Generalmente nos conectamos a nuestro router mediante la utilización de un cable de red o por WiFi. El inconveniente que tenemos, es que nuestros routers tienen unos puertos Ethernet limitados y que habitualmente suelen ser cuatro. Además del típico PC, otros equipos que también pueden o necesitan conectarse por cable de red son los portátiles, los PLC e incluso el servidor NAS o impresora. Esto puede hacer que llegue un momento, en el que no tengamos suficientes puertos Ethernet para nuestros equipos. Entonces, tenemos que buscar alternativas para ampliar los puertos LAN de un router y aquí es donde destaca como mejor opción el switch, aunque no es la única.
Normalmente bastará con utilizar los puertos que viene el router pero no siempre es suficiente si quieres conectar por cable varios ordenadores, por ejemplo, o si tienes algunos PLC utilizándose en casa con el fin de mejorar la señal WiFi. Por bueno o completo que sea el router es probable que los puertos LAN que tiene sean insuficientes y que necesitemos más.
El problema suele comenzar cuando compramos un nuevo dispositivo y vemos que todos los puertos RJ45 de nuestro router están ocupados. Entonces, tenemos que buscar una solución para ampliar los puertos LAN, pero antes vamos a definir qué son o explicar una serie de aspectos que son fundamentales y que deben quedarnos bien claros antes de hacer nada o modificar nada en nuestro router.
De esta manera, si tenemos en cuenta una serie de aspectos, será más fácil acertar con el dispositivo con el que podremos ampliar el número de puertos Ethernet en casa. Así no habrá ningún tipo de problema si queremos conectar una gran parte de dispositivos por cable para disfrutar de una mayor estabilidad y velocidad en la conexión.
Qué tener en cuenta
Antes de empezar a saber cuáles son los principales métodos que tenemos para que haya más puertos RJ45 en nuestro router hay que tener claros una serie de aspectos fundamentales. Lo primero que debes saber es qué es un puerto LAN, por ejemplo, pero también qué relación existe entre el puerto RJ45 con el cable Ethernet y qué debemos tener en cuenta cuando vayamos a comprar un cable.
Qué debemos tener en cuenta al elegir un cable Ethernet si queremos que sea de una buena calidad, que aguante muchos años con nosotros y que nos de la mejor velocidad posible para sacar partido a lo que pagamos cada mes con nuestro operador.
Qué es un puerto LAN
El puerto LAN también es conocido como puerto de red de área local con conector RJ45. Sus siglas LAN vienen del Local Area Network, que, traducido, significa «red de área local». Básicamente se trata de puertos en los que permite la comunicación de dos o más PC en la red local doméstica, y tienen conexión a Internet a través del router. Debemos recordar que los routers tienen normalmente dos interfaces, WAN de Internet y LAN de la red local, la LAN se divida en la LAN cableada y en la WLAN que es lo mismo que la LAN, pero con WiFi.
Esta es la parte trasera de un router, aunque debes tener en cuenta que cada equipo puede varias, pero estos son los distintos puertos y entradas que vas a encontrar en estos dispositivos:
En color amarillo podéis ver un ejemplo en el que se observan sus 4 puertos LAN. En este sentido, hay que señalar que a lo largo de los años han ido evolucionado y cada vez soportan una mayor velocidad. La velocidad del puerto se rige bajo los estándares BASE-T, por lo tanto, nuestros routers domésticos actuales serían:
- 10 BASE-T, que funciona transmitiendo datos a 10 megabits por segundo. En estos momentos, aunque es compatible ya no se usa.
- 100 BASE-TX, que transmite datos a una velocidad de 100 Mbit/s. Es la que está presente sobre todo en routers ADSL.
- 1000 BASE-T, que sería la que transmite datos a 1 Gigabit por segundo. En este caso, es la que tenemos presente en la mayoría de routers de fibra actuales.
