Estas conexiones no dejan de ganar terreno al viejo par de cobre. Cada vez son más los usuarios que disponen de un acceso a Internet basada en fibra óptica o bien en HFC. Sin embargo, comienza a aparecer un problema para los usuarios. La falta de modalidades en la oferta de los operadores se ha convertido en un quebradero de cabeza para encontrar la opción que más se ajuste a sus necesidades.
Seguro que muchos usuarios prefieren disponer de la mayor velocidad existente hasta el momento. A pesar de todo, llega un momento en que no todo es velocidad y conviene buscar si el precio es el adecuado o tal vez completar la oferta con otros servicios. Por este motivo, existen algunos problemas para encontrar la velocidad que más se ajuste a las necesidades de los usuarios.
Podría decirse que Vodafone ha heredado algo que es un lujo para muchos: las velocidades existentes en ONO. En la actualidad, los usuarios pueden elegir entre 30, 50, 120 y 300 Mbps de velocidad, escogiendo obviamente la que mejor se adapte a las necesidades monetarias.
En el lado totalmente opuesto se encuentran los operadores que solo ofrecen una velocidad, 200 Mbps simétricos o bien 300 y 30 Mbps simétricos. Tal y como se puede observar existe un vano entre ambas velocidades y muy poca diferencia de precio entre ambas, lo que provoca que el ahorro sea mínimo. También os puede interesar conocer la forma de mejorar la fibra óptica y el Wi-Fi.
La fibra óptica y la poca variedad de modalidades
Cualquier excusa es buena para subir el precio del producto y la velocidad es sin lugar a dudas una. La escasez de opciones viene acompañada con unos precios que cada vez que se produce un aumento de velocidad repercute de forma negativa en el del producto, aunque solo sean un par de euros. Esto a la larga encarece el producto y obliga al usuario a prescindir de otros, como por ejemplo líneas móviles, tarifas de datos o bien otros productos como el servicio de televisión.
Cuando la velocidad deja de importar
Por este motivo, y aunque parezca raro, disponer de la más alta velocidad ha dejado de importar y muchos usuarios desearían disponer menos velocidad con un precio inferior y así configurar la tarifa más a su gusto. Y es que eso es un problema también, ya que muchas son cerradas y permiten introducir muy pocos cambios incluyendo por ejemplo paquetes de canales que el usuario no visualizará nunca o en muy pocas ocasiones. Para jugar por Internet la velocidad es fundamental.
Muchos creen que 20 Mbps simétricos o incluso 30 es una velocidad más que suficiente para disfrutar hoy en día con fluidez de todos los servicios existentes. Porque conviene recordar que ahora mismo se sube a Internet más que se descarga, de ahí que la velocidad de subida haya cobrado tanto protagonismo.
¿Crees que no son necesarios 300 Mbps simétricos? ¿Eres de los que piensan que 20 o 30 Mbps simétricos son más que suficientes?