La potencia que tienes contratada de luz en casa, es un factor importante para calcular lo que vas a pagar. Cuanto mayor sea, más pagarás. Pero claro, no puedes quedarte corto, ya que eso podría dar lugar a apagones y no poder usar determinados aparatos. Por ello, en este artículo vamos a hablarte de qué debes tener en cuenta para saber si necesitas contratar más potencia o no para tu vivienda.
El objetivo es tener exactamente lo que realmente necesitas. Tal vez tengas que bajar un poco lo que tienes contratado o, por el contrario, elevar la potencia. En ambos casos, este cambio debes hacerlo sin cometer errores, por lo que es clave analizar bien qué te interesa más y así no cometer errores.
Contratar o no más potencia
Si has llegado hasta aquí, puede significar que tengas dudas sobre si necesitas o no contratar más potencia para tu vivienda. En líneas generales, esto es algo que no se suele cambiar tanto. Sin embargo, sí es cierto que mucha gente tiene contrada una potencia que no corresponde con la que realmente van a demandar. Y esto puede ser tanto por abajo, como por arriba.
Revisa la factura
Lo primero que debes hacer es revisar la factura. Allí, cada mes, vas a ver el pico de potencia que has demandado en los últimos 12 meses. Puedes verlo en el periodo valle y punta. Esto ya te dirá cuánto es lo que has demandado, como máximo, en los últimos meses y te ayudará a decidir si puedes realizar algún cambio.
Por ejemplo, si ves que has demandado 4,5 kWh, pero tienes contratados 4 kWh, tal vez deberías plantearte subir un poco la potencia. Esto evitará que se vaya la luz (aunque siempre hay un pequeño margen, para algo puntual). Podría darse el caso contrario y que estés demandado mucho menos de lo que tienes contratado.
¿Has cambiado algún aparato?
Otro aspecto que debes tener en cuenta, es si has cambiado algún aparato. Por ejemplo, tal vez has comprado algún horno que requiere de más potencia, has instalado un nuevo aire acondicionado que vas a encender bastante, etc. Cambios de este tipo, pueden suponer una demanda de electricidad mayor.
Pero podría darse el caso contrario, en el cual hayas cambiado algún electrodoméstico por otro más eficiente. En esta ocasión, vas a necesitar menos potencia y, por tanto, podrías ahorrar en la factura de la luz y no pagar tanto.
Tienes apagones continuos
Cuidado porque esto no va a significar siempre que debas cambiar la potencia contratada, pero sí que deberías analizarlo si te ocurre. Esto puede pasar cuando consumes más de lo que tienes contratado. Por ejemplo, si tienes contratada una potencia de 4 kWh y estás consumiendo 5, eso provocará que se vaya la luz.
Pero ten en cuenta que los apagones pueden deberse a otros motivos, por lo que deberías descartar otros problemas. Tal vez haya algún fallo con algún electrodoméstico, algún problema con el suministro (por ejemplo, una obra que estén haciendo en tu calle), etc.
En definitiva, esto puedes tener en cuenta para conocer si te conviene o no subir la potencia de electricidad que tienes contratada en casa. Esto te ayudará a evitar problemas y que no se apague la luz al encender muchas cosas.