Disponer de una conexión de Internet hoy en día es fundamental. No solo hablamos de usuarios particulares, sino también de cualquier empresa u organización. Es el medio utilizado para comunicarnos, para buscar información, trabajar, estudiar, entretenimiento… Son muchas las utilidades que podemos encontrar. En muchos casos además resulta muy importante tener Internet en toda la casa. Vamos a ver qué opciones tenemos tanto para conectarnos de forma inalámbrica como a través de cable.
Por qué es importante tener Internet en todas partes
Tener Internet en cualquier lugar se ha convertido en algo esencial. Como decimos es la tecnología que nos permite estar en contacto con amigos o familiares en cualquier momento. Simplemente con utilizar el teléfono móvil y abrir alguna de las muchas aplicaciones de mensajería o redes sociales podremos estar en contacto.
Pero si nos centramos en el hogar, es cada vez más importante que la señal llegue a cualquier zona. Quizás hasta hace no demasiado tiempo simplemente utilizábamos la conexión en una habitación donde teníamos el ordenador. Tal vez el móvil o alguna Tablet por Wi-Fi. Pero esto ha cambiado y cada vez tenemos una mayor necesidad de contar con una conexión.
Lo que se conoce como el Internet de las Cosas ha entrado con fuerzas en nuestras vidas y viene para quedarse. Son muchos los dispositivos que tenemos conectados a Internet en una vivienda. Hablamos por ejemplo de televisiones, bombillas inteligentes, reproductores de vídeo…
Por tanto en la actualidad necesitamos que esa cobertura inalámbrica (aunque también podemos conectar muchos aparatos por cable) llegue a todas las habitaciones de la vivienda. De lo contrario podríamos toparnos con que una televisión no tiene conexión o que ese aparato para reproducir vídeos en Streaming no tiene la suficiente señal para funcionar.
Vamos a mostrar algunas opciones para tener Internet en toda la casa. Vamos a ver qué opciones tenemos tanto para navegar sin cables, algo que es lo más común hoy en día, como también de manera alámbrica.
Tener Internet por Wi-Fi en toda la casa
Como decimos, navegar por Internet de forma inalámbrica es hoy en día mucho más común. Tenemos múltiples dispositivos que solo pueden conectarse de esta forma. Por ello conviene que la cobertura del Wi-Fi llegue lo mejor posible a todos los rincones del hogar. Hay diferentes dispositivos que pueden ayudarnos.
Optimizar el router
Lo primero, antes de pasar a ver dispositivos que nos ayuden a mejorar la conexión Wi-Fi, hay que prestar atención al router. Es la pieza fundamental para todo esto. Una mala configuración, tenerlo mal optimizado o en un sitio que no debería, puede hacer que la calidad de la señal sea muy mala.
Es imprescindible elegir bien el lugar donde vamos a colocar el router. Si queremos que nos llegue la señal a todas partes de nada sirve ponerlo en un extremo de la vivienda, alejado del resto. Lo importante aquí es que esté en una ubicación céntrica, desde donde pueda repartir bien la conexión. No obstante, si vas a conectarte únicamente desde un espacio en concreto, debería de estar allí.
También es esencial que evitemos que se encuentre cerca de otros dispositivos eléctricos o de paredes y muros que puedan afectar. Igualmente hay que evitar las zonas bajas de un mueble, por ejemplo. Es mejor que esté en una ubicación elevada, ya que así emite mejor la señal y siempre lejos de fuentes de calor, humedad o polvo.
Muchas veces estos dispositivos se colocan en el sitio más cómodo a la hora de pasar los cables, o cerca del teléfono o algún otro dispositivo el cual consideramos el principal de la casa. Pero esta no siempre es la mejor opción para ubicarlo de forma que cubra la totalidad de la casa. Esta sería la medida principal, buscar una buena ubicación para el router. Si este lo ubicamos en la zona más concurrida de la casa, puede ser un salón, debemos procurar que no haga que el router se encuentre en un extremo de la casa, haciendo que la señal tenga que atravesar muchas paredes y otros obstáculos para llegar al extremo opuesto.
