Controlar el gasto de los aparatos que tienes en casa, es clave para ahorrar energía. Por ello, en este artículo te vamos a explicar qué puedes hacer para saber cuánto consume un horno cuando lo enciendes, cuánto gasta el frigorífico a lo largo de todo un mes o una simple lámpara que enciendas durante unas horas. Tienes varias opciones, algunas más exactas que otras, y de ello te vamos a hablar en detalle.
Hay electrodomésticos que pueden suponer un gasto importante para el total de la factura. Especialmente, si ese aparato está mal configurado o tiene algún problema. En caso de dudas, si crees que puede estar gastando demasiado, conviene conocer exactamente cuál es el consumo en tiempo real y actuar. La clave está en optar por alguna de las siguientes alternativas, puesto que existen diferentes métodos para lograr conocer el gasto de luz que tiene cada dispositivo o electrodoméstico que tenemos en casa.
Cómo ver cuánto gasta un electrodoméstico
Esto puede ser muy útil por diferentes motivos. Por un lado, saber cuánto gasta algo en concreto, aunque sea por curiosidad. Pero también es interesante para detectar errores o ir comparando los diferentes modos. Hoy en día, los electrodomésticos son más eficientes que hace unos años y muchos cuentan con un modo Eco o de bajo consumo. A veces, este pequeño ajuste puede hacer que un electrodoméstico, como podría ser una lavadora o un lavavajillas, consuma bastante menos sin que ello afecte al uso.
Consumo en tiempo real
Una opción muy interesante es la de ver el consumo en tiempo real. Esto es algo que puedes hacer a través de Internet, ya sea en el ordenador o mediante aplicación para móvil. Simplemente, necesitas ciertos datos, además de registrarte para poder acceder a esa información y tener un mayor control.
En primer lugar, necesitas saber cuál es tu distribuidora. Ojo porque no siempre coincide con la comercializadora que tienes contratada. Es decir, en tu factura puede venir el nombre de esa comercializadora, pero realmente quien te suministra energía es otra, como podría ser Endesa, Iberdrola o la que corresponda en tu zona. Necesitas una factura y en la información, en el apartado de Distribuidora, encontrarás esta información.
Una vez tienes ese dato, necesitas acceder a la web de la distribuidora. Allí tendrás que poner tus datos, registrarte y entrar para ver cosas como tu consumo, la potencia contratada y demandada y, también, el consumo en tiempo real. En ocasiones, para registrarte es necesario tener el dato del CUPS o identificador del punto de suministro, que puedes ver también en la factura. No siempre aparece en el mismo sitio, por lo que deberás localizarla.
Allí podrás ver, de forma detallada, el consumo que has tenido en un periodo de tiempo concreto, verlo por días, horas… Esto te ayudará, por ejemplo, a ver si te interesa o no tener una tarifa con discriminación horaria.
Lo siguiente es acceder al contador. Esto va a depender de la distribuidora, pero suele estar bastante visible. Si no lo ves de primera, navega un poco por el menú hasta que lo encuentres. Cuando accedas, podrás consultar cuánta energía estás consumiendo en ese momento exacto. Puedes ver el caso de Iberdrola, en la foto de abajo, pero en Endesa es similar y verás un botón que indica Acceso al contador online y Consultar contador.
La idea es ver cuánto estás gastando y, posteriormente, encender el aparato que te interesa. Simplemente, es hacer dos mediciones y calcular la diferencia. Claro, esto es un poco orientativo y especialmente es útil cuando hablamos de electrodomésticos que consumen bastante, como puede ser un horno encendido, un radiador, etc. Si quieres saber cuánto gasta una lámpara, pues es poco exacto.
Utiliza un enchufe con medidor
Lo mejor, lo que realmente te da una exactitud del gasto de un aparato, es utilizar un enchufe con medidor de energía. Lo puedes conectar a algún electrodoméstico que te interese, como podría ser una lavadora, el lavavajillas a pleno funcionamiento, una estufa… Esto te permite conocer cuánto está gastando, de forma sencilla y exacta.
Además, muchos modelos guardan un historial. Esto es útil si quieres saber cuánto ha gastado un aparato en concreto durante todo el día, durante una semana o todo el mes. Por ejemplo, el aire acondicionado no consume siempre lo mismo, ya que depende de la temperatura ambiente, de si has tenido o no alguna ventana abierta, si lo has dejado mucho tiempo encendido… Saber el gasto durante todo el mes, te ayudará más que mirarlo en un momento puntual.
