¿Por qué mi Internet va lento? Guía completa para mejorar tu velocidad de Internet (edición 2019)
Hoy en día es raro encontrarnos con conexiones de menor de 100 Mbps, 300 Mbps o 600 Mbps, conexiones que cada vez se acercan más a 1 Gbps, el máximo que hoy en día podemos conseguir en los ordenadores a través de las redes Gigabit Ethernet utilizadas en la mayoría de los ordenadores y routers. A partir de los 100 megas de Internet, la conexión debería ser lo suficientemente fluida para navegar, jugar y hasta para ver Netflix en 4K sin problemas, dejando incluso ancho de banda a otros usuarios de la red. Sin embargo, puede que mientras navegamos notemos que nuestro internet va lento, ¿por qué?
Las causas por las que nuestra conexión a Internet va lenta pueden ser de todo tipo, desde problemas de software con alguno de los ordenadores hasta fallos en la conexión con el router, del propio router e incluso, aunque menos común, de la compañía que nos ofrece el servicio.
Antes de seguir con la identificación y solución de los problemas, os recomendamos hacer un test de velocidad desde un PC conectado por cable al router para poder saber a qué velocidad estamos conectados y saber medir posibles mejoras de la conexión.
Cómo aislar e identificar el problema de Internet lento
Problemas con las descargas que saturan el ancho de banda
Si nuestro Internet va lento, lo primero que debemos comprobar es que no tenemos ninguna aplicación que esté consumiendo nuestro ancho de banda. Las conexiones FTTH actuales permiten ver sin problemas contenido a varios usuarios sin agotar el ancho de banda, por lo que, salvo que tengamos menos de 100 Mbps contratados, no tendremos problema porque dos o tres personas estén viendo Netflix o YouTube al mismo tiempo (Netflix en 4K consume apenas 25 Mbps), sin embargo, si tenemos poca velocidad y estamos descargando archivos de las redes P2P o subiendo archivos a la nube, fácilmente la conexión se puede saturar.
Por ello, lo primero que debemos hacer es comprobar que ninguno de los ordenadores o dispositivos conectados a nuestro router está descargando archivos P2P ni subiendo archivos a plataformas de almacenamiento como Google Drive o Mega. También debemos revisar que tampoco están realizando descargas directas que puedan acabar fácilmente con el ancho de banda que tenemos disponible.
Cómo solucionarlo
La forma más sencilla de probar esto es desconectando todos los ordenadores y dispositivos de Internet, tanto por cable como del Wi-Fi y, con nuestro ordenador en Modo Seguro, comprobar si la velocidad de Internet nos llega bien. Si llega bien, entonces es cuestión de ir conectando ordenadores y dispositivos hasta dar con el culpable que satura la red.
El Modo Seguro de Windows nos ayudará también a aislar otros posibles problemas, como una mala configuración de nuestro antivirus, firewall o cualquier otro software que pueda estar limitando la velocidad.
Problemas de conexión, tanto Ethernet como Wi-Fi
Puede que ningún ordenador esté utilizando Internet y que ninguna aplicación nos esté limitando la conexión. En ese caso, puede que el problema se encuentre en la conexión que tenemos, ya sea por cable o por Wi-Fi.
Cómo solucionarlo
Según el medio a través del cual estemos conectados al router la forma de solucionarlo será una u otra.
Si estamos conectados por cable Ethernet, entonces lo que debemos hacer es comprobar el cable que utilizamos, asegurándonos de estar utilizando un cable de categoría 5e o superior que nos garantice velocidades de hasta 1 Gbps a un máximo de 100 metros de distancia. Podemos probar a cambiar el cable por otro para comprobar si este problema se soluciona.
Si estamos conectados a través de un PLC, debemos tener en cuenta que estos dispositivos pierden una gran cantidad de velocidad a medida que aumenta la distancia entre los dispositivos. Si nuestro PLC tiene un menú de configuración podemos consultar la velocidad de enlace; de no ser así, para aislar el problema, podemos conectar el PC directamente al router y comprobar si el problema se ha solucionado.
Por último, si estamos conectados por Wi-Fi, debemos tener en cuenta que estas conexiones pierden mucha velocidad a medida que aumenta la distancia, por lo que si estamos muy lejos del router, y con muchas paredes de por medio, es muy probable que esta sea la razón por la que nuestro Internet va lento.
Si estamos conectados a la red de 5 GHz, debemos intentar colocarnos más cerca del router para conseguir más velocidad, o utilizar un repetidor o un sistema Wi-Fi Mesh para mejorar la cobertura. Si estamos conectados a la red de 2.4 Ghz, entonces debemos tener en cuenta las limitaciones de esta conexión y saber que difícilmente conseguiremos más velocidad.