También debemos tener en cuenta la altura, pues si lo colocamos cerca del suelo puede influir de forma negativa en la propagación de la red, pues en este rango, habrá más obstáculos. Por lo cual es mejor una ubicación elevada o relativamente elevada, siempre por encima del nivel de una mesa como mínimo. Otra cosa que es muy recomendable, es no ocultarlo tras algún mueble o directamente instalarlo dentro, pues ahí tendremos el primer obstáculo a sortear.
Respecto a la configuración, debemos siempre tener en cuenta la importancia de evitar intrusos al crear contraseñas que sean fuertes y complejas, así como usar un cifrado que no esté obsoleto. Debes evitar cifrados antiguos, como son WEP o WPA, y utilizar los más recientes como WPA2 o WPA3. Además, podemos tener en cuenta la banda que utilicemos y el canal. La de los 2,4 GHz es mejor para conectarse más lejos del router, aunque la velocidad será menor; la de los 5 GHz es ideal para lograr la máxima velocidad, pero tiene una distancia inferior.
Sistemas Wi-Fi Mesh
Una de las mejores opciones que tenemos para cubrir nuestro hogar con Wi-Fi en todas partes son los sistemas Wi-Fi Mesh. Podemos decir que está compuesto por un dispositivo que actúa como base y una serie de satélites, que pueden ser varios. Todos estos dispositivos se conectan entre sí y no directamente con la base.
De esta forma logramos que haya una única red, con un nombre y contraseña únicos, a la que podemos conectarnos en cualquier punto de la vivienda. Se diferencian de los repetidores normales en que estos se conectan directamente con el router, mientras que en un sistema Wi-Fi Mesh todos sus satélites se conectan entre ellos.
Un sistema Wi-Fi Mesh calcula en todo momento a qué nodo o satélite es mejor que nos conectemos. De esta forma siempre tendremos la mejor conexión posible.
Este sistema cuenta con algunas ventajas, las cuales hacen de él una de las mejores herramientas que podemos instalar en nuestras casas. Lo primero que llama la atención es la instalación, la cual es sencilla, pues solo es necesario buscarles un lugar con un enchufe y conectarlo desde su respectiva ubicación. Esto no suele ser algo muy técnico, pues los fabricantes lo destinan a todo tipo de usuarios. En cuanto a las aplicaciones, suelen ser muy sencillas de utilizar e intuitivas.
Las interferencias es otro punto donde destacan, pues evitan muchas de estas. Esto lo consiguen no usando la comunicación entre el router y los diferentes nodos. Los fabricantes recomiendan utilizar un único nodo de conexión con el router como punto principal de la red. Esto hace que el router sea un simple punto de acceso entre el ONT y un nodo de toda la red Mesh.
Para mucha gente, el diseño puede ser un punto muy importante, sobre todo si los dispositivos están muy a la vista. Normalmente los fabricantes nos aportan diseños muy cuidados, los cuales no molestan en la decoración y se funden con la estética de los hogares, oficinas u otros lugares.
Por otro lado también tiene sus desventajas, como, por ejemplo, la confusión entre dispositivos. Esto puede ocurrir cuando alguno de los nodos no está correctamente ubicado, por lo cual puede generar dudas en los dispositivos conectados sobre cuál es el adecuado. A nivel económico también requiere de mayor inversión, pues los precios son un poco más elevados que los sistemas convencionales como repetidores WiFi o PLC.
A nivel de obstáculos también se pueden ver afectados. Esto ocurre sobre todo cuando las paredes de un lugar son muy gruesas o de materiales que dificultan el paso de la señal, como puede ser el hormigón, el metal o la piedra. Por lo cual, buscar el lugar adecuado es muy importante.