Debes asegurarte de comprar un medidor de consumo de garantías y que soporte el electrodoméstico que te interesa. Hay algunos que admiten una potencia baja, lo cual puede venir bien para una televisión o un aparato similar, pero no soportaría un horno encendido o un radiador de, por ejemplo, 2500 W. Incluso, si quieres varios, lo mejor que puedes hacer es ir directamente a comprar por packs de varias unidades. De esta manera, lo más probable es que te salga mejor de precio:
Además de que hay varias opciones en el mercado. Por lo que puedes elegir entre diferentes modelos. Lo que está claro es que este tipo de aparatos inteligentes te ayudarán a tener bajo control el consumo que haga cada dispositivo que conectes a la corriente a través de su enchufe integrado.
Este tipo de enchufes dan la oportunidad a los usuarios a conocer el consumo a través de la app que tenga el fabricante. Asimismo, cuentan con otras funcionalidades interesantes como puede ser la programación de encendido/apagado o el control remoto.
Medidor de energía Shelly EM
Si quieres tener bajo control la potencia demandada en tu hogar, y también el consumo que realizas en diferentes momentos, entonces debes comprar un medidor de corriente e instalarlo en el cuadro eléctrico, con el objetivo de medir cuántos amperios (A) o intensidad de corriente están pasando por el cable de fase de tu instalación (el cable de color marrón).
Muchos usuarios quieren tener bajo control cuánta potencia eléctrica estamos demandando en un determinado momento, para no pasarnos nunca de la potencia contratada, o al menos, pasarnos durante poco tiempo para que no se corte el suministro de electricidad en nuestro hogar. Además, también puedes medir el conusmo en diferentes horas, días o semanas, con el objetivo de compararlo con lo que mide el contador de nuestro hogar. Si quieres saber cómo debes instalar estos dispositivos, a continuación, os vamos a explicar cómo instalar un medidor de corriente Shelly EM directamente en tu cuadro eléctrico.
Este tipo de dispositivos son realmente útiles para el hogar inteligente, y es que tiene muchas aplicaciones que podemos darle. A continuación, podéis ver algunos usos que le damos nosotros a este tipo de medidores de corriente:
- Saber la potencia usada por toda la casa en tiempo real, para no tener que acceder al contador.
- Con la potencia usada, podemos saber la energía consumida.
- Almacenar estadísticas de potencia y energía consumida, viendo hábitos de consumo y optimizando al máximo el consumo en función de las horas donde la luz es más barata.
- Si tienes paneles solares, podrás monitorizar la producción solar fácilmente, viendo la energía generada, autoconsumida, exportada e importada. Todo ello desde nuestro panel de Home Assistant.
Al integrar nuestro dispositivo de Shelly EM en el sistema de domótica, podemos ver en detalle con gráficas el comportamiento de la energía que estamos usando, para posteriormente realizar ciertas automatizaciones avanzadas.
Un medidor de corriente como el Shelly EM, nos permitirá medir la intensidad de corriente o amperaje que atraviesa un cable eléctrico. Al comprar este dispositivo, tendremos en la caja una pinza amperimétrica de hasta 50A para colocarla en la fase general de la vivienda, o bien en el cable de fase que sale desde cualquier diferencial o magnetotérmico. De esta forma, midiendo la intensidad de corriente que puede variar, y el voltaje que siempre es de 230V en España, podemos calcular la potencia demandada (Potencia = Intensidad x Voltaje) en un instante (vatios o W), y también el consumo que se pide en Wh o kWh.
La forma de instalación de este dispositivo es muy sencilla, lo primero que debemos hacer es conectar los cables de la pinza amperimétrica al propio dispositivo. Si solamente tenemos una pinza, lo conectaremos en los conectores P1+ (cable rojo) y P1- (cable negro). Además, tenemos que alimentarlo mediante fase (L) y neutro (N), así que tenemos que conectarlo a algún sitio del cuadro eléctrico donde tengamos una toma de fase y neutro, para así alimentarlo, lo puedes hacer en cualquier magnetotérmico que siempre vayas a tener encendido.
Las instalación en un cuadro eléctrico debes hacerla con mucho cuidado, y ubicar el propio dipositivo en algún lugar donde pueda caber bien sin ningún problema. El cable de la pinza amperimétrica es lo suficientemente larga como para no tener problemas. La alimentación de fase y neutro, la puedes poner por debajo de cualquier magnetotérmico o diferencial, siempre respetando el cableado de fase (marrón) y de neutro (azul).
Una vez que hayamos realizado las conexiones, ahora tendremos que entrar en su configuración. En este ejemplo pondremos el Shelly EM que es el que tenemos nosotros en casa instalado, pero sería similar para cualquier otra marca.
El Shelly EM es uno de los medidores de corriente más recomendables, tanto por especificaciones técnicas como también por su gran relación calidad-precio. Además, este dispositivo nos permite medir dos fases, perfecto si tienes una instalación fotovoltaica en tu hogar, porque así podrás medir lo que genera dicha instalación. Las principales características de este dispositivo son las siguientes:
- Alimentación de entrada: corriente alterna de entre 110V-240V.