No obstante, las conexiones de fibra ya están llegando a ofrecer 1 Gbps incluso más. Por eso, ya han aparecido routers que tienen velocidades superiores 2,5G, 5G e incluso 10Gbps en su parte Ethernet LAN. Estos puertos LAN son donde vamos a conectar nuestros PCs, portátiles, impresoras, servidores NAS, PLCs y cualquier otro dispositivo cableado.
La relación del puerto RJ45 con el cable de red Ethernet
Si queremos aprovechar todo el potencial de nuestra conexión a Internet, nuestro puerto LAN tiene que soportar una velocidad determinada como ya explicamos en el apartado anterior. Luego, para conectarnos a ese ordenador y que se establezca la comunicación, vamos a necesitar un cable de red Ethernet. Sin embargo, los cables de red no son todos iguales. Esto se traduce en que, si no escogemos el correcto, podríamos estar desaprovechando todo el ancho banda de nuestra conexión. Así, los cables de red se clasifican en categorías en función de su velocidad. Estas son los que más se utilizan actualmente:
Por ejemplo, los puertos Gigabit Ethernet de la mayoría de los routers actuales, para aprovechar una conexión superior a 100 Mb, necesitarían un cable de red de categoría Cat 6 o Cat 5E. Ahora mismo, dada la baja diferencia de precio entre ambos, sería más interesante un cable de red Cat 6.
En general hay muchos aspectos que debemos tener en cuenta a la hora de elegir un cable de red, más allá de la categoría o de la velocidad que estos nos proporcionan. Uno de estos factores es el apantallamiento electromagnético. Este es el blindaje que hace de protección a los cables que se encuentran dentro del recubrimiento de plástico. Pero pueden ayudar en otras cosas, como la estabilidad de la red, o la calidad de las velocidades durante la transmisión. Estas, por ejemplo, no son tan importantes cuando hablamos de cableado eléctrico. Pero incluso con estos podemos encontrar varios tipos.
- UTP: Nos referimos a esto cuando el cable, directamente no tiene apantallamiento. No hace que el cable sea malo, pero no es el más adecuado para instalaciones cuando se meten dentro de las paredes.
- FTP: Es muy parecido al UTP. Los pares de cables no tienen apantallamiento. Pero si cuentan con una pantalla general que los envuelve todos en uno solo. Esto es principalmente para protegerlo frente a interferencias.
- STP: Es el opuesto a FTP. Cada par va recubierto por una malla que actúa como pantalla contra las interferencias y el ruido de la electricidad. La protección, sube considerablemente en comparación con el modelo anterior. Son los mejor preparados para las instalaciones que van por los tubos corrugados de las paredes.
- SFTP: Este es un cable especial, pues combina FTP y STP. Primero, los pares de cables están recubiertos por mallas protectoras, y a su vez estos recubiertos en un solo conjunto por una capa extra. Son los mejores para evitar interferencias, y son perfectos para cuando la instalación requiere un cable muy largo. Por la contra, son más caros que los normales.
Elegir bien el cableado que vamos a utilizar, es tan importante como los puertos a la hora de realizar una comunicación. De lo contrario, si estás pagando por una tarifa con gran velocidad, pero luego no tienes un cable superior, entonces estarás pagando de más para nada. Por esto mismo es uno de los aspectos más importantes si uno quiere disfrutar de grandes velocidades.
Qué podemos utilizar ampliar los puertos LAN
En el momento que vemos que no tenemos suficientes puertos RJ45 disponibles, llega el momento de buscar soluciones. Bien porque hayas comprado nuevos dispositivos que hacen que los puertos sean insuficientes o simplemente porque pretendes tener nuevos aparatos, como dispositivos PLC o un NAS, y estés pensando en ampliar los puertos. Por suerte tenemos varias opciones disponibles entre las que elegir y decidirnos según cada uno y según el presupuesto, lo que quieras complicarte o los puertos que quieras. En este sentido, si queremos ampliar los puertos LAN, tendríamos las siguientes opciones disponibles:
- Switch.
- Hub.
- Ethernet Splitter.
- Un router antiguo que no estemos usando.
