Los piratas informáticos pueden tener muchas opciones para comprometer tu seguridad en la red. Podrían usar estrategias muy variadas, como es colar malware en el dispositivo, lanzar ataques Phishing o hacer que instales un programa para controlarte. En este artículo, vamos a hablar de cómo una simple captura de pantalla, puede llegar a suponer un problema muy importante. Vamos a darte algunas recomendaciones para no tener problemas.
Estas capturas de pantalla las podrían realizar u obtener de varias formas. Por ejemplo, podrían colarte un troyano que tenga la capacidad de realizar capturas periódicas y enviarlas a un servidor controlado por el atacante. También podrían robar capturas que tú has realizado y tienes almacenadas o incluso interceptar capturas que puedas enviar a otra persona o enviarte tú mismo a alguna cuenta.
El peligro de las capturas de pantalla
Si logran controlar las capturas de pantalla, podrían tener información muy variada de ti. Esto puede dar lugar a ataques informáticos de forma directa, pero también a ataques más secundarios, más a largo plazo, que puedan realizar con mayor facilidad. Siempre debes tomar ciertas precauciones y no caer en errores.
Robo de datos personales
Lo primero que puede pasar, es que roben tus datos personales. Podrías tener una captura de pantalla que hayas realizado en la que, sin que te des cuenta, aparezca cierta información personal. Puede ser tu nombre completo, dirección, número de teléfono… Esos datos podrían quedar expuestos y llegar a malas manos.
Con esos datos, un atacante podría lanzar un ataque Phishing más personalizado, más orientado a ti. Pueden saber tu dirección, por ejemplo, y poner cierta información en un e-mail que te manden para intentar robar tus contraseñas. Para evitar esto, es fundamental siempre mantener el sentido común, no iniciar sesión en plataformas no oficiales y revisar todo muy bien.
Información confidencial de la empresa
También podrías estar exponiendo información confidencial de tu empresa o lugar de trabajo. Al realizar capturas de pantalla, o bien que un atacante pueda hacerlas sin tu permiso, podrías estar exponiendo datos sensibles y que afecten a otras personas u organizaciones. Esto puede suponer un problema importante y debes tener cuidado.
Si trabajas con tu propio ordenador personal, es frecuente que puedas usar ciertos programas tanto para el ámbito laboral, como el doméstico. Por ello, puede ser un problema realizar capturas y, por descuido, que aparezca algo que tenga relación con tu empresa y pueda ser, además, confidencial. Revisa todo muy bien antes de compartir capturas.
Datos que afecten a terceros
Algo similar puede ocurrir cuando se trata de datos que afectan a otras personas. Puede ser algún tipo de información que ponga en riesgo la privacidad de algún amigo o familiar que, por error, aparezca en esa captura de pantalla. Por ejemplo, realizar una captura de la pantalla de tu ordenador y que, detrás, en segundo plano, aparezca parte de una conversación por WhatsApp Web.
Son descuidos pequeños que podrías tener, pero que van a comprometer la privacidad y seguridad de otras personas. Revisar todo muy bien antes de subir o realizar capturas, va a ser esencial.