También podemos probar a cambiar el canal del router, sobre todo en la red de 2.4 GHz, para ver si conseguimos alguna mejora al utilizar un canal diferente y menos saturado.
Si tenemos muchos dispositivos conectados al Wi-Fi (por ejemplo, muchos dispositivos del Internet de las Cosas), seguramente tengamos también problemas con nuestra conexión, ya sea porque todos a la vez roban ancho de banda o porque nuestro router no pueda gestionar tantas conexiones a la vez. En ambos casos, una mejor conexión con un mejor router solucionarían este problema. O eso, o desconectar los dispositivos IoT que no usemos con Internet.
Problemas con el router: viejo o de gama baja
Si tenemos un router muy viejo, es posible que se haya quedado obsoleto para las conexiones de fibra actuales y, por lo tanto, que no nos permita conseguir la velocidad máxima que tenemos contratada. Lo mismo puede ocurrir si en su día hemos comprado un router propio barato, que con los cambios de las conexiones de Internet de los últimos años su hardware no sea capaz de mover toda esta velocidad.
Cómo solucionarlo
La verdad es que, como con cualquier otro tipo de dispositivo electrónico, si el problema es que nuestro router se ha roto o se ha quedado ya obsoleto con el paso del tiempo, no nos va a quedar otra que ir pensando en comprar otro. Podemos aprovechar la ocasión para comprar un router de gama alta que nos mejore nuestra conexión a Internet, o simplemente llamar a la compañía de Internet y pedirles que nos den otro router porque el nuestro se ha estropeado.
Los routers neutros de gama alta que podemos comprar desde luego nos darán mejor servicio, mayor seguridad, mayor velocidad y mejor Wi-Fi, aunque tendremos que hacer un desembolso algo grande y, además, comprar una ONT para convertir nuestra fibra a Ethernet.
Si no queremos gastar dinero, entonces la opción de pedir un router nuevo a la compañía es la mejor.
Un DNS lento hará que todas las webs tarden en cargar
Normalmente los principales proveedores de Internet cuentan con unos servidores DNS, configurados por defecto, que se asigna automáticamente al todos los equipos que se conectan a Internet por DHCP para permitirles navegar.
Los DNS de los operadores no se caracterizan precisamente por ser rápidos, ni estables, ni fiables, y a menudo son una de las razones por las que Internet va lento, o algunas webs ni siquiera cargan.
Cómo solucionarlo
La única forma de solucionar este problema es cambiando manualmente los DNS de nuestro ordenador, o directamente del propio router. En el siguiente enlace os dejamos los mejores DNS de 2019, los DNS más rápidos que podemos configurar para mejorar nuestra conexión a Internet. Mejorar la velocidad de Internet desde la línea de comandos es posible.
¿Por qué el ordenador consigue más velocidad que un móvil o una consola?
También puede ser que Internet funcione bien en un ordenador y, sin embargo, Internet vaya lento cuando nos conectamos desde un móvil, una tablet, una videoconsola o cualquier otro dispositivo, como, por ejemplo, una SmartTV.
En la mayoría de los casos, la velocidad suele estar limitada por el propio hardware. El procesador y la memoria que puede tener una SmartTV están muy limitados, por lo que es imposible poder conseguir, por ejemplo, 600 Mbps desde una televisión, aunque la tengamos conectada por cable. Lo mismo ocurre con los smartphones de gama baja o antiguos; su hardware no es capaz de procesar una velocidad muy elevada y, por ello, Internet va lento en ellos.
Si tenemos un móvil antiguo que no es compatible con la red de 2.4 GHz, entonces no vamos a poder hacer mucho para mejorar la velocidad más que cambiar el canal del Wi-Fi por otro menos saturado, con menos interferencias y que nos permita conectarnos un poco mejor. Si nuestro smartphone es compatible con la red de 5 GHz, entonces debemos conectarnos siempre a ella, ya que nos permitirá navegar mucho mejor y sin interferencias de otros vecinos. Eso sí, debemos tener en cuenta que, salvo los terminales tope de gama, será complicado conseguir velocidades de más de 200 o 300 Mbps por Wi-Fi desde nuestros smartphones.
En el caso de las consolas (PS4, Xbox One, etc) la cosa es diferente. Aunque estas consolas de última generación sí son capaces de procesar velocidades de Internet muy altas, no suelen ser necesarias estas velocidades, por lo que las compañías, como Sony o Microsoft, suelen limitar la velocidad de sus servidores para garantizar que, aunque más despacio, funcionan sin problemas para todos los usuarios.
Por último, es muy importante verificar el hardware y software para que nuestro PC soporte más de 100Mbps de Internet.