A continuación, empezaremos hablar de cada uno de ellos y explicaremos qué ventajas nos pueden aportar. Sin duda, de los que he nombrado el switch sería el más recomendable, por eso es el que vamos a tratar más fondo.
Switches
El Switch es la opción más fácil y barata que podemos escoger cuando deseamos ampliar los puertos LAN de nuestro router. En cuanto a su configuración, es muy sencilla. Lo único que debemos hacer es conectar por cable de red nuestro router con el Switch. A continuación, ya podremos utilizar el resto de puertos Ethernet disponibles para conectar los nuevos equipos que antes no podíamos usar. Aquí tenéis la foto de un switch con 8 puertos Gigabit RJ-45 con velocidad de 10/100/1000 Mbps y que cuesta unos 25€ aproximadamente.
Otra de las características del switch es que soporta la comunicación Full-Duplex. Esto significa que los dispositivos conectados a él pueden enviar y recibir datos a la vez, lo cual va a implicar tener una red más rápida. Actualmente, los puertos LAN de un switch normalmente son Gigabit Ethernet, aunque ya estamos empezando a ver los primeros switches Multigigabit con velocidades 2.5G, 5G y superiores.
Si queremos elegir un buen switch para ampliar los puertos LAN, debemos fijarnos en varios aspectos muy importantes:
- El número de puertos Ethernet que necesitamos. A nivel doméstico compraremos generalmente un Switch con 5 u 8 puertos de red. En este sentido lo recomendable sería comprar uno que nos permitiese, a ser posible, que después de utilizarlo nos quedasen al menos uno o dos libres. Así que debemos calcular bien los que necesitamos.
- La velocidad de los puertos Ethernet. Aquí tenemos que fijarnos en la velocidad máxima que son capaces de sincronizar, ya sea 1 Gbps, 2,5 Gbps, 5 Gbps o 10 Gbps. Actualmente lo mínimo recomendable sería que al menos soportarse una velocidad de 1 Gbps. Además, en algunas ocasiones puede ser interesante que tenga puertos SFP o SFP+ para fibra óptica o cables DAC.
- Los puertos de uplinks a 10G: también puede ser interesante tener uno o dos puertos a 10 Gbps para interconectar los switches y no tener cuello de botella. Esto es opcional, porque encarece el precio y no siempre necesario. Estos puertos también se pueden usar en los servidores NAS para no tener cuello de botella en la red cableada.
- Si compras un Switch no gestionable, es recomendable que compres uno con IGMP Snooping para que los servicios de IPTV funcionen perfectamente.
En cuanto a un switch con 5 puertos Gigabit Ethernet podríamos comprar el D-Link DGS-105:
Y si necesitamos un switch con 8 puertos Gigabit Ethernet el D-Link DGS-108:
Además, existen infinidad de modelos que se adaptan a los que necesitas, tanto si buscas muchos puertos sin importar la velocidad, como si buscas algo más avanzado con velocidades más elevadas que hagan que no pierda calidad el rendimiento de tu red.
En estos casos puedes optar por algunas de las marcas más populares como los switches EnGenius.
El modelo EWS1200D-10T, cuenta con ocho puertos Gigabit y dos ranuras de doble velocidad SFP. Una opción muy interesante si buscas fiabilidad sin perder velocidad en tu conexión centralizada.
Otra de las marcas más populares y recomendadas es Netgear. Una de las imprescindibles tanto en redes pequeñas como en redes más amplias que necesitan características de gestión más avanzadas.
Entre sus modelos podemos encontrar el Netgear GS108GE, por ejemplo. Un switch perfecto si buscas algo económico, versátil y fácil de instalar. Cuenta con 8 puertos Gigabit Ethernet y con un sistema Plug & Play, haciendo su instalación muy sencilla sin necesidad de realizar ninguna configuración. Conéctalo y empieza a funcionar.
Por último, TP-Link es una de las marcas más populares tanto para extensores de red como repetidores WiFi o PLC, como otro tipo de accesorios y componentes de red como son, en este caso, sus switches. Modelos con un funcionamiento eficiente a un precio económico para ampliar la capacidad de tu red sin necesidad de hacer una gran inversión.
