Con los precios elevados de la energía estamos en una época en la que ahorrar en la factura de la luz es aún más importante. A veces pequeños cambios pueden ayudar mucho para conseguirlo. Por ello en este artículo vamos a hablar de algunos cambios que puedes realizar desde hoy mismo y poder así gastar menos cada mes en electricidad. Verás que son recomendaciones sencillas de realizar en cualquier vivienda.
Consejos útiles para bajar la factura de la luz
Puedes tener muchas cosas en cuenta para intentar pagar menos en la factura de la luz. Sin embargo en ocasiones con cambiar algunos pequeños aspectos de nuestro día a día podemos lograr un cambio importante. El objetivo es pagar menos y poder aprovechar al máximo los recursos disponibles.
Cambiar temperaturas máximas y mínimas
Lo primero que puedes cambiar son las temperaturas máximas y mínimas. Esto lo puedes aplicar en diferentes electrodomésticos. Por ejemplo el frigorífico, congelador, calefacción o aire acondicionado. Simplemente subir o bajar un grado la temperatura puede suponer un ahorro importante en la factura de la luz.
Ahora bien, ¿qué debemos cambiar y cuánto? En el caso del frigorífico, lo ideal es que la temperatura esté entre 5 y 7 grados. No necesitas que esté a menos de eso. Lo mismo ocurre con el congelador, que lo ideal es que esté entre -16 y -18 grados. Ponerlo a menos temperatura no aporta nada en una vivienda normal.
Respecto a la calefacción, para ahorrar lo ideal es que esté a 19-20 grados. El aire acondicionado en verano no necesitas que esté muy frío, por lo que a partir de 23 grados es una buena cifra.
Acabar con el consumo fantasma
Aunque creas que tienes todo apagado, siempre hay algo que está consumiendo en tu vivienda. Es lo que se conoce como consumo fantasma. Por ejemplo puede ser una televisión en Stand By, un reloj despertador o incluso cargadores enchufados a la corriente aunque no estemos cargando nada en ese momento.
Se calcula que entre el 7 y el 10% de la factura de la luz es por el consumo fantasma. Por tanto, evitar esto en la medida de lo posible va a hacer que ahorres dinero. Intenta apagar cualquier aparato que tengas en casa y no los dejes en Stand By. Si conectas aparatos para gestionaren remoto el encendido y apagado, es importante evitar fallos con la red Wi-Fi.
Cambiar bombillas antiguas
Otro pequeño cambio que puedes hacer para ahorrar en la factura de la luz es cambiar tus bombillas antiguas. Si tienes algunas de hace años, puede que estés consumiendo más de la cuenta en la factura de la luz. Incluso cambiar las de bajo consumo por bombillas LED más actuales va a hacer que pagues menos.
Por tanto, revisa qué bombillas tienes en casa y piensa en comprar otras nuevas si ves que las que tienes consumen demasiado. Al final todo suma y pequeños detalles como este pueden ayudarte bastante.
Configurar aparatos
La configuración de los electrodomésticos y dispositivos que utilices en tu día a día también influye en el consumo de luz. Por ejemplo, puedes utilizar el modo eco en el lavavajillas o bajar el brillo de la pantalla de la televisión si no es necesario que esté al máximo. Pequeños gestos así pueden ser muy útiles.
Piensa en todos los electrodomésticos y dispositivos que tienes en casa. La mayoría permiten ajustar ciertos valores y poder así ahorrar en la factura de la luz al consumir menos recursos.
Revisar la factura
Por último, otro cambio más que puedes realizar es simplemente revisar tu factura de la luz. ¿Tienes una tarifa demasiado cara y que no se ajusta a lo que realmente necesitas? Tal vez cambiarla puede significar un ahorro importante, siempre y cuando no tengas ninguna permanencia mínima que debas cumplir.
Es posible que si pasas de la tarifa libre a la regulada puedas ahorrar, pero también que contrates alguna tarifa concreta del mercado libre que pueda ajustarse a tu consumo y así pagar menos. Eso dependerá de cada vivienda, por lo que conviene que lo revises.