Amplificadores Wi-Fi
También podemos utilizar amplificadores Wi-Fi. Son los típicos repetidores que se conectan al router y que permiten potenciar la conexión inalámbrica. De esta forma, si conectamos un dispositivo directamente al amplificador en vez de al router podremos obtener una mejor cobertura, con más velocidad y estabilidad.
Eso sí, hay que tener en cuenta que estos aparatos no pueden hacer milagro. Si lo conectamos desde una distancia muy larga podríamos seguir con problemas o incluso la imposibilidad de conectarnos.
Es un tipo de dispositivo económico y hay muchas opciones disponibles. Simplemente debemos elegir el que más se adapte a nuestras necesidades, observando aspectos como la configuración, la velocidad máxima que permite, si es doble banda…
PLC con conexión inalámbrica
Los dispositivos PLC son muy interesantes para llevar la conectividad inalámbrica a otras zonas del hogar. En este caso se trata de equipos que se conectan a la red eléctrica y usan el cableado para mantener la velocidad y que podamos conectarnos desde el otro extremo.
Uno de los dispositivos se conecta al router y a la electricidad, a cualquier enchufe, mientras que el otro dispositivo lo colocamos en otra zona del hogar, desde donde podremos conectarnos de manera inalámbrica.
Es muy útil ya que mantiene mejor la velocidad que un repetidor. Eso sí, hay que tener en cuenta que debemos evitar conectarlo a una regleta, por ejemplo, ya que perdería potencia. También le afecta la distancia.
Usar un router viejo como repetidor
Es muy común que tengamos por casa un router viejo. Quizás de otra operadora que tuviéramos contratada anteriormente. Tal vez incluso otro más antiguo que hemos cambiado para lograr una mejor velocidad. Esto puede ser de ayuda para lograr mejorar la conexión y solucionar ciertos problemas.
A este tipo de aparatos le podemos dar una segunda vida. Podemos, entre otras cosas, utilizarlo como repetidor Wi-Fi. De esta forma se conecta al router principal y ofrece conexión a otra zona del hogar para que podamos conectarnos. Básicamente va a actuar como otro punto de acceso, por lo que podrá ayudarte a eliminar las temidas zonas muertas y reducir el riesgo de que aparezcan cortes al navegar por la red.
Utilizar un móvil que no necesitemos
Otra posibilidad más para poder tener Internet en cualquier zona del hogar de forma inalámbrica es a través de un teléfono móvil. Podemos configurar una tarjeta SIM que tenga acceso a la red y darle a compartir Internet a través de la red móvil. De esta forma crearemos una red inalámbrica a la que podremos conectar otros equipos de nuestro hogar.
Por ejemplo pongamos que necesitamos conectar una televisión a Internet pero vemos que el Wi-Fi del router no llega bien. Podemos usar un móvil que tenga red y darle a compartir conexión. Pero claro, en caso de que tenga que estar siempre disponible, lo ideal sería utilizar uno que no necesitemos. Por ejemplo usar un móvil viejo.
A esto se llama también Tethering. Es el proceso de compartir Internet desde un móvil. Muy útil no solo para estos casos que mencionamos en los que necesitamos llevar la señal a otras zonas de la vivienda, sino también para poder conectarnos en sitios donde no tenemos conexión, como puede ser durante un viaje en autobús en el que necesitemos conectar el ordenador a Internet.
Tener Internet por cable en todo el hogar
Aunque las conexiones inalámbricas son las más utilizadas hoy en día, lo cierto es que hay aparatos que solo pueden conectarse por cable o que incluso queramos conectarnos de manera alámbrica por algún motivo. También vamos a poder llevar el Internet por cable a toda la vivienda. Tenemos varias opciones en este sentido.
En este apartado entra en juego un aspecto muy importante, como es la calidad de los materiales que instalamos, los cuales deben ser de la mejor calidad posible para garantizar que todo funcione correctamente y de la forma más eficiente posible. También existen ciertos requerimientos, que si bien no están pensados para llevarlos a cabo en domicilios, siempre es bueno tenerlos en cuenta a la hora de instalar este tipo de materiales. Hasta el más mínimo detalle tiene que funcionar correctamente, para que nada se vea afectado durante las transmisiones de datos.
