Al navegar por Internet son muchos los datos personales que pueden filtrarse. Nuestra información queda registrada en los sitios que visitamos, los servicios y plataformas que usamos en nuestro día a día. Por ejemplo cuando nos creamos una cuenta en una red social, en un sitio para comprar online o cualquier foro en la red. Todo esto podría quedar disponible para cualquiera. Esto hace que sea peligroso el rastro que dejamos en la red, ya que lo podrían utilizar en nuestra contra.
Datos que pueden recopilar en Internet
Como hemos mencionado, al navegar por la red, al registrarnos en sitios, realizar compras o usar diferentes servicios, podemos dejar mucha información personal. Aquí podemos incluir nuestro nombre y apellidos, dirección de correo electrónico, número de teléfono e incluso los datos de compra de la tarjeta bancaria.
Al registrarnos en una plataforma online estamos confiando en que ese sitio sea legítimo y no vaya a usar esa información con malos fines. Por ejemplo cuando entramos en una página web para realizar una compra, lo normal es que pongamos mínimo nuestro e-mail, dirección de casa, nombre y apellidos, así como el número de teléfono.
En caso de que ese sitio sea atacado o haya algún tipo de filtración, todos esos datos podrían terminar en malas manos o acabar siendo públicos en la red. Hemos visto numerosos casos de este tipo. Pero uno de los problemas más habituales es que dejemos olvidada una red social o un foro en el que nos registramos hace años. Puede que ese servicio haya pasado al olvido, que ya no sea utilizado por los usuarios, pero nuestros datos siguen ahí.
Hay que tener en cuenta que nuestra información personal tiene un gran valor en la red. Puede ser utilizada para diferentes técnicas que usen los piratas informáticos, como vamos a ver. De ahí que sea muy importante evitar dejar rastro y controlar la información que hacemos pública.
Qué pueden hacer con nuestros datos personales
Si un pirata informático logra hacerse con nuestros datos personales en Internet podría tener un amplio abanico de posibilidades para utilizarlos y lucrarse con ello. Un ejemplo es el hecho de poder incluirnos en campañas de Spam. A fin de cuentas podrían conocer cuál es nuestra dirección de correo, nombre e incluso el número de teléfono. Pueden tener también información sobre nuestros gustos, ya que van a obtener datos de páginas que hemos visitado, tiendas donde hemos comprado, etc. Siempre puedes ver la información que dejas en Internet.
Otra cuestión muy importante es que todo eso lo podrían utilizar para lanzar ataques Phishing personalizados. Esto es importante, ya que la probabilidad de éxito aumenta considerablemente. Es decir, no es lo mismo que una hipotética víctima reciba un e-mail genérico para iniciar sesión en algún sitio y que en realidad sea una trampa, a un correo más personalizado, con nuestro nombre e incluso con alguna plataforma que usemos como cebo. Podrían tener bastante más probabilidad de éxito.
Podrían llegar incluso a suplantar nuestra identidad. Esto es peligroso ya que podrían crear perfiles en redes sociales con nuestros datos, agregar a amigos o familiares que no sospecharían nada y, de esta forma, atacar a ellos también. Por ejemplo esto podrían hacerlo si envían mensajes por redes sociales que contengan malware o links maliciosos. Por eso siempre es importante detectar bots en redes sociales.
Por tanto, como hemos visto es muy importante evitar que nuestros datos personales queden en la red en plataformas que dejamos de utilizar. Siempre hay que proteger la información y no correr riesgos de ningún tipo. De lo contrario podríamos ser víctimas de múltiples ataques cibernéticos.