Tener una buena conexión de Internet es algo que siempre queremos lograr, pero en ocasiones podemos tener problemas. Una opción que muchos usuarios tienen en cuenta es la de cambiar de compañía con la esperanza de tener más velocidad y menos problemas. Sin embargo esto no siempre es la mejor opción. Vamos a explicar por qué al cambiar de operadora de Internet puedes tener peor Wi-Fi y navegar de forma inalámbrica con más problemas.
Cambiar de operadora puede traer peor conexión
Cuando cambiamos de operadora de Internet puede ser por varios motivos. Uno de ellos es simplemente por una oferta que hemos encontrado y vamos a pagar menos dinero por un servicio, al menos, similar. Pero también puede ser que tengamos una mala velocidad o queramos que la conexión vaya más rápida.
Pero al cambiar de compañía de Internet puede que aparezcan los problemas. Tal vez la red Wi-Fi empiece a ir peor incluso si hemos contratado una conexión igual o superior. Queremos que vaya más rápido, pero nos conectamos con el móvil o el ordenador y al hacer una prueba de velocidad vemos que va más lento.
¿Por qué puede pasar esto? Al cambiar de operadora, lo más normal es que tengamos que cambiar de router. Hay excepciones, como por ejemplo si pasamos a una Low Cost de una operadora principal y en ocasiones mantenemos el mismo aparato. Pero si este no es el caso, tal vez el router que nos coloquen sea peor.
Esto no significa que nos llegue menos velocidad, ya que incluso podríamos tener más. Por ejemplo, puede que hayas pasado de 300 a 500 Mbps de fibra óptica. Si haces una prueba de velocidad por cable, ves que efectivamente ha mejorado. Ahora bien, al conectarte por Wi-Fi puedes notar que va peor. Esto puede ocurrir si ese router es más limitado, si tiene peor cobertura o no tiene la misma velocidad teórica que el otro que usabas.
Comprueba el router antes de cambiar de operadora
Por tanto, nuestro consejo a la hora de cambiarte de operadora de Internet es que no solo mires la velocidad que ofrecen y el precio, sino también el router que van a darte. Esto va a ser clave para tener una buena velocidad Wi-Fi, no tener problemas de cobertura y, en definitiva, lograr que la conexión funcione lo mejor posible y no tener fallos.
Siempre puedes también informarte en foros y páginas web. Puedes leer comentarios de otros usuarios que podrían alertar de fallos en el Wi-Fi de ese router o cualquier error que con la anterior compañía no tenías. El objetivo es lograr que el cambio de operadora realmente sea positivo y puedas tener, al menos, la misma velocidad y calidad de la conexión.
En ocasiones puede que sigas teniendo los mismos problemas que tenías antes. Por ejemplo que la cobertura no llegue bien a una habitación. Siempre puedes mejorar la ubicación del router o instalar repetidores y sistemas Mesh para mejorar el Wi-Fi. De esta forma podrás tener mejor conexión en otros lugares.