Durante gran parte de este año que ha transcurrido, las redes de fibra óptica han acaparado las portadas de muchas páginas web. Su gran capacidad y sus escasas pérdidas conforme se aumenta la distancia hace que sea el medio ideal para ofrecer internet y contenidos multimedia a los usuarios. Sin embargo, el alto coste que supone realizar la instalación de este tipo de redes hace que aparezcan muchas incógnitas.
Aclarar que el despliegue de fibra óptica desde la central hasta las aceras o los edificios es relativamente costeable por los operadores. Los precios se disparan a la hora de llegar a las verticales de los edificios, que es donde estos realizan una mayor inversión. Debido a esto, a pesar de que el despliegue no de haya detenido y a día de hoy tanto Vodafone como Jazztel, Orange y Movistar continúan con el despliegue de sus redes, la cobertura es relativamente limitada aún y para ser rentable necesitarían que más usuarios que tuvieran cobertura optasen por la contratación de estos servicios.
¿Se puede utilizar la fibra óptica de otras formas?
Actualmente sabemos que Movistar ha optado por la instalación de FTTH, al igual que el resto de operadores. Sin embargo, se cree que sería necesario utilizar estas redes de una forma más intensiva y poder rentabilizarlas. Aquí entra en juego el modelo de ONO ya que, como bien sabéis, el último trama es de cable coaxial, llegando sólo hasta el repartidor de la pared del inmueble fibra óptica. Con este modelo, el precio de la instalación se consigue amortizar y no tener que invertir una gran cantidad de dinero.
Sin embargo, ¿cómo se podría aplicar en la infraestructura actual?
Seguro que estamos de acuerdo en pensar que un despliegue de fibra óptico hasta nodos próximos al usuario y después un último tramo basado en red de cobre (100-300 metros) podría permitir al usuario disfrutar de velocidades próximas a 50 metas y así amortiguar el despliegue de los operadores. No se trata de una solución para alcanzar los 100-200 megas que ofrecen las redes FTTH pero muchos usuarios a día de hoy consideran que con 30-50 megas es más que suficiente para poder disfrutar de servicios multimedia a la vez que se navega por internet.
La entrada en juego del FFTN o FFTB
Volvemos la vista atrás en el tiempo para ver que cuando las primeras conexiones aparecieron en nuestro país de la mano de Telefónica (hoy Movistar) esta instaló en los garajes y portales de algunas viviendas armarios que estaban conectados a la central utilizando fibra óptica y que después de estos salía cable de cobre hasta el hogar del usuarios. Una prueba piloto en la que se llego a alcanzar más de 50 metas. Esto sería lo que se llama FTTB o fibra óptica hasta el edificio. Siempre puedes aprender a gestionar redes.
El otro caso que queremos tratar es el de las conexiones FTTN, que ya hemos mencionado con anterioridad, y que consistiría en el despliegue de fibra óptica hasta un nodo remoto y a partir de ahí los últimos 300 metros utilizar el par de cobre.
Una vez tenemos el despliegue, cada operadores sería libre de utilizar la tecnología DSL que más le convenga en función de la velocidad, aunque en la mayoría de los casos presumiblemente sería VDSL por su alta capacidad.
¿Es mejor acelerar el despliegue utilizando tecnologías híbridas y así llegar a más usuarios a la vez que se ahorra dinero o es mejor seguir optando por FTTH?