En la misma línea de los switches que te hemos mostrado, el TL-SG108E, cuenta también con 8 puertos Gigabit Ethernet aunque también podrás optar por el modelo de cinco puertos si no necesitas tantos. Con sistema Plug & Play y una carcasa de metal que lo hace resistente a golpes, lo convierten en uno de los switches más recomendados si buscas algo sencillo y económico para expandir tu red local.
Como hemos mencionado, puedes optar también por algún switch con menos puertos si no necesitas ampliar tanto tu red. Existen modelos de cinco puertos como es el caso del TP-Link SG105. Con las mismas características que el modelo que acabamos de mencionar pero con 3 puertos menos si lo que buscas es un switch más pequeño y manejable que cumpla con tus necesidades de red.
Por tanto, si vas a optar por un switch de red debes tener en cuenta factores como la cantidad de puertos, si tiene o no puertos Gigabit Ethernet para lograr la máxima velocidad y la velocidad que admite, ya que pueden ir de 1 Gbps hasta incluso 10 Gbps. De esta forma podrás conectar dispositivos por cable y tener más puertos disponibles.Además, otras características como QoS o PoE, pueden mejorar de manera significativa la calidad y la gestión de tu red local. Ten en cuenta estos aspectos antes de comprar uno y elige el que mejor se adapte a tus necesidades.
Hub Ethernet: una opción ya desaparecida
El Hub Ethernet ha sido sustituido por el Switch. Un Hub podríamos calificarlo como una gran cámara llena de tráfico de red, donde los paquetes entran y salen para encontrar los equipos a los que están tratando de conectarse. Hoy en día podemos decir que no se utiliza apenas debido a sus limitaciones.
El Hub utiliza lo que se conoce comunicación semidúplex. Debido a esta forma de operar, provoca retenciones y colisiones de datos, acaparando un valioso ancho de banda y provocando una ralentización de la red. En ese sentido la situación se complica cuando se usan varios dispositivos al mismo tiempo. Si tenemos en cuenta que podemos conseguir un Switch por unos 20 € no compensa usarlo para ampliar los puertos LAN, salvo que ya dispongamos de uno.
Por este motivo, si quieres contar con una buena velocidad de Internet y poder conectar equipos por cable de red sin problemas, te recomendamos evitar un Hub y optar por un Switch de red. Tendrás un rendimiento mayor, evitarás problemas y conseguirás que la conexión funcione lo mejor posible.
Ethernet Splitter: lo más barato y lo que menos posibilidades ofrece
Un Ethernet Splitter es un pequeño aparato con tres puertos Ethernet, dos en un lado y uno en el otro. Básicamente va a permitir duplicar los conectores de Ethernet disponibles.
Una cuestión a considerar es que un Ethernet Splitter reduce la cantidad de cables utilizados en un cable Ethernet Cat 5e, pero reduce el rendimiento de datos de 1000 Mbps a 100 Mbps. Su principal beneficio que tiene es que permite utilizar un cable de red para dos conexiones Ethernet y son baratos. Si tenemos en cuenta que por un poco más de dinero tenemos un Switch para ampliar los puertos LAN en la mayoría de ocasiones no compensa su uso.
Unos ejemplos de Splitter Ethernet que podéis comprar serían estos:
Por tanto, es una opción si necesitas adquirir algo económico y que funcione de forma básica. Si necesitas la máxima velocidad, pasar de esos 100 Mbps de límite, te recomendamos nuevamente optar por un Switch de red y evitar un Ethernet Splitter con el que estarás más limitado y no podrás aprovechar por completo tu conexión de red.
Router antiguo para ampliar los puertos LAN
Un router viejo te puede sacar de un apuro en estas situaciones, y podrías configurarlo para utilizarlo como si fuera un switch. Seguro que tienes en casa algún aparato que no necesites. Es muy útil que, al cambiarnos de operadora, guardemos el que teníamos previamente. Siempre podemos darle un segundo uso y este es un ejemplo.
