Cuando contratamos una conexión a Internet, nuestro proveedor nos regala, o alquila, un router de manera que podamos conectarnos a Internet a través de él. Estos routers que nos ceden las compañías como Movistar, Orange, Jazztel, MasMovil o Vodafone, soy routers que vienen con una configuración por defecto de manera que con solo conectarlo, sin configurar nada, podamos empezar a navegar. Sin embargo, puede que con alguna configuración adicional podamos mejorar nuestra conexión según el uso que vayamos a hacer de Internet.
No todos los usuarios utilizan Internet para lo mismo. Hay algunos usuarios que simplemente contratan una conexión para navegar, ver redes sociales y leer el correo electrónico, otros que se dedican a ver vídeos en streaming (YouTube, Netflix, etc) e incluso a transmitir ellos mismos sus propios vídeos (YouTube, Twitch, etc), otros que descargan muchos archivos de Internet a diario y otros que juegan online a conocidos títulos como Fortnite y necesitan una conexión estable y de baja latencia. Podéis visitar nuestro tutorial para sustituir router SerComm H500-S.
Los routers de gama alta cuentan con opciones específicas para mejorar el rendimiento de la conexión según el uso que se haga de ella, así como con un servicio QoS que prioriza el tráfico más importante automáticamente sin tener que hacer nada. Por otro lado, los routers que nos dan las compañías de Internet son malos y muy limitados tanto en hardware como en software, aunque también se pueden mejorar sus prestaciones a pesar de sus limitaciones.
A continuación vamos a ver algunas configuraciones que podemos aplicar a nuestro router para mejorar el funcionamiento ofimático, es decir, para navegar por Internet o ver vídeos en webs como YouTube, sin ninguna necesidad especial.
Cómo configurar nuestro router para navegar por Internet
Normalmente, un uso normal de Internet como puede ser navegar por páginas web o ver vídeos en YouTube no requiere ninguna configuración especial para funcionar, aunque sí podemos realizar algunos cambios que nos ayuden a mejorar la velocidad y estabilidad de la línea.
Lo primero que debemos hacer es entrar en el menú de configuración de nuestro router. Para ello, abriremos una ventana de CMD desde Cortana en Windows 10 (o en el menú ejecutar (Windows + R) en cualquier versión de Windows) y ejecutaremos el comando «ipconfig» para poder averiguar la puerta de enlace.
Introducimos la IP de la puerta de enlace en el navegador web, introducimos el usuario y la contraseña de nuestro router y ya estaremos dentro del menú de configuración.
Funciones de seguridad para un router en modo ofimática
Los cambios que nos pueden interesar para un uso normal de Internet son, lo primero, repasar la seguridad. De esta manera, una vez dentro de la configuración del router, lo primero que debemos hacer es aprovechar para revisar la configuración de nuestro Wi-Fi, asegurándonos de usar un tipo de cifrado WPA2-AES y una contraseña segura para evitar accesos no autorizados. Siempre es importante cambiar la clave de acceso al router.
Nuestro router también tendrá un firewall, función que debemos activar para evitar ataques informáticos a nuestra red y filtrar el tráfico que podría ser peligroso.
También podemos reforzar la seguridad de nuestro router comprobando que no tenemos puertos abiertos (ya que si solo vamos a usar el navegador no los necesitaremos) y además también desactivar funciones innecesarias en nuestro caso, como el UPnP o la DMZ.
Otras configuraciones para mejorar la red para ofimática
No hay muchas más opciones que podamos configurar para mejorar el funcionamiento de nuestro router y optimizarlo para ofimática. La única configuración que nos puede ser útil es configurar los DNS en nuestro router de manera que el DHCP los asigne directamente a todos los ordenadores y dispositivos que conectemos al router en vez de utilizar los DNS de los operadores de telefonía.
Como cada router es diferente no podemos indicar el apartado concreto donde se encuentra esta configuración, aunque lo más común es verlo dentro de LAN, DHCP o DNS, dependiendo el firmware que utilicemos.
Aquí podremos colocar los servidores DNS que queramos usar. Por ejemplo, podemos configurar en uno de ellos el DNS de Google (8.8.8.8), en otro el DNS de Cloudflare (1.1.1.1) y en el tercero, si lo permite, Quad9, el DNS de IBM (9.9.9.9).
Tras guardar todos los cambios en el router y reiniciarlo ya estaremos funcionando con esta nueva configuración y, aunque no sea muy apreciable, sí podremos notar una leve mejoría en el rendimiento de nuestra conexión.