Los hechos son sagrados, y no tanta gente se ha adentrado en las profundidades de Internet como para saber, con pruebas fehacientes, qué puedes encontrar por debajo de los niveles mainstream del Internet convencional. Por eso, en este artículo verás aclarados algunos mitos de la web oscura, que confirmaremos o desmontaremos a través de datos y estadísticas. Prepárate para descubrir toda la verdad.
Si hay un rincón de Internet rodeado de un cierto halo de misterio, es la web oscura. Se han hablado muchas cosas, pero estoy seguro de que no tanta gente se ha adentrado a comprobar si estas cosas que se dicen son ciertas o no. Si quieres salir de dudas, sigue leyendo este artículo en el que descubrirás a través de datos y hechos fehacientes, la verdad sobre algunos mitos de la web oscura, que han circulado por el Internet convencional durante años.
Mitos de la web oscura
Al pensar en la web oscura, es fácil asociarla exclusivamente con la delincuencia, pero en realidad, su creación tuvo un propósito muy diferente. Originalmente, nació como una herramienta para proteger la privacidad y la libertad de expresión, y aún hoy, muchos usuarios la utilizan con fines legítimos, como protegerse de la censura en países totalitarios.
Pero la verdad es que, con el tiempo, se ha convertido en un refugio para actividades delictivas, especialmente en el ámbito del tráfico de drogas y la venta de datos robados. Para ayudarte a salir de dudas, aquí tienes resueltos alguno de los principales mitos que circulan por Internet, sobre la Web Oscura.
Acceder es ilegal
Uno de los mitos más extendidos es que simplemente visitar la web oscura ya es un delito. La realidad es que, en muchos países, incluido España, acceder a esta parte de internet no es ilegal. Lo que marca la diferencia es el tipo de actividades que se realizan. Navegar por ella no es un problema, pero comprar productos ilegales o involucrarse en actividades ilícitas sí lo es.
No pueden rastrearte
Otro mito popular es que al navegar por la web oscura, somos completamente anónimos e indetectables. Aunque el uso de Tor y otras herramientas proporciona un alto nivel de anonimato, no es infalible. Las autoridades tienen métodos avanzados para rastrear y monitorear ciertas actividades, especialmente en los nodos de salida de Tor, donde el tráfico puede ser interceptado.
Estadísticas sorprendentes de la web oscura
La web oscura sigue siendo un entorno complicado y, aunque no todo lo que sucede en ella es ilegal, es un espacio que requiere precaución. Muchos de los mitos que la rodean no son más que exageraciones, pero la realidad es que también es un entorno donde proliferan actividades delictivas. Estas son algunas estadísticas que pueden sorprenderte sobre la web oscura.
- El comercio de drogas sigue en auge: la venta de drogas ilícitas es una de las actividades más comunes en la web oscura, representando alrededor del 50 % de las transacciones. Sin embargo, no todas las drogas tienen la misma demanda. Estas transacciones, que suelen realizarse con criptomonedas, permiten un alto nivel de discreción para los compradores y vendedores.
- Los mercados de exploits están en aumento: los exploits y vulnerabilidades son otra mercancía valiosa en la web oscura. En los últimos años, ha habido un aumento significativo en la venta de herramientas de hackeo y malware. Si bien algunos exploits se venden por precios bajos, las vulnerabilidades de día cero, aquellas que aún no se han hecho públicas, pueden alcanzar precios de más de 10.000 €.
- La reputación y las criptomonedas en la web oscura: en la web oscura, la reputación lo es todo. Los vendedores, al igual que en cualquier otro mercado online, dependen de las valoraciones positivas de sus clientes para generar confianza. Además, las transacciones se realizan casi exclusivamente con criptomonedas como Bitcoin o Monero, ya que son difíciles de rastrear y ofrecen un mayor nivel de privacidad tanto para compradores como para vendedores.
Si decides explorarla, es vital que tomes las medidas necesarias para proteger tu privacidad y evitar involucrarte en actividades que puedan poner en riesgo tu seguridad.