Tanto para el ámbito privado como en el profesional, hay sistemas y materiales que afectan directamente a las comunicaciones, y los cuales suelen ser totalmente adaptables a los hogares. En este caso, al tratarse de una instalación más pequeña no se requieren los mismos materiales, pero sí es importante que sean de la mejor calidad posible. Esto nos dará algunas ventajas con respecto a material de mala calidad.
- Mayor garantía en la transmisión de datos: Estos materiales son fabricados bajo estrictos protocolos y estándares de calidad, lo cual afecta directamente al servicio que dan. Esto puede derivar en mayores velocidades de transmisión, por ejemplo.
- Ahorro a largo plazo: Cuando realizamos una instalación de materiales de baja calidad, los cuales en muchos casos se utilizan por ser más baratos, suele ocurrir que perduren menos en el tiempo y pierdan sus características. Por lo cual nos veremos obligados a realizar de nuevo la instalación, lo cual incluye que se realice otro gasto.
- Menos problemas técnicos: Los materiales de alta calidad están muy optimizados, y no suelen presentar problemas, por lo cual se reduce la posibilidad de fallos que empeoran el funcionamiento de toda la red.
Cabe destacar, que cuando hablamos de materiales de alta calidad, afecta también a las herramientas usadas para su instalación, como puede ser el caso de los cables de red que podemos hacer en casa.
Instalación de cables LAN
Una forma que tenemos de conectarnos por cable en cualquier rincón del hogar es tener una instalación en toda la vivienda de cables LAN. Para ello, probablemente, sea necesario llevar a cabo pequeñas obras, como por ejemplo pasar cables de una habitación a otra por la pared o utilizar el cableado ya existente. Esto es al fin y al cabo, lo más fiable que podemos hacer, de hecho, con este tipo de instalación podremos llevar cualquier tipo de aparado a cualquier rincón, pues las posibilidades son muy abundantes, como por ejemplo la opción de crear un punto de acceso Wi-Fi en otro lugar de la casa usando un router antiguo u algún otro dispositivo destinado a tal efecto.
Básicamente consiste en tirar cable LAN desde el router hasta otras zonas del hogar. Esto es algo que hoy en día no se suele llevar a cabo mucho a nivel de usuario, pero hace unos años era más habitual cuando no existían los routers Wi-Fi.
PLC
Los PLC hemos visto que permiten conectar dispositivos de manera inalámbrica, pero también hay modelos que permiten conectar por cable Ethernet. Funciona exactamente igual que los anteriores que comentamos, pero en esta ocasión del dispositivo sale un cable para conectar cualquier otro equipo.
Esto puede ser interesante para conectar televisiones, videoconsolas y otros aparatos que tengan la opción de cable y tener así más estabilidad. Debemos adquirir uno que cuente con una buena capacidad, que ofrezca garantías en cuanto a la calidad de la conexión, velocidad y también seguridad.
Ver bien las especificaciones de este tipo de aparatos puede ayudarnos a lograr resultados óptimos. No todos van a cumplir con lo que esperamos, ya que no todos van a ofrecer una velocidad adecuada. Por ello, siempre debes mirar las características de ese modelo en concreto y ver si realmente va a ayudarte a lo que necesitas.
Switch de red
Otra opción que tenemos para conectarnos por cable en cualquier lugar de la vivienda es utilizar un switch de red. Básicamente consiste en llevar a cabo lo que mencionábamos de tener una instalación de cables en el hogar. Uno de esos cables se conecta a un switch de red y a través de este dispositivo podemos conectar muchos más.
Los switches de red pueden tener desde cuatro puertos Ethernet hasta muchos más. Por tanto es muy útil para conectar muchos dispositivos por cable de red en una misma habitación, por ejemplo. Eso sí, debemos asegurarnos de optar por uno que cuente con puertos Gigabit Ethernet, ya que de esta forma lograremos la máxima velocidad sin que exista cuello de botella.
