No hay dudas de que la domótica puede aportar muchos aspectos positivos a nuestro día a día. Permite automatizar tareas, controlar dispositivos, aunque estés fuera de casa, o incluso llegar a gestionar mejor el consumo de energía. Sin embargo, también hay que tener en cuenta algunos posibles costes ocultos que, tal vez, no has pensado. De ello vamos a hablarte en este artículo.
El objetivo es que puedas analizar si realmente te interesa o no domotizar tu vivienda, si puedes realizar cambios o tener en cuenta algunos factores que puedan venir bien. De esta forma, aprovecharás al máximo tus dispositivos y evitarás problemas que puedan provocar un aumento en el gasto.
Consumo oculto al tener una casa inteligente
Lógicamente, estos costes que vamos a mencionar, van a estar más o menos presentes en función de cómo tengas tu vivienda domotizada. No es lo mismo tener una simple bombilla inteligente, por ejemplo, que toda la cocina con electrodomésticos con Wi-Fi.
Gasto de energía
Lo primero que debes pensar es en el gasto de energía. Cuantos más aparatos tengas conectados en tu casa, más recursos vas a necesitar. Por ello, la factura de la electricidad puede subir. Es un coste que, inicialmente, no siempre tenemos en cuenta cuando empezamos a comprar aparatos inteligentes.
Una buena idea, de cara a abaratar ese coste en energía, es utilizar siempre dispositivos eficientes. Además, apagarlos cuando no vayas a usarlos es otra medida que puedes aplicar. Echar un vistazo a la configuración, es otro factor a tener en cuenta. En muchos casos, podrás realizar ajustes para que el gasto de energía disminuya y sean más eficientes los dispositivos.
Suscripciones para ciertos usos
Hay dispositivos de domótica que puedes usar gratis, pero solo de forma limitada. Si quisieras optar a ciertas funciones, y darle un uso completo, vas a tener que pagar una suscripción, la cual suele ser mensual o anual. Es algo que vemos en algunos modelos de timbres o altavoces inteligentes, por ejemplo.
Antes de comprar un modelo de cualquier aparato de domótica, es importante que te informes de posibles cargos adicionales que podría haber para usarlo al máximo. Esto evitará que haya costes futuros y puedas elegir otro dispositivo, en caso de ser necesario.
Reponer o actualizar dispositivos
También debes tener en cuenta que puede ser necesario reponer los dispositivos cada cierto tiempo. Puede ser simplemente una batería, que se gaste o estropee, pero también un aparato que quede obsoleto, que no tenga compatibilidad con otro nuevo sistema que quieres empezar a usar, etc.
Además, puede que quieras mejorar lo que ya tienes. Por ejemplo, tener sensores de temperatura en diferentes zonas de la casa, pero tener que comprar otros nuevos para cubrir otras habitaciones donde quieres controlar la calefacción o el aire acondicionado.
Es importante que revises la compatibilidad de los dispositivos que utilizas. En caso de querer ampliarlos, de agregar nuevos aparatos, tendrán que ser compatibles entre sí. De esta forma, evitarás tener que comprar todo de nuevo, lo cual supondría un gasto extra que tendrías que asumir.
Puede que tengas que mejorar el Wi-Fi
Domotizar la casa, también va a requerir de una buena conexión Wi-Fi. En caso de que tengas problemas, tendrías que comprar algún repetidor, sistema Mesh o dispositivos PLC. Esto va a suponer un coste, lógicamente. Son aparatos que, si quieres que tengan buena calidad, pueden llegar a costar bastante.
Por tanto, el tema de la conectividad es otro factor más a tener en cuenta y que puede hacer que tus dispositivos de domótica supongan un coste adicional.
En definitiva, todo esto deberías tener en cuenta si piensas en instalar domótica en tu hogar. Tal vez haya costes ocultos que, de primeras, desconozcas. Revisar todo muy bien, va a ser clave para no tener problemas.