- Intensidad máxima soportada para medición: pinzas amperimétricas para medir 50A, pero también hay pinzas para medir hasta 120A.
- Conectividad inalámbrica: Wi-Fi en 2.4GHz para conectarse a Internet y red local, tiene Bluetooth para realizar su instalación mediante la app del móvil y para funcionar como repetidor Bluetooth.
- Sistemas de domótica compatibles: Amazon Alexa, Google Assistant, Siri, IFTTT e incluso Samsung SmartThings.
- ¿Soporta integración en Home Assistant?: sí, integración nativa con la integración de Shelly.
- Otras características: tiene un contacto seco para el control del contactor, almacena localmente los datos hasta 10 días en intervalos de 1 minuto, permite programar el contacto seco, y soporta scripting.
Ahora que ya conocéis sus principales características, vamos a ver cómo se realiza la configuración del dispositivo. Lo primero que debemos saber, es que podemos configurarlo de dos formas diferentes:
- Mediante la app móvil de Shelly, la cual puedes descargar desde aquí:
- Desde cualquier PC o móvil si lo conectamos a la red Wi-Fi que genera el dispositivo, y abrimos un navegador para poner la dirección IP http://192.168.33.1 para entrar en su configuración, este será el firmware vía web completo del dispositivo, y desde donde configuraremos todo.
En nuestro caso, siempre usamos la app móvil de Shelly porque es mucho más sencillo para realizar la configuración paso a paso. De hecho, si ya tienes otros dispositivos de esta marca, la instalación y puesta en marcha es exactamente igual, nada cambia.
- Abrimos la aplicación, nos registramos con un email válido y confirmamos ese email con el correo que nos enviarán.
- Pinchamos en «Añadir dispositivo» en el icono de «+».
- Seguimos el asistente de instalación, pnchando en «Agregar nuevo dispositivo» a través de Wi-Fi, aunque si vuestro Shelly EM es de los últimos y soporta Bluetooth, también podrás elegir Bluetooth.
- Eliges la red Wi-Fi a la que quieres conectarlo, pones su correspondiente contraseña y pulsar en «Sí» por si vas a añadir más dispositivos.






Ahora ya tenemos el Shelly EM configurado en nuestra red local, dependiendo del modelo
En estos instantes ya tenemos el medidor de corriente Shelly EM instalado y funcionando, de hecho, podrías integrarlo perfectamente en tu sistema de domótica con Home Assistant para tener una visión más detallada de todos los consumos que estás realizando en casa.
Haz cuentas
Si no puedes hacer lo que hemos explicado anteriormente, que sería lo ideal, puedes calcularlo. Claro, esto debes cogerlo un poco con pinzas, ya que dependerá de cada aparato, cómo lo uses, etc. Lo que está claro es que esta alternativa te llevará algo más de tiempo, pero te servirá en cierta manera para conocer cuál el gasto que hace cada mes. Para ello, necesitas saber la potencia de ese dispositivo, que se mide en vatios, así como el tiempo que va a estar encendido mensualmente. Es cierto que no tiene que ser exacto, pero si lo más aproximado para que el cálculo sea lo más real posible.
Por ejemplo, podrías tener un ventilador que tenga una potencia de 500 vatios. Vas a tenerlo encendido 4 horas al día, pues simplemente echas cuentas y estarás consumiendo unos 2 kWh. A partir de ahí, ya tendrías que ver a cuánto pagas el kWh y sacar el coste económico, más allá del consumo de energía. De esta manera, podrás saber cuál es el consumo mensual que tiene en tu factura de la luz.
Para saber la potencia de ese aparato, generalmente basta con mirar la etiqueta. También podrías consultar en Internet, leer el manual de instrucciones, etc. Es un valor que siempre vas a poder consultar, aunque será la potencia máxima que soporta y no siempre se adapta a lo que realmente utiliza. Por tanto, si no te aclaras con los datos que aparecen en Internet, lo mejor es que consultes la etiqueta del aparato para salir de dudas.
Ahora bien, este tipo de cálculo, como decimos, se puede complicar en muchos casos. Por ejemplo, podrías tener una estimación de lo que gasta tu aire acondicionado, la lavadora, el horno… Pero dependerá de cosas como la temperatura, si utilizas o no el modo Eco, si lo estás usando de forma eficiente, si puede estar deteriorado, si necesita que realices algún tipo de mantenimiento… Por lo que hay una gran variedad de factores que pueden marcar la diferencia en el consumo del electrodoméstico o dispositivo.
En definitiva, estas son las opciones que tienes para calcular el gasto de un aparato que tienes enchufado en casa. Como has podido ver, hay varias alternativas, con más o menos precisión, que te ayudarán a tener esta información y llegar a ahorrar dinero en caso de que tengas que realizar ciertos cambios.