Usar otro router conectado por cable
También podemos utilizar un router en vez de un switch de red. El modo de uso es el mismo: conectar ambos routers por cable LAN y del secundario sacar diferentes cables de Ethernet para conectar otros equipos. Es también una manera de reutilizar un router viejo que no estemos utilizando y que tengamos en casa.
Eso sí, si quieres lograr una buena velocidad de Internet es importante que ese segundo router que vas a utilizar sea compatible con Gigabit Ethernet. De lo contrario estarías limitado a Fast Ethernet, por lo que la velocidad no podría pasar de 100 Mbps. Si vas a utilizar un router antiguo de ADSL, en ese caso puedes tener problemas y la velocidad va a estar limitada. Es un dato que debes comprobar antes de aventurarte a conectar entre sí los routers para llevar la señal a otras zonas y tener Internet en otras habitaciones.
Usar fibra óptica plástica
Quizás se trate de una de las mejores opciones que podemos llevar a cabo, salvando los costes que puede tener este tipo de cableado. Esta se suele utilizar en industrias como puede ser la automovilística o aeronáutica, pues se trata de un material flexible y con gran resistencia que podemos tirar por los tubos corrugados de las paredes de una forma relativamente sencilla con las herramientas adecuadas.
Esta nos puede garantizar hasta 1GB de conexión, lo cual lo hace una conexión muy rápida y con buena tolerancia a la distancia. Por otro lado, es inmune a las interferencias, por lo cual puede compartir espacio con la red eléctrica.
En definitiva, estas son las opciones que tenemos para conectarnos por cable desde cualquier punto del hogar. Así lograremos una mayor estabilidad y también poder conectar equipos que solo tengan la opción de cable y no Wi-Fi. Hemos dado una serie de opciones muy interesantes que podemos poner en práctica. Algunas incluso pueden aprovechar el uso de un viejo router que tengas en casa y que no necesites.
Alternativas a la red de casa para tener Internet
Vivimos en una sociedad conectada constantemente. Muchas de las herramientas de nuestro día a día funcionan a través de Internet y es necesario por tanto estar conectados. Por suerte, podemos utilizar diferentes alternativas para conectarnos a Internet con mayor fiabilidad si nuestra conexión de Internet de casa falla en un determinado momento, por lo que también es muy interesante tenerlo en cuenta.
Compartir conexión con el móvil
Una de las alternativas a las redes Wi-Fi públicas más recurridas es la de compartir la conexión desde el móvil. Pongamos que necesitamos navegar desde el portátil o una tablet. No tenemos una red segura cerca pero sí tenemos conexión en nuestro teléfono. En este caso simplemente tenemos que compartir la conexión o hacer Tethering. Es un proceso sencillo y seguro, siempre y cuando pongamos una contraseña fuerte lógicamente.
Por tanto al compartir la conexión con el móvil vamos a poder conectarnos desde otros dispositivos. Podemos incluso compartir la red con amigos o familiares y que todos nos conectemos de la misma manera. Una alternativa interesante a tener que acceder a redes inseguras, aunque debemos tener en cuenta que estamos utilizando datos móviles y también estamos tirando de mucha batería del terminal.
Router 5G/4G
Otra alternativa muy interesante es tener nuestro propio router 5G o 4G. Básicamente lo que hacemos es conectar una tarjeta SIM que tenga acceso a la red y a través de este equipo podemos conectar múltiples dispositivos y acceder a Internet. Tenemos un amplio abanico de posibilidades en este sentido y sin duda es una opción muy segura.
Hay que destacar que algunos routers 5G o 4G cuentan con una batería incorporada. Esto significa que ofrecen una autonomía de varias horas sin necesidad de estar pendientes de enchufes de corriente. Una opción muy interesante para realizar un viaje en tren o autobús y no perder nunca la conectividad.