Para contratar Internet, podemos encontrar muchas tarifas diferentes. Las hay más veloces, con opciones como incluir llamadas gratis o móvil, así como otras características. Pero un factor clave, al menos para la mayoría, es el precio. Aquí viene la cuestión de la que nos hacemos eco: ¿aceptarías tener Internet lento pero no pagar nada por ello? Una conexión básica, para lo mínimo, sin necesitar pagar cuota alguna para poder conectarte a la red.
Si entras en la web de cualquier operadora de Internet, lo normal es que veas diferentes tarifas. Cuanto más veloz sea, mayor será la cuota. Hay usuarios que querrán pagar más para tener mayor velocidad y otros les bastará con la tarifa mínima. Pero, ¿y si hubiera una tarifa aún más lenta y gratuita?
Internet lento sin pagar
Esta cuestión hipotética la plantean desde Make Use Of. Se plantean si los usuarios, al menos una parte importante, aceptaría tener Internet gratis en casa a cambio de una velocidad muy reducida. Básicamente, tener Internet para leer el correo, abrir páginas web y cualquier acción que no requiera de una buena conexión.
Si miramos atrás, hace 15 o 20 años, el Internet que llegaba a nuestras casas era muy, muy limitado. Pero claro, en esa época no había Netflix, ni plataformas como YouTube, ni había que subir a la nube archivos muy pesados. Eso, ahora, ha cambiado mucho. Tener una buena velocidad de subida es tan importante como de descarga, por eso la mayoría de tarifas ya son simétricas.
Lo que plantean es aceptar tener una velocidad de ese tipo, como la que teníamos hace bastantes años, a cambio de no pagar nada. Una conexión muy básica, para lo mínimo que puedas hacer en Internet. Lógicamente, tendrías que olvidarte de ver series en Netflix en alta calidad, realizar videollamadas sin cortes o incluso jugar online.
Ten en cuenta que un Internet muy lento hoy en día, hubiera sido considerado súper veloz hace 20 años. Pero claro, como decimos, la situación ha cambiado y ahora hacemos un uso diferente de la red. Nada tienen que ver las páginas web de hace dos décadas con las de ahora. Ni tampoco las aplicaciones para comunicarnos, ya que ahora todas ellas necesitan mucho mayor ancho de banda para las videollamadas, entre otros muchos usos que le damos a Internet.
Dependemos mucho de Internet
Lo cierto es que dependemos más de lo que podamos imaginar de tener una buena conexión de Internet. Pero si hablamos de lo básico, lo más elemental de nuestro día a día, realmente no necesitamos una conexión súper veloz. Hablamos, por ejemplo, de utilizar WhatsApp, realizar un pago, abrir un correo o visitar una web. Aunque con las plataformas de streaming de vídeo como Netflix, Amazon Prime Video, Disney+ y muchas otras se necesita una buena conexión a Internet, lo cierto es que el bitrate que usan es bastante bajo, y se puede perfectamente reproducir una película en Full HD con una conexión de unos 15Mbps aproximadamente, por lo que esto no sería ningún problema.
Tal vez para alguien que simplemente use Internet para esto que mencionamos, sea suficiente con tener una conexión mínima y aceptarían esto a cambio de que fuera gratuita. De hecho, algo así podemos decir que ya existe con algunas tarifas móviles. Ofrecen ciertos datos y, una vez se agotan, lo limitan a una velocidad muy reducida. Incluso el Internet durante los vuelos suele ser así. También hay que valorar qué es una conexión a Internet mínima, ¿10Mbps de velocidad? Porque dependiendo de eso, podríamos vernos bastante limitados hoy en día.
Y tú, ¿aceptarías tener una tarifa de Internet mínima, simplemente para navegar por la red y usar WhatsApp, a cambio de que fura gratis? ¿Lo aceptarías solo para el Internet de casa o del móvil? Te leemos en los comentarios.