Cuando tienes paneles solares en casa, lo último que imaginas es quedarte sin electricidad. Pero si no tienes batería o un sistema bien pensado, puede ocurrir perfectamente. En este artículo te explico por qué sucede, qué puedes hacer si se va la luz y cómo preparar tu instalación solar para emergencias reales.
Aunque parezca irónico, tener paneles solares no garantiza que tengas electricidad cuando se va la luz. Lo aprendí de la peor manera, durante una tormenta que dejó a medio barrio sin red eléctrica. Los paneles estaban ahí, en el tejado, generando energía con el sol de la mañana… pero mi nevera seguía apagada. ¿La razón? No tenía batería, ni un sistema preparado para funcionar sin la red eléctrica exterior, lo que se conoce como modo isla u off-grid.
¿Por qué los paneles solares dejan de funcionar durante un apagón?
Aunque tengas energía solar, si tu instalación está conectada a la red (como casi todas), se desconectará automáticamente en caso de corte eléctrico. Es una medida de seguridad: evita que la electricidad fluya hacia los cables de la red mientras los técnicos trabajan en reparaciones. El problema es que eso también te deja a ti sin luz, aunque haya sol. Si no tienes una batería solar o un inversor preparado para funcionar de forma aislada (modo isla), tu sistema simplemente se apaga hasta que vuelve la red.
Esto se llama «desconexión por seguridad», y es obligatorio en todas las instalaciones de autoconsumo con paneles fotovoltaicos conectadas a red. Así que si quieres seguir teniendo luz durante un apagón, necesitas pensar en alternativas reales de respaldo.
Mejores opciones para seguir teniendo luz con tus paneles
Lo ideal es tener tu sistema solar preparado para funcionar en «modo isla». Para eso, aquí tienes varias opciones, desde las más accesibles hasta las más completas:
Configura tu inversor en modo isla correctamente
Todos los inversores denominados como «híbridos», es decir, lo que también soportan la conexión de baterías u otros tipos de energía como generadores, permiten configurarse en modo isla para que siga todo funcionando aunque no haya corriente eléctrica del exterior. En estos casos, es muy importante que bajes el «Interruptor General Automático» de tu vivienda, porque en caso de que vuelva la electricidad, si tienes el inversor en modo isla podría dañarlo con graves consecuencias.
Por lo tanto, si se va la luz notarás un corte en el suministro de tu casa, lo que debes hacer es bajar el IGA y posteriormente habilitar el modo isla en tu inversor, en este orden. Aunque no haya alimentación del exterior, el inversor sí estará encendido debido a los paneles solares, por lo que no hay problema ninguno. Además, hay algunos inversores que puedes cablearlos con un relé de contacto seco para que se ponga en modo isla automáticamente.
Lo mejor es que revises la documentación oficial de tu inversor para ver cómo se hace correctamente. Eso sí, funcionan solo durante el día y con una potencia limitada, así que solo podrás usar aparatos esenciales. Además, requieren instalación profesional y un diseño adecuado del sistema.
Baterías solares: la solución más eficaz (y más cara)
Con una batería solar puedes almacenar la energía que generan tus paneles durante el día y usarla por la noche o cuando se va la luz. Es la opción más segura para no quedarte tirado.
Con baterías de litio (como la Powerwall de Tesla o sus alternativas), puedes mantener encendidos los electrodomésticos esenciales durante varias horas o días, dependiendo de su capacidad.
Hoy en día hay baterías realmente baratas, aunque todo depende de la marca. Por ejemplo, si tienes un inversor Deye o Victron que son muy compatibles con diferentes baterías, puedes comprar 5kWh de capacidad por unos 1.200€ aproximadamente.
Si tienes un inversor de Huawei, tendrás que comprar sus populares LUNA, no obstante, estas baterías son bastante más caras, y en muchos casos merece la pena comprar otro inversor y posteriormente baterías más baratas.
Generadores solares portátiles: perfectos para emergencias puntuales
Si todavía no puedes permitirte una batería completa, puedes usar un generador solar portátil con una pequeña placa solar. Por unos cientos de euros, puedes cargarlo con el sol y usarlo para mantener la nevera, una luz y cargar el móvil. No es una solución a largo plazo, pero te saca del apuro.
Dependiendo de tus necesidades de energía, podrás comprar modelos que parten desde los 250Wh de capacidad, hasta modelos de 2kWh de capacidad o más. Estos equipos son perfectos si no tienes paneles solares ni ningún inversor en tu hogar.
Generador de gasolina o diésel (como último recurso)
No es lo más ecológico ni silencioso, pero un generador de gasolina puede darte respaldo durante un apagón prolongado. Lo malo es que hacen ruido, contaminan y requieren combustible. Solo lo recomiendo si vives en una zona con apagones frecuentes y no tienes otra opción más limpia. Hay algunos inversores solares como los Deye, que permiten la conexión de un generador diésel con el objetivo de recargar las baterías que haya conectadas, o directamente alimentar todo tu hogar.
Si viene el apocalipsis, es una grandísima opción si tu inversor solar lo soporta, porque conectarás este generador a dicho inversor, y la luz volverá a casa, además de recargar las baterías para apagarlo y poder dormir.
Cómo preparar tu sistema solar para emergencias
Tener paneles solares es un gran paso, pero si realmente quieres estar preparado para un corte de luz largo, necesitas pensar más allá:
- Revisa tu consumo eléctrico básico: nevera, luces, router, calefacción o aire. ¿Cuánta energía necesitan?
- Calcula cuánta batería necesitas para aguantar al menos una noche o dos días nublados. No escatimes en capacidad si quieres tranquilidad.
- Piensa en el inversor: si tu sistema actual no permite desconexión de la red, plantéate sustituirlo o añadir un sistema híbrido. Marcas como Deye o Victron son altamente recomendables.
- Haz pruebas: desconecta la luz de tu cuadro general y comprueba cuánto aguanta tu sistema actual. Es mejor descubrir fallos ahora que durante un apagón real. También verifica si ese inversor hace el cambio rápidamente para que tus dispositivos electrónicos no les afecte lo más mínimo.
Y sobre todo, si estás empezando desde cero, pide siempre un diseño a medida que tenga en cuenta estos escenarios. Muchas instalaciones solares se hacen pensando solo en ahorrar en la factura, pero no en tener energía cuando más la necesitas.