tanto de la conexión a Internet como también de la conexión WiFi. Nunca deberías poner nada encima o cerca del router, aunque se coloque de forma horizontal y no vertical. Por estos motivos, los operadores suelen instalar routers que se ponen de forma vertical, para evitar colocar nada encima de él.
Como podéis ver, hay muchas recomendaciones realmente útiles para colocar tu router en un lugar óptimo, y de esta forma conseguir la mejor cobertura posible.
Comprueba el canal y la banda del Wi-Fi
Por otro lado, deberías revisar a qué canal del Wi-Fi tienes conectado el router. Si vives en un edificio con muchas viviendas, es probable que tus vecinos interfieran en la señal. Eso va a afectar a la red inalámbrica y va a impedirte conectar tus dispositivos correctamente y tener una buena velocidad. Además, la banda del Wi-Fi a la que te conectes va a ser clave. Vas a poder usar la de los 2,4 GHz y también la de los 5 GHz. La primera es la mejor cuando te conectas muy lejos del router, aunque tiene menos velocidad. En cambio, la segunda es perfecta para lograr la máxima velocidad cuando te conectas cerca del router.
Gracias al programa Acrylic Analyzer, tenemos la posibilidad de analizar en detalle las redes WiFi de nuestro alrededor, con el objetivo de saber cuántas redes tenemos, los canales utilizados, así como el número de clientes inalámbricos que hay conectados a cada router WiFi o punto de acceso. De esta forma, podemos saber en todo momento qué es lo que está ocurriendo en la red inalámbrica de nuestros vecinos, para cambiar el canal de emisión por uno que esté mucho más libre. Esta programa tiene dos versiones, una versión completamente gratuita para ver información básica y gráficos de canales, y una versión de pago que es muchísimo más avanzada, y que nos permitirá realizar incluso auditorías WiFi de las redes inalámbricas de nuestro alrededor.
Descarta que el problema sea el router WiFi
En muchas ocasiones, el problema de falta de velocidad en la red WiFi se debe al propio router, ya sea por los componentes que lleva, por sus características técnicas o simplemente porque una versión del firmware tiene algún tipo de fallo o bug, y no permite obtener más velocidad. En estos casos, lo mejor que podrías hacer es intentar probar otro router de similares características, para comprobar que, efectivamente, hay un problema con el router principal. Si tienes un router de operador, podrías llamar a tu compañía de Internet y solicitar un cambio de router indicando que tienes problemas con la conexión inalámbrica. Si tienes un router que has comprado tú, y no ha pasado el periodo de garantía, podrías devolverlo y que te envíen otro exactamente igual, para descartar si el problema es de esa unidad en concreto.
Es muy importante realizar una prueba cruzada, de tal forma que descartemos por completo si es el router o no el problema, porque de esta forma podrás centrarte en otros elementos de la red que sí podrían causar este problema tan molesto.
Como ves, puedes realizar algunos cambios y ajustes antes de comprar algo para mejorar la red Wi-Fi. El objetivo es lograr una buena calidad de la conexión inalámbrica y no tener problemas. No obstante, a veces no quedará más remedio que usar un buen repetidor Wi-Fi.