Si quieres ahorrar en la factura de la luz, hay pequeños detalles que pueden hacer que gastes bastante menos. Es importante controlar los electrodomésticos que consumen más electricidad. Ahí podemos nombrar el microondas, que si bien no está tanto tiempo encendido, consume bastante cuando lo usamos. En este artículo te contamos algo habitual que solemos hacer, pero que va a provocar un gran consumo. Además, te daremos una alternativa para ahorrar.
Puede que creas que no importa cómo uses el microondas para pagar más o menos en la factura de la luz pero lo cierto es que no es así y que pequeños cambios en nuestro día a día van a hacer que se reduzca el consumo y que se reduzcan, por tanto, lo que pagamos. No tenemos que prescindir de electrodomésticos que nos hacen mucha falta sino aprender la mejor forma de optimizar su uso y de sacar el máximo partido a sus funciones. Y si quieres ahorrar cuando utilizas el microondas podrás calentar comida pero, como te explicaremos en los próximos párrafos, es mejor que no lo utilices para descongelar.
No descongeles alimentos en el micro
El microondas permite calentar comida o bebida rápidamente, pero también descongelar alimentos. Tiene una función para descongelar algo que hemos tenido en el congelador y que esté listo en cuestión de minutos. Esto, lógicamente, va a suponer un gasto de energía importante. Vas a tener varios minutos en funcionamiento el micro y eso hará que gastes bastante.
Si esto es algo que sueles hacer frecuentemente, a lo largo de todo el año puedes gastar una cantidad importante de dinero. Podrías ahorrar en la factura de la luz si evitas descongelar alimentos en el microondas. Pero claro, a veces no queda más remedio y por rapidez es lo que hacemos en casa.
Nuestro consejo es que evites utilizar el microondas para descongelar alimentos. Eso te ayudará en tu objetivo de gastar menos energía y abaratar el coste de la factura cada mes. Pero vas a tener varias opciones para descongelar. La más típica, la más sencilla, es simplemente dejar la comida fuera descongelándose unas horas. Pero hay otra más que incluso te ayudará a ahorrar energía.
Consiste en descongelar los alimentos en el frigorífico. De esta forma, vas a poder aprovechar la inercia térmica. ¿Qué significa esto? Si metes algo congelado en el frigorífico, va a desprender frío. Aunque sea poco, va a permitir que el frigorífico tenga que consumir menos recursos para mantener una temperatura correcta.
Por tanto, con este pequeño gesto vas a poder evitar consumir en exceso energía, que sería al descongelar los alimentos en el microondas, pero al mismo tiempo ahorrarás luz al descongelarlos dentro del frigorífico. Es una pequeña cantidad, lógicamente, pero si lo haces así durante todo el año es una manera más de gastar menos.
¿Cómo lo hacemos entonces? Depende. Lo mejor es que los dejes en el frigorífico durante la noche anterior pero también hay ortos métodos como usar una bolsa hermética y colocarlos en agua caliente durante unos minutos, por ejemplo, o podemos usar algunos electrodomésticos que cuentan con esta función y que tienen un menor consumo como pueden ser algunos modelos de freidoras de aire.
¿Cuánto consume un microondas?
Cuando descongelamos algún producto en el microondas, por lo general suelen ser tiempos de uso que pueden ser relativamente largos. Aquí es donde se encuentran los factores para determinar el gasto del microondas durante ese tiempo. La potencia de estos aparatos se mide en vatios (W), la cual puede variar entre diferentes modelos. Por lo general es algo que suele variar entre los 600W y los 1200W. A mayor potencia, mayor será el consumo de energía durante ese tiempo de uso.
Si ponemos un ejemplo de unos 15 minutos, tendremos que hacer un cálculo de la potencia por el tiempo, lo que resultaría en la energía consumida en vatios hora (Wh). Si disponemos de un microondas de 1000W, tendremos que multiplicar esta medida por 0.25, que es lo equivalente a ese cuarto de hora. El resultado se elevaría hasta los 250Wh, lo cual tendríamos que calcular lo que cuesta cotejándolo con nuestra factura de la luz.
En todo caso, esto es una operación aproximada. No todas las casas cuentan con la misma eficiencia energética, donde se debería tener en cuenta las pérdidas de energía durante el proceso, o el consumo que tiene cualquier dispositivo cuando se encuentra en el famoso modo espera. El cual, también cuenta con un consumo, pero menor en todo caso. También vamos a depender del proveedor del servicio de electricidad, con el cual se pueden tener variaciones de precio según la ubicación, o que incluso pueden ser diferentes a los de otro proveedor. Por lo cual estamos ante un gasto que no sería fijo para todos los hogares, sino que será muy variado dependiendo de todos estos factores.
En estos casos, lo mejor siempre será consultar con el manual del fabricate, o por otro lado, buscar información sobre el consumo de la energía del modelo en particular en Internet o la página web de la marca que ha creado ese producto.
Sí debes usar el micro para calentar
Aunque hemos explicado que no es buena idea descongelar alimentos en el microondas, de cara a ahorrar, sí que se buena idea calentarlos aquí. Siempre que puedas, evita usar el horno y utiliza el micro para calentar la comida. Eso te ayudará a ahorrar energía y poder pagar menos en tus facturas cada mes.
No significa que el microondas consuma poca energía, sino que está mucho más optimizado. Si comparamos los recursos que consume un horno para calentar comida, son mucho mayores que un microondas. Está más optimizado y va a calentar la comida de forma rápida, por lo que ahorrarás dinero. Si usas un aparato domotizado, es fundamental evitar problemas si no aparece la red Wi-Fi.
Lógicamente no siempre vas a poder usar indistintamente el horno y el microondas. Habrá muchos casos en los que sí o sí tengas que utilizar el horno. Pero en aquellos en los que puedas elegir, utilizar el microondas es una buena idea de cara a ahorrar energía y pagar menos en la factura de la luz.
Como ves, un simple cambio de hábito como es evitar descongelar alimentos en el microondas y hacerlo en el frigorífico, puede ayudarte a ahorrar bastante energía. Vas a pagar menos en tu factura de luz cada mes. Eso, al cabo del año, puede ser una cantidad importante que, unido a otros cambios, te ayuden a gastar menos.