Para ahorrar en la factura de la luz, algo fundamental es comprender nuestra tarifa. Esto nos ayudará a saber en todo momento qué tenemos contratado, cuánto estamos pagando y de qué manera podríamos pagar menos si hacemos algunos ajustes. En este artículo vamos a hablar de la potencia punta y valle. Vamos a explicar en qué consiste y por qué podrías pagar menos cada mes si lo ajustas correctamente.
Si cada mes la factura de la luz te sorprende, ya sea porque has tenido que pagar más o menos, lo cierto es que hay una serie de aspectos que debes conocer para tener una mayor idea de cuál es el motivo que afecta a lo que pagas mensualmente. Se trata de la potencia punta y valle que se usa en España. En función de las horas en las que consumas más luz en casa, pagarás más o menos todos los meses. Por lo que el horario juega un papel muy importante en este sentido.
Qué es la potencia punta y valle
Si miras tu factura de luz, verás un apartado en el que aparece la factura punta y valle que tienes contratada. Generalmente, la gente suele tener exactamente lo mismo. Por ejemplo, 5 kW. Pero también podrías llegar a tener una cantidad en punta y otra diferente en valle. Todo eso lo vas a poder mirar en cualquier factura que tengas.
Pero, ¿qué diferencia hay? La potencia se mide en kW y es básicamente lo que va a permitir que conectes cosas a la electricidad. Si tienes una potencia baja, como podría ser de 3 kW, podrías tener problemas si conectas el horno, algún radiador y otros aparatos que consuman bastante. Podrías sufrir cortes eléctricos repentinos, es decir, que se bajen los plomos de la vivienda al conectar más dispositivos y aparatos de la cuenta a la corriente. En cambio, si la potencia es mayor vas a tener más margen para poder conectar cosas. Eso sí, pagarás más todos los meses. Por lo que podrás notar una gran diferencia todos los meses en función de cada kW de potencia contratada.
El tramo de potencia punta (denominado como tramo P1) es de lunes a viernes de 8 de la mañana a 12 de la noche. Se considera las horas en las que más energía se consume. Es cuando hay más industrias funcionando, más empresas en su día a día y la gente en general en casa también gastan más. En cambio, la potencia valle (denominado como tramo P2) es de 12 de la noche a 8 de la mañana y también las 24 horas de los sábados y domingos o festivos.
Por qué podrías ahorrar en la factura
Ahora bien, ¿por qué podrías pagar menos si ajustas la potencia punta y valle? En tu factura verás un importe de cada uno de estos valores. Cuanto mayor sea la potencia, más pagarás en tu factura al mes. De hecho, es un importe fijo que es independiente de lo que consumas. Hay algunas comercializadoras que ponen el precio de la potencia punta y valle exactamente igual, sin embargo, hay otras que distinguen ambos conceptos para que puedas ahorrar en esos horarios. Actualmente los contadores permiten configurar dos potencias diferentes en valle y punta. Puedes conseguir un ahorro directo de más de 100€ al año si ajustas correctamente la potencia, tanto en P1 como en P2.
Por ejemplo, en el caso de Endesa el precio a fecha de octubre de 2025 es de 41,37€ por kW y año, así que bajar un 1kW de potencia contratada significa ahorrar al año esos 41,37€ que nos cuesta. Sin embargo, en el caso de Iberdrola a fecha de octubre de 2025, el precio es de 39,49€ por kW y año en periodo punta, y en periodo valle el precio es de 16,99€ por kW y año. En esta última, hay una clara diferencia entre el precio de punta y valle, así que a lo mejor te compensa para así ajustar la potencia contratada.
Si quieres ahorrar en la factura, algo que puedes hacer es ajustar la potencia. Ahora bien, tal vez el problema tuyo sea que en ocasiones utilizas varios electrodomésticos al mismo tiempo y no quieres que haya cortes. ¿Qué puedes hacer? Lo que podrías hacer es bajar todo lo que puedas la potencia punta, que es la más cara, pero mantener la potencia valle. De esta forma, puedes aprovechar las horas del día o los sábados y domingo para usar aparatos que puedan necesitar una mayor potencia. Por ejemplo, poner el lavavajillas, lavadora, etc. La idea es tener una potencia punta más baja y pagar mucho menos en la factura cada mes, mientras que la potencia valle nos importa menos al ser mucho más económica.
¿Te conviene bajar la potencia?
Dependiendo de la potencia que demandes, podrás ajustarla para que no salte el ICP (Interruptor de Control de Potencia) de tu contador, pero que tampoco te sobre mucho y estés pagando por absolutamente nada. La clave de todo es saber cuánta potencia estás demandando, en la factura de la luz siempre te pondrá la potencia máxima demandada en el último año. Por ejemplo, imaginemos que tienes contratado 4,4kW de potencia, pero en el último año la potencia máxima demandada ha sido de 3kW, en este caso, tenemos 1,4kW de potencia en exceso, así que deberías bajarla porque no la estás usando.
A través de las webs oficiales de las distribuidoras, puedes acceder a tu contador en tiempo real, para realizar una medición, e incluso puedes ver el histórico de potencias demandadas. n la factura de la luz también te aparecerá qué distribuidora hay en tu zona, una vez que sepas esta información, deberás acceder a la web oficial. Puedes acceder directamente desde aquí a las principales:
Por tanto, como ves, puedes ahorrar en la factura cada mes si ajustas la potencia contratada con la energética que tienes en este momento. Y también puedes aprovechar que la potencia valle es mucho más barata y centrarte en intentar reducir la potencia pico y pagar así menos.
Cómo cambiar tu potencia contratada
Cambiar la potencia contratada es un proceso que conlleva un coste, pero a medio y largo plazo merece la pena. Por ejemplo, si necesitas bajar la potencia tendrás que abonar 9,04€ por derechos de enganche. Además, si necesitas subir la potencia, también tendrás que pagar. Es recomendable que nunca bajes demasiado la potencia, porque te saltará el ICP del contador, y si quieres subirla te cobrarán bastante dinero por ello. Para hacer este trámite, es necesario que llames por teléfono a tu comercializadora de electricidad, es un proceso muy sencillo:
- Llamar por teléfono a tu compañía de luz.
- Pedir la reducción de la potencia, tanto para los periodos P1 como P2.
- Indicar qué potencia quieres contratar exactamente. Hace años solamente podías contratar cierta potencia, como 3,45kW o 4,4kW, sin embargo, actualmente se permite contratar en múltiplos de 0,1kW, por lo que podrías contratar 3kW directamente o 4,2kW, ya que no tenemos esta limitación.
Una vez hecho esto, el proceso tarda unos 15 días aproximadamente, así que es posible que en la siguiente factura se vea reflejado el coste de la nueva potencia contratada o no. Esto depende del ciclo de facturación que tengas con tu comercializadora. Hay una restricción legal, y es que solamente puedes cambiar voluntariamente la potencia una vez al año (cada 12 meses), así que asegúrate de elegir bien la potencia contratada.