La cuestión es que, si se trata de un router ADSL, los equipos conectados a él no podrían superar en un test de velocidad los 100 Mb. Por otro lado, si es un router de fibra que todavía conserváis por casa entonces la velocidad máxima que podrías alcanzar sería de 1 Gb. Lo único que debéis hacer en la configuración del router viejo es:
- Cambiar la IP LAN del router por una IP dentro del rango del router principal
- Desactivar el servidor DHCP del router viejo
- Conectar un cable desde puerto LAN del router principal al puerto LAN del router viejo.
Una vez más, aunque es una opción que puedes utilizar perfectamente para ampliar los puertos Ethernet disponibles, debes asegurarte de que el modelo de router que tienes funciona bien y además es compatible con Gigabit Ethernet. Hoy en día es muy importante que sea así, ya que de lo contrario estarías limitado a Fast Ethernet y no podrías aprovechar la velocidad de fibra óptica, que lo normal es que sea superior a los 100 Mbps.
Dispositivos PLC
En caso de que sigas buscando otras opciones para conectar por cable más dispositivos en tu casa, también está la opción de lograrlo con los dispositivos PLC. Aunque, para ello, deben contar con una buena calidad. De esta manera, podrás conseguir igualmente una conexión más estable y mayor velocidad, siempre y cuando te fijes en las características de estos dispositivos.
Hay que tener en cuenta que se usa el cableado eléctrico del hogar, por lo que es un factor que debes tener en cuenta. Este tipo de dispositivos suelen ofrecer un puerto Ethernet. Por lo que podrás conectar por cable distintos equipos si eres de los que necesitan el mayor número de puertos disponibles.
En función de la calidad y la marca, está claro que el precio será mayor o menor. Pero, lo que está claro es que mientras mayor sea su calidad, mejor servicio te ofrecerá. Además de que su durabilidad será todavía más que una opción más barata, al igual que la velocidad que podría ofrecer no sería la misma.
¿Tendré el mismo rendimiento?
Aumentar los puertos Ethernet es de gran ayuda como podemos ver, pero debemos tener algo muy importante en cuanto al rendimiento real que vamos a obtener. Cuando compramos un switch Gigabit o superior, hay que tener en cuenta que, todos los equipos que conectemos directamente al switch, el tráfico de Internet pasará por el único enlace troncal al router que tenemos (el cable que va desde el router hasta el switch), por lo que podríamos tener cuello de botella en determinados escenarios. Por este motivo, es recomendable tener un cierto balanceo de carga de los equipos conectados, poner algunos directamente al router y otros al switch.
Si vas a transferir datos a través de la red local con los PC conectados al switch, debes saber que este tráfico no pasará hacia el router, sino que el switch directamente conmutará los paquetes y los enviará de origen a destino sin pasar por el enlace troncal. Esto hace que los switches sean el mejor aliado si vamos a transferir datos de manera masiva, porque el router no se sobrecargará por este exceso de tráfico. También es una gran idea conectar el servidor NAS directamente al switch, sobre todo si vamos a acceder a él desde los PC que hay conectados en la LAN.
Los switches no gestionables no suelen tener una funcionalidad muy importante: el Spanning-Tree Protocol o alguna otra tecnología para evitar los bucles a nivel de capa de enlace. Si conectamos un cable de red desde el router hasta el switch, todo funcionará correctamente, pero si conectamos un segundo cable desde el router hasta el switch pensando que doblaremos la velocidad, lo cierto es que la red colapsará porque habrá un bucle, y dejará de funcionar todo. Lo mismo ocurre si conectas un cable de red desde el switch al mismo switch por equivocación. En el caso de que el switch tenga un sistema de detección y prevención de bucles, no pasará nada, de lo contrario, toda la red caerá.
La mayoría de equipos de este tipo disponen de sistemas de QoS para priorizar el tráfico automáticamente y que no tengamos que hacer nada, no obstante, los modelos gestionables disponen de muchas más opciones para adaptarse a las necesidades de los usuarios.