Para poder ahorrar en la factura de la luz o gas cada mes, algo fundamental es controlar el uso de la calefacción y radiadores. Sin duda esto puede suponer una parte muy importante del consumo total. En este artículo vamos a hablar de si es buena idea o no apagar algunos radiadores de la vivienda con tal de pagar menos y ahorrar en la factura. Vamos a explicar qué consecuencias positivas o negativas puede tener esto.
Apagar o no algunos radiadores
Si tienes calefacción en casa, seguramente tengas radiadores repartidos por toda la vivienda. Algunos de ellos tal vez no los necesites o creas que no es necesario que estén encendidos. Por ejemplo una habitación que prácticamente no usas y te da igual la temperatura que tenga. Entonces, ¿conviene apagar algunos radiadores y ahorrar?
Lógicamente cerrar radiadores significa que no van a consumir recursos. No importa si se trata de una calefacción eléctrica o de gas. Aunque no suponga un ahorro enorme, el hecho de apagar un radiador de la vivienda va a hacer que el consumo disminuya. Por tanto sí es conveniente apagarlos cuando sea posible.
Es lo que se conoce como radiadores innecesarios. Básicamente son aquellos que están en habitaciones que no usamos y, por tanto, nos da igual que se calienten o no. Especialmente si tienes un termostato inteligente, puedes configurarlo para que en algunas estancias la temperatura que quieres mantener sea menor y así también ahorrar incluso sin tener que apagarlo por completo.
Con esto conseguimos que la caldera utilice energía más centrada en las áreas donde sí tenemos los radiadores encendidos. Esto va a hacer que se reduzca el consumo y no estés malgastando gas o electricidad para calentar alguna zona de la vivienda donde no vas a estar.
Consejos si vas a cerrar radiadores
Sí debes tener en cuenta algunos consejos importantes si decides apagar radiadores. Piensa que la calefacción lo que hace es mantener una temperatura en la vivienda. Por tanto, evita tener una habitación abierta si no tienes encendido el radiador. Si por ejemplo apagas el radiador de un dormitorio y dejas la puerta abierta, eso va a hacer que otra habitación que esté al lado o un pasillo tarde más en calentarse al pasar aire frío de un sitio a otro. Por tanto, cierra bien las puertas de los lugares donde los radiadores estén apagados.
Además, no es buena idea apagar y encender un radiador constantemente. Es decir, si por ejemplo vas a estar un tiempo en una habitación y luego no vas a volver a estar hasta un tiempo después, como pueden ser un par de horas, seguramente no te convenga apagarlo y luego encenderlo de nuevo. En este proceso vas a consumir energía, ya que va a tener que recuperar la temperatura nuevamente.
Otro consejo es que no dejes un radiador siempre apagado. Es decir, evita que pase un largo periodo de tiempo sin que lo enciendas. Por ejemplo no apagues un radiador de una habitación donde no lo necesitas y dejes que pase todo el invierno sin funcionar. Aunque no necesariamente tiene que ser negativo, sí que es conveniente purgarlo y encenderlo al menos cada varios meses, como puede ser al principio y final del otoño-invierno.
En definitiva, como ves apagar radiadores que no necesitas en casa es buena idea para ahorrar energía. Si bien no va a suponer un ahorro enorme, con el paso del tiempo sí que vas a poder evitar pagar de más y no derrochar luz o gas cada mes.