Esto es lo primero que hago en el PC cuando noto que mi conexión a Internet va mal
La de veces que te habrán dicho «si es que nunca te fijas en nada» … y seguramente, tengan razón. Pero si hay algo de lo que, seguro que no te cuesta darte cuenta, es de cuando la conexión a Internet va mal. Puede que no lo digas en voz alta si no tienes un problema, pero en tu subconsciente, sabes las diferencias de velocidad de conexión entre la TV, la consola, el PC y el móvil, en cada parte de la casa, en la universidad o en el trabajo. Simplemente, eso es algo que se sabe. Pero, ¿qué hacer cuando notas que la conexión no te va tan bien? Eso no es tan habitual que se sepa. Por eso, en este artículo, te cuento lo primero que hago en el PC cuando noto que mi conexión a Internet me va mal.
Tener una buena conexión a internet en casa a través de Wi-Fi no siempre es fácil, y, de hecho, intervienen un montón de factores: desde el tipo de router, hasta la forma y el tamaño de la casa. Por eso, hoy vas a descubrir cómo identificar si tienes buena o mala conexión en tu casa, y en el caso de que no sea buena, aprenderás varios trucos para intentar mejorarla.
Comprobar la conexión con el comando ‘Ping’
Cuando mi conexión empieza a fallar, lo primero que hago no es reiniciar el router ni desconectar los cables. Antes de nada, prefiero utilizar una herramienta simple pero muy efectiva: el comando ‘Ping’. Este comando sirve para verificar si realmente hay un problema con la red o si simplemente es una cuestión temporal.
Para usarlo, solo tienes que abrir el Símbolo del sistema (CMD) en tu ordenador con Windows. Luego, escribe «ping» seguido de una dirección IP, como ‘8.8.8.8’ (los DNS de Google) y presiona Enter. El comando enviará una serie de paquetes de datos y te mostrará si hay pérdidas o retrasos, lo que puede darte una pista sobre el estado de tu conexión.
¿Qué nos dice el resultado del ‘Ping’?
El resultado de este comando es sencillo de interpretar. Si todos los paquetes se envían y reciben correctamente, tu conexión debería estar funcionando bien. Pero si hay pérdidas o el tiempo de respuesta es muy alto, puede ser señal de un problema en tu red o en la conexión con el servidor al que intentas acceder.
En este punto, si veo que hay pérdidas de paquetes, puedo empezar a descartar posibles causas. Por ejemplo, puede ser que el router esté sobrecargado o que haya interferencias con otros dispositivos conectados. Si no encuentro problemas en mi red local, paso al siguiente paso: comprobar si hay incidencias con el proveedor de Internet.
Reiniciar el router y comprobar otros dispositivos
Si el ‘Ping’ no me da la respuesta que buscaba o sigue habiendo problemas, el siguiente paso es el clásico, pero efectivo: reiniciar el router. A veces, el simple hecho de apagarlo y encenderlo puede resolver muchos problemas de conexión. Al hacerlo, el router restablece las conexiones y puede liberar posibles congestiones de red.
Mientras el router se reinicia, suelo verificar si el problema persiste en otros dispositivos conectados a la misma red. Si en mi móvil o tablet la conexión también va mal, probablemente sea un fallo del proveedor. En ese caso, no queda más remedio que esperar a que se solucione o contactar con el servicio técnico.
Comprobar las interferencias y la señal WiFi
Otro problema muy habitual es la interferencia en la señal WiFi. Muchas veces, la lentitud o los cortes en la conexión se deben a que el router está colocado en un lugar donde la señal no llega bien o se ve interferida por otros aparatos. Una opción es cambiar el canal de la red WiFi desde la configuración del router o probar conectarse a la banda de 5 GHz, que suele ser más rápida y menos saturada que la de 2.4 GHz, siempre que estés cerca del router. Si veo que la señal WiFi es el problema, otra solución es mover el router a un lugar más céntrico de la casa o utilizar un repetidor WiFi para ampliar la cobertura.
Cuando la conexión a Internet empieza a fallar, lo mejor es no perder la calma y seguir estos sencillos pasos antes de recurrir al servicio técnico. Usar el comando ‘Ping’ puede ayudarte a identificar el problema rápidamente, y reiniciar el router o verificar la señal WiFi pueden ser soluciones simples que ahorran tiempo y molestias. Si después de todo esto sigues con problemas, ya será el momento de contactar a tu proveedor de Internet, pero al menos habrás descartado los fallos más comunes por tu cuenta.